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La SD Logroñés, obligada a ganar a la Cultural para mantener esperanzas de salvación

Foto: SD Logroñés

La SD Logroñés recibe a la Cultural Leonesa de Raúl Llona (Las Gaunas, domingo 18:00), con una extrema necesidad de victoria, para evitar acercarse todavía más al descenso a Segunda Federación. Después de caer ante Unionistas (1-0) y a ocho puntos de la salvación tras la victoria del Sestao River, los hombres de Aitor Larrazabal tienen complicado salir del abismo. Deben intentarlo y lo harán sin Trespalacios, baja por sanción y Curro por lesión. Conejero, a pesar de no estar al cien por cien, ha entrado en la convocatoria. Enfrente estará el mejor entrenador que los blanquirrojos han tenido en su historia, al mando de unos visitantes en persecución del playoff de ascenso.

El listón que dejó Llona, acompañado del director deportivo Miguel Chocarro, en la Sociedad Deportiva Logroñés se presumía difícil de alcanzar y la práctica así lo ha demostrado. El entrenador riojano acabó noveno con 51 puntos y con la salvación encarrilada a falta de un tercio de la temporada. Sacó petróleo del presupuesto más bajo de la categoría y su huella es difícil de olvidar. Solo meses después, la situación blanquirroja es totalmente opuesta. Ya han pasado tres entrenadores (Jordi Fabregat, Andrés García y ahora Aitor Larrazabal) y los resultados no llegan. Así lo confesó Larrazabal: “Vine a Logroño porque era una plantilla susceptible de mejorar, pero no hemos sido capaces, entre todos, de revertir la inercia”. Ya van cinco encuentros sin ganar (un punto de quince).

Foto: Real Sociedad

Una dinámica que se ha llevado por delante también a Juanma Barroso, director deportivo; mientras que ha hecho llegar a un nuevo gerente Javier González. Una figura más especializada que advirtió desde su llegada que la continuidad del presente entrenador también estaba en riesgo. Los resultados mandan y en el caso de Larrazabal, solo ha conseguido un triunfo en los trece encuentros que lleva en el banquillo blanquirrojo. Una sufrida alegría frente al Arenteiro, cuatro tablas y ocho derrotas muy duras. En total, 7 de 39 puntos posibles. Peor que Fabregat (9 de 21) y que Andrés García (10 de 30). Definitivamente, no es el año.

La bola de nieve se agranda y entre lesiones, mala fortuna o jugada polémica en contra, solo quedan ocho partidos para el final. Es la Ley de Murphy, tantas veces repetida en el fútbol, como demuestra el cruel y polémico final en Salamanca. Un penalti no pitado a favor y otro dudoso penalti pitado en contra. Y otra derrota para el casillero. Solo es un grano más a la enorme montaña de obstáculos en la que se ha convertido la temporada. A estas alturas, la única forma de librar el descenso sería acumular hasta seis triunfos de los ocho encuentros que quedan. Misión difícil, pero hasta que las matemáticas digan lo contrario…

Es ahora o nunca y lo es para figuras como Jordi Escobar o Dani Garrido. El primero lleva siete tantos y tres asistencias con los blanquirrojos, pero no ‘moja’ desde el 4 de febrero, cuando empató el encuentro frente al Barcelona Atlètic (1-1). Su lesión mermó al catalán, igual que a un Dani Garrido que estuvo once jornadas consecutivas sin jugar por su rotura del menisco externo. La SD Logroñés necesita imperiosamente el gol de Escobar y la magia de Garrido. Son los dos mejores de la plantilla y deberían marcar diferencias. Claro que, con la presión que el vestuario arrastra, esto es mucho más difícil.

Desgraciadamente para sus intereses, la ansiedad ‘devora’ a los futbolistas en cada partido. Lo ha repetido Larrazabal, que llegó a afirmar hace bastantes semanas que los jugadores “eran más genuinos al principio de temporada”. Cada blanquirrojo, en palabras de su entrenador, siente tantas ganas de agradar a su afición que “toman malas decisiones”. Y es que no solo con corazón se ganan los partidos. Muchas veces hace falta mantener la cabeza fría, pero es complicado explicárselo a un equipo en dicha situación.

Llona quiere asaltar el playoff en Las Gaunas

Además de tanto condicionante propio, el rival no puede descontarse. La Cultural Leonesa cuenta con 48 puntos y se sitúa a cinco puntos de la zona de playoff, después de que la Ponferradina hiciera sus deberes (53). Es cierto que los cazurros dejaron atrás una racha de diez encuentros sin ganar con triunfo ante el Lugo (2-0). Una victoria tiempo para reengancharse a la batalla por una zona alta que los leoneses ocuparon durante varias jornadas. Incluso ocuparon tres semanas el liderato durante la primera vuelta. Es la muestra del potencial de una entidad que ya jugó en Segunda División en la 2017-18 y que desde entonces, ha arrastrado una trayectoria descendente.

Foto: Cultural Leonesa

El dinero de la catarí Aspire Academy no lo es todo, aunque sí ayuda a construir una buena plantilla. Nombres conocidos de la categoría como el portero Miguel Bañuz, el delantero Guillermo Fernández o los ex blanquirrojos Carlos Calderón o Santi Samanes (lesionado del cruzado) completan un equipo llamado, al menos, a ser competitivo en el playoff. En el partido no estará el mencionado Samanes, ni tampoco Guitián, lesionado en su rodilla. Además, tampoco estará Fornos, por acumulación de amonestaciones. Sí lo hará Martín Solar, autor del doblete en la última jornada. Una de sus amenazas.

Con todo, a favor de la SD Logroñés juega el hecho de que la Cultural solo haya ganado tres veces como visitante, la última, el 12 de noviembre. Además, la hemeroteca entre ambos conjuntos registra dos encuentros en Las Gaunas, con resultado de un triunfo local y un empate (en diciembre de 2021). Y por seguir con la estadística, el colegiado cántabro Pardeiro Puente arbitrará la contienda. También ha dado suerte a los riojanos, con resultado de dos victorias y un empate.

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