Gastronomía

Sombra de Higuera sabrá a los versos de Miguel Hernández

FOTO: Fernando Díaz

Sombra de Higuera es una de esas creaciones que ya forman parte de la historia de la gastronomía española. Ese helado creado hace unas décadas por Fernando Sáenz Duarte transciende a la propiedad intelectual. Fue un antes y un después dentro de la heladería patria. A partir de Sombra de Higuera la heladería viajó hacia la alta cocina, se acuñó el término de cocina helada y el responsable de DellaSera recibió el apelativo de chef del frío.

Durante estos 22 años de vigencia, Sombra de Higuera ha aparecido en 37 revistas y ha protagonizado 14 libros, “y ha dejado de ser mía para ser de todos”, reflexiona Sáenz Duarte, que reconoce que “al principio le costó ver cómo otros heladeros servían esta receta” hasta que “me di cuenta y entendí que ya era un nuevo helado y que no podía ponerle puertas al campo”.

Fernando Sáenz Duarte pasará a la historia como el creador de Sombra de Higuera. A este Premio Nacional de Cocina se le recordará por esta creación, por haber sido capaz de evocar el sabor del verano en un sencillo helado, al que tiene acceso todo ciudadano independientemente de su nivel de vida. Un helado que bien podría haber degustado Miguel Hernández, el poeta cabrero.

Un pasto de ovejas que echaba la siesta bajo una higuera, la que aún se encuentra en la modesta casa familiar de este gran poeta español nacido en Orihuela. Ahí dormía entre cabras y versos, ente imágenes que plasmaba con precisión en su libreta. Siestas para aliviar madrugones para acompañar a sus animales, sin saber que unas bestias acabarían con su vida de forma precipitada.

Dos de los esquejes que han ido a parar al Jardín Botánico

Una higuera que aún vive. Sigue ahí, en la casita baja de Orihuela. Está llegando a su final de ciclo vital. Así lo aseguran los expertos botánicos que se han preocupado por ver el estado de salud de este árbol ya centenario. Su vida se acaba. Pero perdurará no solo en el tiempo. ‘Volverás a mi huerto y a mi higuera, por los altos andamios de las flores’, escribió el poeta del pueblo. Y con la sensibilidad que le caracteriza, porque su Sombra de Higuera es del pueblo, Fernando Sáenz Duarte recibirá durante este próximo fin de semana uno de los pocos esquejes que se han extraído de la icónica higuera de la casa natal de Miguel Hernández. Así, su Sombra de Higuera, “en unos años”, sabrá a los versos del poeta alicantino. “Plantaremos el esqueje en nuestra finca y si Logroño quiere, cuando esté ya desarrollada, en unos cuantos años, yo mismo la transplantaré al lugar que decida la ciudad”, explica Sáenz Duarte.

La higuera de Miguel Hernández llega al final de su ciclo vital, y el Ayuntamiento de Orihuela y la Universidad Miguel Hernández de Alicante han salvado varios esquejes que han viajado a lugares muy concretos del país, como el aeropuerto de Alicante, que lleva el nombre del poeta, al Jardín Botánico de Madrid, al Palacio de la Moncloa o al Palacio de la Zarzuela. Uno de estos esquejes llegará por Semana Santa a Logroño y servirá para los niños y sus familias disfruten de Sombra de Higuera entre versos y mucha historia.

Según palabras de Juan Martínez Tomé, profesor en la Universidad Miguel Hernández, “es merecedor [Fernando Sáenz Duarte] de ella por la sensibilidad de su trabajo y por vincular constantemente su oficio, la elaboración de los helados, con el mundo de la cultura, un helado tan poético como Sombra de Higuera recoge perfectamente los valores que Miguel Hernandez trasmitió con su obra”.

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