El Calahorra ya conoce la derrota. Algún día tenía que llegar y, de ser así, mejor en casa de uno de los aspirantes a pelear por el ascenso al final de la temporada. La Real Sociedad B rompió el embrujo de los rojillos a la sexta jornada y lo hizo con un ejecutor ‘de la casa’: el riojano Lapeña. Goleador inesperado en un duelo en el que los de Sola se desfondaron y estuvieron a solo siete minutos de mantenerse invictos por sexta semana consecutiva.
En la primera acción del partido iba a suceder un hecho insólito. Tras forzar un córner el conjunto donostiarra, el colegiado se dio cuenta de que el terreno de juego estaba demasiado desnudo. En los vértices del campo faltaba algo: los banderines. Así que aviso del linier al delegado de campo, que se dio la carrera de su vida hacia el almacén y regresó -cuatro minutos después- con las picas para colocarlas en el córner. Sigan.
Fue de lo más entretenido que ocurrió en el primer tiempo, en el que el Sanse fue amo y señor del cuero -tal y como estaba escrito de antemano-, si bien los de Imanol Alguacil no supieron traducir ese dominio con grandes ocasiones de peligro. Hasta que el tiempo de descanso acechaba.
Thior pugna un balón con Morgado (izqda) y Cárdenas (dcha). | FOTO: Real Sociedad (Twitter)
En el 41, Djouahra lanzaba un disparo que -mordido tras contactar con la pierna de un defensor- fue encontrando una peligrosa parábola hacia la meta rojilla que Zabal envió a córner con apuros. Cuatro minutos después era Roberto López quien se animaba con un disparo con su pierna izquierda, de manual, desde la frontal del área. La curva que trazaba el balón en el aire hacía presagiar el primero de la tarde, pero de nuevo el portero alfareño se mostró infalible y, con una estirada de portada, atajó el peligro.
Hasta ese momento los riojanos no pudieron mostrarse más que como un conjunto voluntarioso. Ubis se batía el cobre con la pareja de centrales, pero necesitaba unos prismáticos para ver de cerca la portería local. Auzmendi y Barcina no encontraban la profundidad por las bandas y Cárdenas y Parla dedicaron más esfuerzos a la contención que a inventar líneas de pase. Nada, en cualquier caso, que no pudiera prever Sola en su plan de partido, que marchaba según lo esperado.
Los minutos iban pasando sin apenas trabajo para los porteros. Zubiaurre tuvo que emplearse a conciencia en el 64, cuando Txomin Barcina cabeceaba un centro desde la derecha que no acabó en las mallas por el buen oficio del arquero. Replicó al poco tiempo Álex Sola, con una diagonal desde el ala derecha para ganar una posición desde donde armar la pierna. Su ajustado disparo obligó de nuevo a lucirse a Nacho Zabal, que logró desviar el balón con la punta de sus guantes.
Un verdugo de la tierra
Se dedicaron a administrar el crono los de Miguel Sola, sin arriesgar más allá de que el rival lo sirviera en bandeja de plata. Introdujo el técnico navarro a Gabri Ortega para ganar presencia en el juego aéreo y a Xabi Barace para que el nivel de intensidad no decayera en labores defensivas.
Sin embargo, cuando apenas quedaban siete minutos por disputarse llegaría el premio al dominio donostiarra. En una falta pegada a la línea de fondo, los locales colgaron el balón al corazón del área. Lapeña remató de primeras pero Zabal anduvo rápido de reflejos para despejar con los pies, con la mala fortuna de que el rechace fue parar de nuevo a las botas del central logroñés que, en su segundo intento, no falló para encarrilar el triunfo ‘txuri urdin’.
A raíz del gol encajado el Calahorra se fue con todo en busca del empate. Pero los pupilos de Alguacil no solo son virtuosos con el balón en los pies. Sin perder el orden en ningún momento, los locales se limitaron a juntar las líneas y esperar algún contraataque que enviara el duelo al cementerio. La tuvo Roberto López tras un pase involuntario de Javi Barrio a Celorrio, que cedió a su compañero para que empujara la pelota a la red, pero el mediapunta l remató inexplicablemente desviada, con Zabal ya vencido.
Tras su primer tropiezo del curso, los rojillos se mantienen en posiciones de playoff (terceros, con 11 puntos), a la espera de lo que este domingo sean capaces de sumar el Barakaldo y el Izarra (se enfrentan en Estella) y el Mirandés (recibe al Sporting B en Anduva).
FICHA TÉCNICA
Real Sociedad: Zubiaurre; Álex Sola, Le Normand, Lapeña, Muñoz; Guevara, Gorostidi; Thior (Olaizola, m.70), Roberto López, Djouahra (Unai Veiga, m.80) y Dávila (Celorrio, m.62).
Calahorra: Zabal; Álvaro González, Javi Barrio, Cristian, Morgado; Cárdenas, Parla; Auzmendi (Javi Duro, m.76), Adrien Goñi (Gabri Ortega, m.61), Barcina (Barace, m.68) y Ubis.
Goles: 1-0, m.83: Lapeña.
Árbitro: Gorka Mazo Maruri (Comité Castellano-Leonés). Amonestó a Muñoz, por parte de los locales; y a Adrien Goñi, del Calahorra.
