Victoria crucial para el Bodegas Rioja Vega, no exenta de sufrimiento. Sus aficionados ya están acostumbrados a los altibajos. Tras una enorme primera parte, los abulenses han apretado de lo lindo, llegando a ponerse muy cerca en el electrónico. Afortunadamente para los riojanos, su acierto desde la línea exterior ha acabado dejando los puntos en Logroño.
El Clavijo no tenía demasiado margen. En un formato tan competitivo de sólo 22 jornadas, cada partido vale su peso en oro. Los seis primeros se jugarán el ascenso, mientras que los seis de cola pelearán por no descender a EBA. Antes del encuentro, los de Jenaro eran séptimos a falta de 10 jornadas. Urgía ganar.
En el primer acto, los locales han mostrado su mejor cara. Con buen juego en la pintura y acierto desde la línea exterior, han abierto brecha desde el comienzo (22-16), para disparar la diferencia a la veintena (47-27). Arnau Parrado, con 17 puntos, ha brillado con luz propia durante todos los primeros 20 minutos.
Sin embargo, tras la salida de vestuarios, Óbila ha empezado a acercarse peligrosamente, finalizando el tercer cuarto a doce puntos (63-51). En los últimos compases, el encuentro ha llegado a igualarse muchísimo (70-65). Los visitantes han desperdiciado varios tiros libres y eso les ha pesado finalmente. A base de triples, los logroñeses aseguraron la victoria (81-69). Con 7-6 de parcial, viajarán a Salamanca para medirse a CB Tormes (domingo 12:30).
