Abrimos por segunda vez el BAR (Boletín de Actualidad Riojana) de NueveCuatroUno en 2024. En esta ocasión nos visita una persona que también repite. Al igual que le ocurrió al ahora presidente del Gobierno de La Rioja, Gonzalo Capellán, quien inauguró hace unos días la tercera temporada del BAR, el alcalde de Logroño Conrado Escobar nos visitó cuando todavía era solo un aspirante a su puesto actual. En enero de 2023 confesó que su primer partido no fue el PP sino CDS y que ser alcalde es lo más hermoso que se puede hacer en política. Ivoox. Spotify. iTunes.
– ¿Ha cumplido su sueño político?
– Desde luego. Y muy bien acompañado. Con un equipazo de gente que me está haciendo disfrutar de la ciudad y de todo lo que tiene. Supone una permanente sorpresa porque cada día es un aliciente.
– ¿Es como se lo esperaba?
– Es mejor.
– ¿Y le queda algún sueño más por cumplir en política?
– Tengo mis aspiraciones de sobra completas. Estoy disfrutando mi pasión, que es Logroño. Lo que tengo que hacer es demostrar que esa confianza que han depositado tantos logroñeses hace que gobernemos para todos.
– Pone muchos énfasis en ese ‘todos’. ¿Quiere marcar diferencias con la anterior legislatura?
– No, no. Yo lo que quiere es gobernar, le recalco, para todos. Yo creo que la mayoría absoluta es una circunstancia, pero no me hace perder de vista la realidad y el compromiso.
– Una pregunta sin malicia: ¿le han traído los Reyes Magos una bicicleta?
– No, porque ya la tenía (Risas).
– ¿Y le da uso?
– Soy un aficionado a la bicicleta de montaña. Me gusta.
– ¿Por dónde empezamos la entrevista?, ¿la parte fácil o la difícil?
– La difícil.
– ¿Ha patentado ya la palabra logroñear? Ha calado.
– No sé si fui yo el que la acuñó. No creo. Es una manera de entender la ciudad como lo que estamos haciendo usted y yo ahora, que nos podamos tomar un vino o una caña en la calle Portales. Yo pretendo que en Logroño se pueda logroñear: disfrutar de la ciudad y de todos sus rincones de una manera amable.
– Pues vamos con San Mateo: ¿por qué tenemos que estar siempre debatiendo sobre las fechas de San Mateo? Lo de los conciertos lo damos por imposible.
– La gente pide previsión para organizarse en la familia y en los colegios. Procuramos conciliar todos los intereses sabiendo que no lo vamos a conseguir. La idea de dejar fechas fijas vamos a tenerla muy en cuenta porque es una sugerencia de sentido común.
– ¿Y qué pasa con las tuberías? Ha entrado Conrado Escobar a la Alcaldía y han empezado a romperse: ¿ha tocado alguien algún botón?
– Logroño tiene prácticamente 170 kilómetros de tuberías en desigual estado y, como pasa en tantas ciudades, la calidad de los materiales se agota y hay que hay que cambiarlo. No le echo la culpa a ninguna corporación, pero son obras que no son agradecidas porque son incómodas de hacer, son costosas… y a ninguna corporación le resulta cómodo. Todo lo que afecta al agua ahora mismo es absolutamente fundamental, y nosotros, por convicción, ya lo estamos haciendo. Hemos presentado un PERTE con Lardero y con Villamediana incorporando alertas tempranas para detectar antes las fugas. Ahora lo que tenemos que hacer es lo que estamos haciendo, arreglar con inmediatez cada tramo. Vamos a empezar con determinadas calles. Una va a ser San Millán, otra Beratúa y otra Lardero. Tenemos ya una programación.
– Seguimos con la parte difícil: el edificio de Bosonit en el Casco Antiguo. Uno de los proyectos de los que más se ha hablado en los últimos meses, parecía que se iba a iniciar ya y, por el momento, el solar sigue parado. Empieza a cundir la idea de que la empresa ha tirado la la toalla.
– No tengo yo esa sensación. La empresa se tiene que quedar aquí, en Logroño, y mi preferencia si es posible es que sea en el Casco Antiguo. A partir de ahí, no soy ingenuo. Hay procedimientos y hay una serie de condicionantes externos como los reparos que plantea la Unesco, a través del Ministerio, en todo lo que tenga que ver con la protección del patrimonio histórico. Hay una serie de circunstancias que desde luego merece la pena administrar, integrar y compatibilizar con ese proyecto.
– Lo que no quiere decir que se quede en ese solar…
– Vamos a ir trabajando en opciones porque ahí hay que tener en cuenta también la posición de la empresa, que al final es quien se juega a los cuartos.
– Vieja estación de autobuses. Ya no tendrá lo que hemos denominado coloquialmente como ‘la piscina de Antoñanzas’.
– Ahora estamos en la fase final del concurso de ideas para recibir proyectos y el propósito es que en 2025 empiece la obra. […] Una piscina en la vieja estación de autobuses lo veo difícil, el principal uso tiene que ser un espacio para personas mayores con ese componente intergeneracional en el que estamos haciendo tanta insistencia. También salas de estudios, salas de baile e incluso elementos culturales y de ejercicio físico.
– Mientras tanto se ha hecho un aparcamiento provisional que ha levantado también cierta polémica con los padres del colegio Espartero.
