Los incumplimientos de las nuevas medidas aprobadas para contener la oleada del coronavirus no han tardado en llegar. Apenas unas horas después de que el BOR recogiera la nueva normativa, el Parque del Ebro volvió a ser el escenario de la práctica del botellón y ya hubo bares que se saltaron el horario de cierre en Logroño.
Sin ir más lejos, esta pasada madrugada se ha producido un grave suceso en las inmediaciones de la calle Padre Marín de la capital riojana, que se saldó con dos detenidos y cinco agentes de policía heridos.
Ocurrió en torno a las dos y cuarto de la madrugada, tras la denuncia de un vecino que aseguraba que un bar de dicha vía permanecía abierto más de una hora después del horario permitido. Hasta allí se personaron varias patrullas de la Policía Nacional, que comprobaron que en el interior del establecimiento había cuartenta personas, a las que identificaron para elevar las pertinentes propuestas de sanción.
Además de eso, la Policía decretó el cierre del local, pero mientras se procedía a desalojarlo se produjo el duro enfrentamiento entre los agentes y las personas que se encontraban de fiesta en el bar. Como consecuencia de estos hechos se produjeron dos arrestos por atentado contra la autoridad.
