La SD Logroñés visita al Lugo (domingo 18:00, Anxo Carro), en medio de una situación excepcional. Tras la destitución de Jordi Fabregat como entrenador, el director deportivo Juanma Barroso ha asumido el cargo de forma interina. Es una situación anómala, pero el fútbol continúa. Tras tres derrotas consecutivas, los blanquirrojos quieren al menos puntuar en casa de un recién descendido. Así lo ha querido el calendario. Aún así, la situación deportiva no es ni mucho menos extrema. Gracias a su buen inicio, los riojanos tienen nueve puntos y están en décima posición. De hecho, todavía conservan dos puntos de margen con el descenso.
A la espera del nuevo integrante del banquillo, el fútbol debe predominar. La Sociedad cayó ante Unionistas por 0-1 y anteriormente, sufrió ese mismo marcador frente a la Cultural Leonesa y el Rayo Majadahonda. Tres derrotas por la mínima que tumbaron a Fabregat. Mejor dicho, al menos ese fue uno de factores. Otro, según ha confesado el propio Barroso, fue la falta de confianza. Sea como fuera, lo cierto es que el equipo empeoró sus prestaciones futbolísticas. En ataque, sus capacidades disminuyeron, tanto a nivel de ocasiones creadas, como de puntería. A su vez, en área propia han llegado algunos errores defensivos que han costado bastante caros. Como siempre, no solo un factor lo explica todo.
El ya extécnico de Tortosa contó siempre con un once muy determinado. Se puede recitar de memoria: Iru en potería; Gexan, Aurtenetxe, Murua y Paredes en defensa; Castellano y Damià Sabater en sala de máquinas; Toni García, Rubio y Garrido en segunda línea y Escobar en punta. Sin embargo, con Barroso tomando las decisiones, la incógnita se abre. Lo que es seguro es que habrá dos bajas por ‘virus FIFA’: Manny Rodríguez ha sido convocado por República Dominicana y Adrián Cova, por Venezuela. Por otra parte, Castellano y Murua son duda, aunque cuentan con bastantes posibilidades de volver. En el aire se encuentra también el concurso de Arratia, aunque parece más difícil.
Foto: SD Logroñés / Hace tres jornadas desde que el equipo no celebra un gol
Enfrente estará el Lugo, ahora mismo empatado en la tabla con la SD Logroñés. Undécimos, los gallegos militaron en Segunda División durante la pasada campaña y han pasado un verano muy complicado. De hecho, todos sus 22 jugadores son nuevos. Castrín, Torrado y Antonetti estaban en el filial. El resto, todo fichajes o cesiones. Eso sí, de gran calidad para la categoría. Así, ha llegado el delantero centro Antonín (Granada), el portero Gonzalo Tabuaço (Os Belenenses), el centrocampista Jozabed (Málaga) o los defensas centrales Morgado (Sabadell) y Gorka Pérez (Numancia). Estos dos últimos, conocidos del fútbol riojano. De todas formas, solo son algunos nombres de la plantilla entrenada por otro ilustre, Pedro Munitis.
Al venir directamente de la categoría de plata, la exigencia del Lugo debe ser recuperar la categoría perdida. El playoff, por tanto, es lo mínimo exigible. Claro que una cosa es lo que se pinta sobre un papel y otra la realidad. Los lucenses comenzaron ganando al Teruel (2-1), se pasaron cinco jornadas sin ganar (tres empates y dos derrotas) y el último fin de semana, se impusieron a Osasuna Promesas (1-2). Esos tres puntos en Tajonar, con goles de Nacho Quintana y Víctor Narro, fueron oro para los gallegos. Su primer gol llegó tras aprovechar un fallo defensivo y el segundo, después de ejecutar una gran jugada de estrategia. Por lo tanto, se trata de un rival potente en todos los sentidos.
“Del Lugo nos preocupa todo”, en palabras de Barroso. En Pamplona, los lucenses demostraron su habilidad a la contra, su capacidad para disparar desde fuera del área, su velocidad y su uso del balón parado (cuatro de sus cinco goles a favor han llevado así). Sin embargo, no siempre ha sido así. De hecho, acumulan más de mes y medio sin ganar en casa. La Ponferradina se llevó un punto (0-0), mientras que el Nàstic (0-1) y el Deportivo (0-3) lograron vencer. Para este partido, Alberto López y Carlos Julio, que se perdieron la pasada jornada por problemas físicos, no podrán estar en esta jornada. Un domingo en el que, previsiblemente, se jugará sobre mojado.
Desde su ascenso en la 2011/12, el Lugo había encadenado once temporadas consecutivas en Segunda División. Por lo tanto, es el primer partido que se juega entre ambos equipos. Ya es un triunfo para la Sociedad el poder jugar ante un histórico del fútbol español. 70 años contemplan al Club Deportivo Lugo, con una estructura totalmente profesional y un presupuesto muchas veces mayor al de los blanquirrojos. Pero por suerte, el fútbol no se juega solo con presupuestos y teoría. Hay que demostrarlo en el campo.
Por último, impartirá sentencia el colegiado Álvaro López Parra, cántabro y de 36 años. Hasta la fecha, acumula nueve temporadas en Segunda B y esta es su tercera en Primera Federación. Además, ha arbitrado en cuatro partidos a la SD Logroñés. Dos acabaron en victoria, uno en empate y otro en derrota. El último es bastante reciente, la victoria 1-3 frente al Numancia, el pasado 30 de abril.
