Santo Domingo vive su gran fiesta deportiva. La Calzada juega en casa (sábado 17:00) la vuelta de la ronda definitiva del playoff, frente al Racing Villalbés. La ida concluyó con 1-1 y de superar el cruce, el ascenso a Segunda RFEF se hará realidad. Alberto Benés, integrante de la peña El Afilador, ya calienta motores: ”El pueblo está muy animado con todo lo que está sucediendo esta temporada. Es nuestro primer playoff de la historia y para colmo, en el año del centenario. En cualquier bar o negocio del pueblo donde entres, la gente está hablando de lo ocurrido y de la final que jugamos este domingo”.
La peña, junto a otros aficionados, ya ha organizado el plan. El sábado, de 12:00 a 15:00, habrá música en directo en el Bar La Cueva, con la presencia del DJ Gómez. Después de la fiesta, la afición se ha citado para una quedada en la calle Madrid de la localidad, amenizada por la charanga ‘Los Gallitos’. Y ya por fin, a las cuatro de la tarde saldrá una rúa hasta el campo de El Rollo. Será una previa de categoría, con comida, bebida, fiesta y sobre todo, deportividad. Si la ida dejó hermanamiento entre ambas aficiones, este encuentro contará con la presencia de más de 200 gallegos. A partir de ahí, que gane el mejor.
Alberto tiene motivos para sentirse orgulloso de su peña: ”La idea de fundarla fue de Raúl Alesanco, un amigo nuestro que recientemente falleció. Era una persona que siempre transmitía buen ambiente y por la cual, no dejamos de ir a ningún partido, tanto en casa como fuera. Nos gusta el fútbol, pero sobre todo, el La Calzada”. Incondicionales del fútbol modesto, en las buenas y en las malas. En esta ocasión, el campo se vestirá de gala y el Ayuntamiento de la localidad ampliará el aforo de El Rollo colocando gradas supletorias, hasta que alcance los 2.000 aficionados (las entradas ya están agotadas, salvo la reservadas para la venta en taquilla el día de partido).
Foto: FC La Calzada
Entre ellos, no fallará Luis Rioja, que ha dedicado toda su vida al club. Tras ser jugador, directivo y presidente, ahora anima desde las gradas: ”Esto ya hay que celebrarlo, esta experiencia es increíble después de todas las penas que hemos pasado. A mí me está llamando gente del País Vasco o de Madrid, que tienen conocidos aquí y quieren venir a ver el fútbol. He hablado con la directiva y están alucinando de la cantidad de peticiones de entradas. Este martes, por ejemplo, vendieron muchísimas”. El fútbol en Santo Domingo cumple cien años y con aficionados como estos, no es de extrañar.
Rioja sabe disfrutar de la vida y el resultado no es lo más importante: ”Les dije a los jugadores que me habían hecho llorar ya en estas dos pasadas eliminatorias que superamos (Oyonesa y Varea). Pase lo que pase, haremos una comida y una cena todos juntos. Estoy convencido que, de todas, todas; la celebración va a ser buena”. En época donde los instintos más básicos afloran en las gradas, estas escenas de juego limpio y hermandad acercan el fútbol a su dimensión más humana. Santo Domingo y Villalba van a conocerse mejor gracias a este maravilloso deporte. Porque siempre es mejor disfrutar de toda la experiencia antes que amargarse por el resultado.
