Por primera vez en esta legislatura ha tomado, este martes, la palabra Gonzalo Capellán en el convento de La Merced como candidato del Parlamento de La Rioja para presidir el Gobierno riojano. Antes, en la calle: corrillos. Periodistas por un lado apurando el último café, asesores y políticos por otro. Preguntas casi en susurro para intentar adivinar cuándo será la toma de posesión.
Poco a poco iban llegando los actores secundarios de la primera sesión del debate de investidura. Café para los muy cafeteros. Nada que ver con lo vivido unos días antes en la sede del poder legislativo cuando los diputados juraron o prometieron su cargo. El público justo y algunos posibles candidatos a consejeros en los pasillos.
Los populares han sido los primeros en entrar en el hemiciclo, Capellán era foco de todas las cámaras. Después hacía acto de presencia la oposición y el Gobierno en funciones. La bancada popular recibía al candidato con aplausos, con una pizca de indiferencia y resignación al otro lado de la bancada.
Primera sesión del inicio práctico y real de la XI legislatura en la que el candidato popular ha desarrollado un programa, en algo más de hora y cuarto de discurso, que no ha sido más que “el proyecto que sometimos a examen de los riojanos durante la pasada campaña electoral, que salió del seno de la propia sociedad riojana”. “Nuestro norte, nuestra guía y nuestra referencia”, ha dicho.
FOTO: EFE/ Raquel Manzanares.
“Soy una persona moderada, sensata, con vocación nata de servicio público, entusiasta pero realista, con ganas de afrontar grandes retos, pero con los pies en el suelo”. “Un riojano normal”, ha resumido.
Así, se ha comprometido a consagrarse “en cuerpo y alma” a La Rioja, “cada uno de los segundos, minutos, horas, días y meses de los cuatro años” de esta legislatura.
“La Rioja, se merece lo mejor y es nuestra responsabilidad dárselo”, ha dicho antes de desgranar su programa político materializado en once puntos que ha iniciado con el cambio que pretende hacer en la Administración Pública para la que se ha comprometido a crear un “equipo estable” y revisar “todos aquellos entes que constituyan una administración paralela”. Llegaba así el primer mensajito para el lado contrario y para la que ha sido presidenta los últimos cuatro años con una riada a sus espaldas de ceses y dimisiones. “Los cargos no están para las personas, sino las personas para servir y desempañar bien sus responsabilidades de gobierno”, ha asegurado.
El empleo y la economía también han tenido protagonismo en el inicio de su discurso. Eliminación de impuestos, el apoyo a autónomos y muchos de los proyectos avanzados ya en campaña electoral. Algunos como la diputada de Podemos-IU, Henar Moreno, ha echado de menos que nombrase a los trabajadores en alguna de sus medidas y la siniestralidad laboral con los datos dramáticos de este 2023.
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Agricultura (ayudas directas al sector vitivinícola y mejoras de la gestión de la presencia de los lobos en el territorio riojano); Medio Ambiente (“La Rioja necesita de una política medioambiental responsable”); Infraestructuras (liberación de la A68 en 2026 e inclusión de La Rioja en el corredor cantábrico mediterráneo) han sido algunos de los ejes planteados por el que será nuevo presidente del Gobierno riojano.
Tampoco han faltado medidas sanitarias para “recuperar la consolidación de La Rioja como la comunidad con menor demora para recibir atención sanitaria” comprometiéndoselo a la desburocratización de la Sanidad en la comunidad.
Capellán no ha dudado en esgrimir también las líneas que llevará su gobierno en materia de Políticas Sociales e Igualdad. Un Plan de Construcción de residencias de mayores y centros de día, entre otras medidas. “Trabajaremos en erradicar cualquier tipo de discriminación por orientación sexual o identidad de género”, ha asegurado. Muchos giraban en ese momento la cabeza hacia los dos diputados de Vox que echaron de menos alguna palabra sobre las “posibles derogaciones de las leyes aprobadas en la pasada legislatura”.
Y es que no hubo ni rastro de posibles derogaciones en el discurso de investidura de Gonzalo Capellán. Sólo una marcha atrás directa. En Educación. El que fuera consejero de Educación está dispuesto a sustituir el actual decreto de convivencia y dar mayor autoridad al profesorado.
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También en el ámbito de la Educación se ha comprometido a “garantizar la libertad de elección de centro“, en un claro guiño con la educación concertada; y la puesta en marcha de un Plan de salud mental en los centros educativos, tal y como está dispuesto ya en la ley aprobada hace unos meses.
Una política cultural que no admita “dirigismos ni subcontratas” (nueva llamada de atención al gobierno de Andreu), con medidas concretas que ha ido desgranando a lo largo de los últimos meses como la celebración de una exposición donde puedan volver a La Rioja, aunque sea por un tiempo determinado, las Glosas Emilianenses. Y el turismo como “un ámbito de prioridad para el gobierno”.
Políticas para los jóvenes, deporte y acción exterior con los Fondos Europeos como protagonistas han sido las últimas líneas que ha detallado antes de finalizar su discurso con palabras de J.F. Kennedy: “En el pasado, aquellos que locamente buscaron el poder cabalgando a lomo de un tigre acabaron dentro de él”. Esta vez la duda era si la indirecta iba hacia Andreu y su pacto con Podemos o hacia los pactos de su propio partido con Vox de los que siempre ha rehuido el candidato riojano.
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Fin del primer acto. En pie la bancada popular aplaudiendo a Capellán y mientras caras serias en la oposición, a excepción del consejero de Hacienda, Celso González al que nada parece quitarle la sonrisa del rostro.
Este miércoles se desarrollará el segundo acto del Pleno para investir a Capellán como presidente. Media hora para los portavoces de los grupos parlamentarios (Podemos-IU, Vox, PSOE y PP) y una posible réplica sin límite de tiempo para el candidato que daría pie a otros diez minutos de discurso para cada uno de los portavoces. Después, tras un receso, llegará el momento de la votación y de ahí envío de la decisión del Parlamento para que el Rey, Felipe VI, la ratifique y directa al BOR. Será a partir de ese momento cuando Capellán pueda dedicarse oficialmente y “en cuerpo y alma” a la región.
