Ha llegado por fin el día más esperado por los más pequeños de la casa y, no nos engañemos, también para algún que otro mayor que sigue teniendo muy presente el niño que lleva dentro.
Los más madrugadores han empezado a llegar a las inmediaciones de Las Gaunas en torno a las 7 horas con el objetivo de ser los primero en entrar al estadio para coger el mejor sitio. Y es que nada es pronto si se trata de ver llegar a sus Majestades los Reyes de Oriente. ¿Quién no quiere darles la mano y recordarles lo que han pedido?
El frío no ha impedido que muchas familias se acercaran con mantas hasta el estadio. Las filas se iban haciendo infinitas con rapidez, pero los niños han calmado los nervios y las bajas temperaturas corriendo y jugando.
