Los familiares de Guillermo Castillo, el hostelero de 78 años brutalmente asesinado el pasado 2 de mayo en Cuzcurrita de Río Tirón, podrán al fin recuperar su cuerpo, que ha permanecido desde entonces en el Instituto de Medicina Legal por razones vinculadas a la instrucción de la causa.
Así lo confirma el Tribunal Superior de Justicia en La Rioja, el mismo día en el que la hija del hostelero ha vuelto a reclamar a la autoridad judicial la recuperación del cadáver para “poder empezar mi propio duelo”, ya que “tengo un dolor en el alma y no encuentro razones para explicarlo”.
El TSJR asegura que el jueves de la pasada semana (18 de enero) “la jueza encargada de la instrucción de la causa notificó un Auto en el que acordaba que los familiares de la víctima podían iniciar los trámites necesarios para hacerse cargo del cuerpo del hostelero” y añade que “en el Juzgado aún no se ha recibido ninguna solicitud de los familiares” a tal efecto.
Reconstrucción de los hechos
Este mismo viernes, los dos presuntos asesinos de Guillermo Castillo han participado en una reconstrucción de los hechos, mediante la cual -custodiados por la Guardia Civil y en presencia de sus abogados- han vuelto a recrear lo ocurrido en la fecha del asesinato, tanto en la bodega que regentaba el hostelero como en su domicilio, donde acabaron con su vida.
Este proceso “doloroso” no ha satisfecho a la familia de la víctima, que apunta a la implicación de otras dos personas en la muerte de Guillermo y a un vecino del hostelero como ‘cerebro’ de un crimen con una finalidad que trasciende a la económica.
Casa de Guillermo Castillo, donde los dos presuntos asesinos acabaron con su vida.
Pese a que “no podemos quedarnos satisfechos”, Marcos García-Montes (abogado de la familia) sí ha valorado que la reconstrucción del crimen corrobora el hecho de que hay un lapso de tiempo que justifica la implicación del mencionado vecino: “Si Yolanda está con su padre (la víctima) y le deja a las diez y media de la noche y ellos (los detenidos) llegan a las once, alguien ha dado la información; y es ahí donde yo quiero llegar”.
“Que haya un vecino que no sabe nada y que no escuche nada cuando se ha dicho que el perro ladraba de arriba a abajo, eso no tiene ningún sentido”, afirma el abogado, que centra ahora su labor en lograr la investigación (antiguamente, imputación) de la persona “que eligió la hora, el lugar y el mecanismo”.
Ese ensañamiento explicaría que “hay una venganza”. “En principio no hay crimen sin móvil, ocasión y beneficio; para mí el móvil no es solamente el robo. Hay algo más detrás de esto, que es lo que yo quiero investigar y que espero que la jueza y la fiscal también estén conmigo”.
Marcos García-Montes, este viernes en Cuzcurrita de Río Tirón.
De hecho, el mecanismo empleado para el asesinato es una de las novedades del caso que han trascendido este viernes. “Lo mataron miserablemente y las fotos del pobre Guillermo, al que engrilletaron para torturarle, son dramáticas; en 52 años nunca he visto fotos con tantas torturas, la cara era irreconocible”.
“Hay una inspección ocular que demuestra la presencia de sangre y grilletes; hay pruebas que son indubitadas, que son las objetivas”, y luego está la declaración de los detenidos, que se contradicen y han mentido como bellacos”, ha afirmado Marcos García-Montes.