– Los aparcamientos son necesarios, sobre todo en las inmediaciones de las zonas comerciales. Nosotros hemos impulsado como aparcamientos provisionales esos espacios que no tenían un uso en estos momentos. Uno es el de la estación de autobuses nueva y otro es ese espacio de los antiguos hangares de la estación de autobuses vieja. Hay que añadir también que en la estación de autobuses nueva Adif tenía distribuidos unos aparcamientos subterráneos que no estaban funcionando y hoy ya están funcionando. Hoy es el día en el que tenemos setenta aparcamientos en una estación, ochenta en otra y doscientos más en la parte subterránea.
– Cortitas y al pie: proyectos de ‘ciudad’ como la calle Sagasta.
– Sobre todos los proyectos que tienen financiación europea vamos a dar cumplida cuenta en las próximas fechas. Se está trabajando con todos los ministerios correspondientes, aunque ahora incluso hay algunos cargos que todavía no están ni nombrados. Hay una relación leal y cordial para procurar que las intervenciones conserven al máximo la financiación europea. Por poner ejemplos concretos, las calles Sagasta, Duquesa de la Victoria y San Antón.
– Justo por las que iba a preguntar…
– Se están haciendo replanteamientos que conoceremos y va a jugar un papel claro el comercio. También los vecinos. Pero en el caso de San Antón, es muy muy relevante la opinión y el parecer de los comerciantes. Después del fiasco del Paseo de las Cien Tiendas, no podemos permitirnos cometer un error.
– Lo que sí está a punto de caramelo es el Mercado de San Blas, la Plaza de Abastos. ¿Qué se va a hacer en la primera y en la segunda planta?
– La obra civil estará concluida y tiene que tener un uso fundamentalmente gastronómico. Con eso no me refiero a un restaurante sino a usos gastronómicos. Esa plaza tiene un potencial extraordinario desde la perspectiva de la cultura gastronómica con actores principales con los que ya estamos hablando como la Academia de Gastronomía. También hay planteamientos más avanzados como formación o más vanguardistas como ser un escaparate de las marcas riojanos que ahí se puedan vender. Nunca un restaurante ni hacer la competencia a la buena gastronomía que tenemos en el entorno.
– El Colegio San Bernabé es otra de las obras que están a punto de terminar. ¿Va a ir finalmente ahí un espacio coworking?
– No es una mala opción, pero ese espacio tiene que mirar también a su entorno inmediato. En la red de talento joven que hemos creado nos decían, por ejemplo, que La Rioja es un sitio muy apropiado para instalar algún tipo de hub para teletrabajar si se dan las circunstancias.
– En cuanto al soterramiento, ¿en qué fase se encuentra?
– Vamos a centrarnos ahora mismo en concluir la primera fase. Si ha costado tanto esfuerzo poner en marcha la estación de autobuses y el nudo de Vara de Rey, vamos a olvidarnos de las discusiones políticas y vamos a concluir esa fase. Tenemos un parque que está en las inmediaciones de Vara de Rey junto al edificio Patricia que tiene que concluirse, por poner un ejemplo, y hay algunos aspectos menores de ese entorno y Lobete que hay que concluir.
– Menores y mayores… en ese parque también hay unas torres proyectadas. No sé si llegarán antes esas viviendas, el final del soterramiento o un equipo de fútbol en Primera División.
– Ahora mismo es la franja con mayor potencial residencial inmediato. Se tienen que ver viviendas y usos residenciales, pero siempre con sostenibilidad. Toda esa zona que afecta al soterramiento tiene que ser una zona muy cuidada desde el punto de vista de la sostenibilidad y de la calidad urbana. Eso creo que hay que mantenerlo a toda costa y el PERI está en vigor.
– Le doy entonces el pase a la política de vivienda de Conrado Escobar, ya que hay un problema en Logroño con el auge de las viviendas turísticas y el precio del alquiler.
– Vamos a presentar en las próximas semanas un plan de vivienda trabajado con el patrimonio municipal de suelo como ingrediente fundamental. Me refiero a viviendas municipales que haya que rehabilitar y a suelo en diferentes zonas de la ciudad que lo único que tenemos que hacer es que procurar que cumpla su finalidad. Vamos a poner la mayor superficie y el patrimonio municipal de suelo al servicio de, ahora mismo, la mayor finalidad social, que es la vivienda. En tres semanas tendremos ese programa de vivienda presentado y en condiciones de ser ejecutado.
– ¿Vamos a ver alguna promoción por la que el Ayuntamiento de Logroño construye una urbanización?
– Alguna sí se va a hacer así. No le puedo decir dónde, pero sí. Lo haremos empleando fórmulas jurídicas como la cesión del derecho de superficie, de tal manera que el Ayuntamiento se pueda reservar la propiedad de la parcela y la explotación de los derechos de vuelo sea de otra persona, condicionado a que el uso sea vivienda en unas condiciones.
– Y más edificios. Más ladrillos. En este caso, otra inauguración que ha hecho el alcalde Conrado Escobar: el Centro de la Cultura del Rioja (CCR). ¿Qué se va a hacer con él en 2024?
– Se va a hacer ni más ni menos que aquello para lo que estaba destinado. Tiene que ser un referente para el vino de Rioja y todo lo que rodea culturalmente al vino de Rioja. Tenemos exposiciones que tienen vocación de permanencia como Vivanco y se van a incorporar otras con un hilo conductor a largo plazo a través de Jesús Rocando y La Casa de la Imagen. Va a ser un elemento de dinamización constante con congresos, música y catas. Le puedo asegurar que cada vez más actores y más entidades quieren formar parte del CCR y quieren tener su espacio.
