“De todas las cosas sin importancia el fútbol es, de largo, la más importante”. Es una de las píldoras que Jorge Valdano nos ha legado desde que puso un pie en España. La sentencia también se le atribuye a Juan Pablo II, pero en realidad no importa quién fue el primero en pronunciarla. Lo realmente importante es que Nájera y Calahorra no miran más allá de este fin de semana. A partir del lunes, que ocurra lo que tenga que ocurrir, porque antes de eso les aguarda la gloria, encarnada en el ascenso a la Segunda División B.
Ambas ciudades sueñan con teñirse de bronce, el mismo material con el que se forjaron las espadas protectoras del Reino de Nájera o los ‘pilums’ que defendían la Roma de Publio Cornelio Escipión. Para lograrlo deberán librar una batalla menos sangrienta que las que recogen los libros de Historia, pero igual de trascendental, sobre una hectárea de terreno. El fútbol riojano vela armas para el que podría convertirse en el mejor cierre de campeonato que se recuerda en estas latitudes.
Los mil de Tafalla
Dicen los físicos que la de San Juan es la noche más corta del año. Y la máxima valdrá para cualquier municipio de España salvo Nájera. La de este sábado promete ser la noche más larga que se recuerda en la Capital del Mueble, ocurra lo que ocurra a partir de las 19 horas en el San Francisco de Tafalla. Si el Náxara logra el ascenso la euforia estará más que justificada hasta el amanecer. Si sucumbe ante la Peña Sport, el Ayuntamiento ya ha desvelado que se festejará la temporada igualmente coincidiendo con el día grande de las fiestas najerinas.
Probablemente no haya ocurrido cosa igual jamás a orillas del Najerilla. Nunca unas Vueltas de San Juan estuvieron tan despobladas como las de este año. Porque a eso de las cinco de la tarde, una octava parte de la población se subirá a un autobús para deslizarse hacia la gloria a través de la A-12. Diego Martínez quería mil najerinos en Tafalla y mil najerinos tendrá aupando a su equipo a una categoría superior. Una de sus peñas más fieles, Resaka Blankiazul, ha querido motivar a sus ídolos con un vídeo que tira de épica e ironía a partes iguales.
Pero aunque el aliento siempre ayude a cumplir objetivos, serán catorce los elegidos para jugarse en noventa minutos lo nunca visto en la Nájera futbolera. Catorce mortales que pueden amanecer el domingo (a una hora tardía, eso seguro) revestidos de inmortalidad por haber conseguido lo inimaginable el verano pasado.
Hace justo una semana, el Náxara se topó con los palos hasta en tres ocasiones, en un encuentro en el que acorraló a la Peña Sport pero que acabó en tablas (1-1). A poco que la pelota se vuelva menos arisca con los blanquiazules se desatará el desenfreno en la parroquia riojana. Cierto es que los blanquiazules están obligados a marcar para obtener la promoción. Pero también lo es que desde el 27 de noviembre los chicos de Diego Martínez han acabado marcando en un partido sí y en otro también.
Los números de la Peña Sport en Tafalla también imponen respeto, ya que no pierde en el San Francisco desde el 30 de abril de 2016. Así, con la estadística en la mano, cualquier clarividente apostaría por un empate a uno o más de un gol; vaticinio que nosotros firmamos donde haga falta.
“Si somos capaces de hacer un gol la eliminatoria se va a abrir mucho, pero intuyo que el partido se va a jugar largo”, señala Diego Martínez de cara al partido de este sábado. El técnico blanquiazul revela que “hemos intentado seguir la misma dinámica de trabajo que durante toda la temporada, porque si nos volvemos locos puede jugar en nuestra contra”.
“El todo o la nada”
El azar ha querido que los calagurritanos se empachen de fútbol este domingo. La Planilla acoge por la mañana la final de la Copa del Rey juvenil (entre Real Madrid y Atlético), pero una cita tan relevante ha quedado prácticamente opacada por el encuentro más importante de los últimos años para el Club Deportivo Calahorra.
Tras el 0-0 del Nuevo Vivero, los rojillos se juegan el ascenso ante el Badajoz a una sola carta. Lo hacen, eso sí, en una Planilla que va a colgar el cartel de ‘no hay localidades’ y que empujará a su equipo hacia la victoria como acostumbra. El gran ambiente de fútbol está garantizado, pues medio millar de aficionados extremeños animarán ‘in situ’ al cuadro blanquinegro.
Desde mañana, jueves, se podrán adquirir las entradas de socio para los dos partidos en las taquillas del club de 19:00 a 20.30 pic.twitter.com/zPJerpmYhe
— CD Calahorra (@cdcalahorra) 21 de junio de 2017
“Sabemos que en casa, con el calor de nuestra gente, vamos a ser capaces de coger los automatismos necesarios para pisar el área contraria mucho más que en el partido de Badajoz”, señala Eduardo Arévalo, quien asegura que el trabajo psicológico de esta semana ha estado encaminado a “apaciguar un excesivo ímpetu para que no nos lleve a cometer errores”.
Para el técnico riojano, la cita del domingo tiene todos los ingredientes para ser “todo un espectáculo que, espero, acabe siendo un momento histórico”. Por ello, y aunque asegura que “la eliminatoria está al 50%”, sostiene que el ascenso “es la guinda que le falta a la temporada que hemos hecho; el del domingo lo afrontamos como un partido para el todo o la nada”.
Por su parte, el técnico rival coincide en lo abierta que percibe la eliminatoria y asegura que su equipo saldrá a por el gol “desde el minuto 1”.
📺Declaraciones de Juan Marrero a @DeportesCexTV.
— C.D. Badajoz (@CDBadajoz) 23 de junio de 2017
El destino está escrito, pero hace falta conquistarlo y este fin de semana Náxara y Calahorra se vaciarán con ese propósito. Resulta irónico, pero la noche más corta del año puede convertirse en el preámbulo de las fiestas más intensas para sus dos aficiones. Que así sea. ¡Vamos, azules! ¡Vamos, rojos!
