Ha llegado el momento. La Calzada recibe este sábado al Racing Villalbés (sábado 17:00, El Rollo), en una oportunidad histórica. Tras el 1-1 de la ida, el ganador del partido ascenderá a Segunda RFEF en la última ronda. Después de mes y medio de playoff, la recompensa ya está en la puerta. La ocasión, única en el siglo de historia del fútbol en Santo Domingo, dejará también un récord de asistencia en las gradas. Se prevén 2.000 asistentes en un campo equipado con gradas supletorias. No van a caber todos. De ellos, más de 200 aficionados gallegos también querrán vivir su oportunidad.
El camino hasta esta ronda ha sido bastante duro. Treinta partidos de liga regular y otros cinco de playoff. Todas ellas repletas de sufrimiento. El primer escollo fue la Oyonesa (0-0 en la ida y 5-2 en El Rollo). Una vuelta donde los vascos se adelantaron por 1-2. Cerca del filo de la eliminación, el central Sergio rescató a los calceatenses con un gol en el 89, allanando el camino hacia una exitosa prórroga. En la siguiente ronda, los riojalteños doblegaron al Varea (1-1 en El Rollo y 0-2 en el Municipal). Sergio volvió a aparecer para empatar la ida y en la vuelta, Vitorica y Chuchi hicieron historia tras la prórroga.
Foto: FC La Calzada
Superada la fase autonómica tocó viajar hacia Villalba. A Magdalena, un campo situado en el interior de Lugo, sería el escenario. El partido acabó 1-1, pero es honesto decir que el Racing Villalbés fue superior y gozó de más ocasiones que los riojanos. De hecho, el resultado vale su peso en oro. Vérez adelantó a los gallegos tras rematar un saque de esquina y en acoso total, Pablo Rey falló un penalti que hubiera sentenciado la eliminatoria. Ese error levantó a los riojanos, que empataron por medio de Duce, antes del descanso. Y a partir de ahí, defensa numantina, con Arraiz cuajando un gran encuentro bajo palos.
Tras salir vivo de Galicia, el La Calzada espera completar la faena en casa. Quizá no sea el favorito visto el guion de la ida, pero a ilusión no le gana nadie. Su afición ya ha preparado un sábado plenamente rojillo. En el Bar La Cueva, a las doce del mediodía y hasta las tres de la tarde, habrá música en directo con el DJ Gómez y reunión de toda la afición. A las 15:45, arranca la quedada y charanga, que partirá a las cuatro de la tarde hacia el escenario del partido. Debido a la alta afluencia de aficionados, el club desaconseja acudir con coches particulares. Aficionados como Luis Rioja o la peña ‘El Afilador’ no fallarán.
Enfrente estará un rival muy peligroso. Al igual que los riojanos, concluyeron la liga en cuarta posición. Sin embargo, ha demostrado moverse como pez en el agua en las eliminatorias. De hecho, el Villalbés eliminó a los dos máximos favoritos de Galicia (Rápido de Bouzas y Arousa). El Rápido se impuso por 0-1 en la ida, pero Cuadrado y Make dieron el pase a los lucenses en la vuelta (0-2). La final regional, ante el Arosa, comenzó con 1-1 en la ida. Una semana más tarde y en el campo del rival, los hombres de Simón Lamas vencieron por 1-2, gracias a Pablo Rey y José Varela. Ambas eliminatorias, decididas con victoria fuera de casa.
FOTO: Racing Club Villalbés.
Natural de Villalba, Simón Lamas llegó al banquillo del equipo de su vida en el 2018. Nacido en 1992, es más joven que algunos de sus jugadores. Su equipo, lleno de jugadores con experiencia en Segunda RFEF, como Souto, Diego López, Marcos Álvarez y sobre todo, su pieza clave, Pablo Rey. A sus 38 años, maneja todas las jugadas a balón parado. Precisamente, de ahí vino gran parte del peligro en la ida. La plantilla guarda también otra curiosidad: Buyo, el lateral izquierdo, es hijo de la leyenda Paco Buyo, que estará, por cierto, En Santo Domingo. Con todo ello, el equipo ha llegado por primera vez a una ronda final de ascenso, igual que el La Calzada.
En cuanto a estilo futbolístico, el Villalbés demostró en Galicia que puede asumir un alto ritmo de circulación de balón, como base para crear un gran número de ocasiones. De hecho, su falta de puntería les perjudicó en la ida. Mucha atención a las jugadas de balón parado, pues cada córner resultó un drama para la defensa calceatense. También tendrá importancia el duelo físico. A esto, La Calzada podrá oponer su fortín: solo ha perdido una vez en su campo. Y quizá, como invitada, también aparezca la lluvia. Aliciantes a más no poder, para una tarde que, pase lo que pase, será historia.
