Suena el runrún. Primero fue a Estopa. Luego se unió Rosario a los hermanos de Cornellá y finalmente llegó a Logroño. En este caso sí se sabe si fue primero la gallina o el huevo. Seis años y medio ha tardado. La capital riojana ha vivido una semana (quizás podría extenderse a los últimos veinte días) pendiente del balompié. El runrún te suena a ti, pero también le suena a tu familiar, a tu amigo, a tu compañero de trabajo… hay ambiente de fútbol y quizás el dato más significativo de este domingo sea que más de 7.200 personas han cuadrado sus planes para poder darse cita en Las Gaunas a las cinco de la tarde. Los de casa porque recibían al tercer clasificado, un equipo con aroma a Primera. Los de fuera porque tenían una excusa para deambular por la calle Laurel y visitaban al segundo de la tabla, la plantilla más en racha del Grupo I. El resultado, para que no se olvide nadie: UD Logroñés 1-1 Racing de Santander.
Y además del runrún, suena el big bang, como también le pasaba a Estopa. Su sonido parte de las piernas de Pere Milla. Sus pies tienen pólvora y el punto de mira en su sitio. Tercer gol en cuatro partidos (Compostela, Coruxo y Racing de Santander). Tiene el don del gol. Bendito. Robó el balón e insistió con él en sus pies hasta que llegó al área. Se lo cedió a su retaguardia en la banda izquierda, Jaime Paredes, para que este se lo devolviera en forma de pase de la muerte. Desde que salió de su bota dejó más cadáveres por el césped que las purgas de la Unión Soviética. Un toque y para dentro. 1-0. Líderes otra vez de manera provisional como ya le ocurriera la semana pasada en Vigo, también con otro gol del mediapunta ilerdense.
Pero esta vez no iba a ser el Racing de Ferrol el que solucionase el entuerto (empate a cero en Estella) sino Dioni en el minuto 59. No llegó a la media hora el segundo asalto consecutivo al primer puesto. El delantero hizo magia en una de esas genialidades a las que pocos pueden darles brillo y acabó por la vía rápida con el pequeño sueño blanquirrojo. Dribló a los centrales de la UD Logroñés, entró en el área y fusiló a Miguel para enloquecer a los casi dos mil seguidores cántabros que abrieron la grada general de Las Gaunas para darle al estadio aspecto de categoría superior. Mención especial también para los desplazados por sus cánticos de ″no se cierra″ en apoyo de los trabajadores de Altadis presentes en el fondo norte con sus camisetas blancas de protesta. Apunten, aficionados locales.
Una parte para cada uno. Empate en el marcador y sobre el césped. El equipo logroñés fue superior en los primeros 45 minutos, pero el Racing se hizo con el control del juego en la segunda mitad. Titi fue sustituido en el descanso porque su estado físico sigue estando al límite de la lesión y Pouso prefirió guardar su arma más poderosa para otros lances. Una vez fuera del terreno de juego el asturiano, la UD Logroñés volvió a mostrarse más débil que de costumbre, aunque más por mérito del rival que demérito suyo. Cambiaron las tornas y el empuje, con las camisetas verdes convertidas en superhombres que llegaban antes que nadie al balón, corrían más rápido y se situaban mejor. Apareció Miguel. Salvó a su equipo. Una vez más. Y Adrián León acabó tendido sobre el césped con los gemelos en la nuca.
Partido físico. Partido ″muy de Segunda B″ y de los que les gustan a los entrenadores, dice Carlos Pouso en rueda de prensa. El ambiente en la calle y la grada hicieron el resto. Ambas escuadras han enseñado sus armas y han empatado. Siguen tal y como empezaron la jornada. El uno segundo y el otro tercero. Un punto y siete de diferencia, respectivamente, con el Racing de Ferrol, el rival a batir. Ambos pueden. Ambos han demostrado en Las Gaunas que a final de temporada quieren jugar el playoff y tienen muchas opciones de hacerlo. En cuanto a datos. Pere Milla: once goles. La UD Logroñés: once partidos sin perder (siete victorias y cuatro empates).
Seguimos sin saber a qué suena la UD Logroñés como decía en septiembre, pero lo que sí sabemos ahora es que suena el runrún. El del liderato, el del playoff, el del gol… el del fútbol.
FICHA
UD Logroñés: Miguel; Miguel Santos (Carlos Barreda, min. 73), Jacobo Trigo, Borja García, Paredes; Adrián León; Titi (Íker Alegre, min. 45), Chevi, Muneta (Luis Morán, min. 65), Pere Milla; Carlos Fernández.
Racing de Santander: Santiago; Fede San Emeterio, Santamaría, Caneda, Docal; Óscar (Migue García, min. 83), Peña, Granero, Dani Rodríguez (Artiles, min. 87); Coulibaly (Pumpido, min. 88), Dioni.
Goles: 1-0, (Pere Milla, min. 32); 1-1, Dioni (min. 58).
Árbitro: Josep Subirats Matamoros (Comité catalán). Amonestó a Adrián León y Pere Milla, por parte de la UD Logroñés; y a Docal y Santamaría, por parte del Racing de Santander.
Incidencias: 7.204 espectadores en Las Gaunas, según la cifra oficial. Se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento del árbitro del comité riojano Juan Francisco Vior Iglesias. Los jugadores de la UD Logroñés saltaron al césped para hacerse la foto oficial con una camiseta con el lema ‘Altadis no se cierra’ y mostraron una pancarta: ‘No al cierre de la fábrica de tabacos. 600 familias a la calle’.
