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Bilbao Athletic – UD Logroñés: flores en el asfalto agrietado

FOTO: UD Logroñés

Son tres puntos, como en cualquier otro partido. Si tras este encuentro no se vuelve a ganar de poco habrá servido… Ná, chorradas. Palabrerío. El partido de este domingo en Lezama no es un partido más. Para nada. Sí, se ponen en juego los mismos tres puntos, pero tras el empate en Las Gaunas en la ida, hay mucho más en juego.

El partido de este domingo es como ver esas florecillas que crecen entre el asfalto agrietado de esta rudimentaria Segunda Federación. Es algo más que lo que habitualmente se está viendo desde el pasado mes de septiembre. Para empezar, es un buen partido de fútbol, seguro, donde el resultado puede determinar el resto de la temporada.

Si gana el equipo visitante, la UD Logroñés, nadie pondrá en duda que la remontada de los de Diego Martínez ha comenzado. El empate dejaría contento al equipo local, un Bilbao Athletic que suma diez puntos más que los riojanos y que en caso de victoria dejaría el primer puesto visto para sentencia a la espera de festejar un título que da un ascenso directo a Primera Federación.

Resulta que este domingo a las doce del mediodía en Lezama se enfrentan dos equipos que para nada se podían imaginar en esta situación hace justo un año. Entonces, en Primera Federación, las cosas les iban mal, pero ambos creían tener tiempo suficiente para solventar sus problemas. Pero no fue así, y UD Logroñés y Bilbao Ahtletic se ganaron un descenso inesperado.

Ahora, vuelven a verse las caras, con la misma necesidad vital de ascender de nuevo porque saben perfectamente que esta división no les corresponde ni de lejos. Purgan sus pecados y a buen seguro este domingo se darán un pequeño festín de fútbol. Ambos quieren verse las caras. Se saben las dos mejores plantillas del Grupo 2, son los dos mejores equipos, sabedores de que Alavés B y Barakaldo también están haciendo muy bien las cosas. Pero estos dos tienen la necesidad vital de ascender. Y eso les pone a competir a otro nivel.

Quieren pasar cuanto antes el trance de verse en la cuarta división. Pero solo uno de ellos se saldrá con la suya que es verse directamente ascendido a final de temporada sin pasar por el camino sinuoso de unos playoffs que ya dieron al traste con el ascenso, por ejemplo, del Alavés B que cayó de aquella manera. Solo el campeón se asegura el ascenso. Y la UD Logroñés viaja a Bilbao para seguir optando al título. No le queda otra.

Saldrá a ganar. Lo ha dicho su técnico. Directamente: “Esta camiseta obliga siempre a salir a ganar”, y también indirectamente: “Contra los equipos de nuestra liga hay que jugar en sus campos como si lo hiciéramos en Las Gaunas, no sucede lo mismo en otros campos como Brea, Sarriguren…”. Salir a ganar.

Y debe hacerlo en donde la UD Logroñés descendió el curso pasado. No lo hizo matemáticamente, pero sí moralmente. La goleada que le endosó el Bilbao Ahtletic, por entonces colista, dejó a los riojanos patas arriba. No había quien enderezara el rumbo. La suerte estaba echada. Ahora, casi un año después, los riojanos llegarán a Lezama en su mejor momento. Están frescos, rápidos, precisos, acertados, motivados, ilusionados… están con las luces largas, como su rival. Ambos, preparados. Pero los riojanos quieren ver hasta dónde pueden competirle al mejor equipo de toda la Segunda Federación. Quieren medirse contra el mejor para saber si están a su altura. El partido de ida en la primera jornada de liga llegó demasiado pronto para dos conjuntos que seguían pensando en el descenso.

Ahora, este nuevo feliz estado de ánimo posibilita ver un buen partido de fútbol. Este Bilbao Athletic, pese a estar una categoría por debajo, es mejor que el equipo del curso pasado. Y esta UD Logroñés, pese a estar una división por debajo, es mucho mejor que el equipo del año pasado. Son las florecillas que surgen a nada que llueve un poco por entre el asfalto agrietado de este desierto deportivo que es la Segunda Federación.

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