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La UD Logroñés se pone en marcha: “Sabemos a lo que hemos venido”

Con el “ánimo levantado” ha vuelto ha puesto este lunes la Unión Deportiva Logroñés la primera piedra del camino de regreso a Primera RFEF. La plantilla blanquirroja estrena categoría con 21 efectivos vestidos de corto desde el primer día, una cifra del todo inusual en relación con los precedentes, y con la práctica totalidad de caras nuevas: tan solo Iñaki, Titi repiten respecto al pasado curso, más los ‘filiales’ Sergi López, Miki Codina y Álex Daza.

Un ‘Plan Renove’ que se completa con el director que debe hacer sonar la orquesta de Las Gaunas, un Diego Martínez “ilusionado” que este lunes ha dirigido la primera sesión de un curso en el que “todos sabemos a lo que hemos venido”, que no es otra cosa que ascender.

Aunque el reto, que nadie se lleve a engaños, no va a resultar sencillo. Pese a contar con una plantilla integrada por “gente experta en la categoría, con futbolistas que vienen de lograr ascensos y otros de hacer buenas temporadas en Primera RFEF”, Martínez advierte de que la Segunda RFEF -en la que ya conquistó un ascenso a los mandos del Numancia- es un territorio hostil, donde “nadie regala nada y en la que todos quieren estar arriba”.

Aun así, el técnico asegura que esa circunstancia “no es algo que deba asustarnos”. porque, “más allá de nombres y jugadores contrastados, que también los tenemos, somos un equipo de jugadores que querían venir y que tienen en mente el mismo objetivo que nosotros: volver a Primera RFEF”. Jugadores que han iniciado el trabajo “con ganas  de hacer las cosas bien e ilusionar” a una afición que ha sufrido dos severos varapalos en las tres últimas campañas.

En busca de la guinda al pastel

Aunque se congratula de poder empezar a trabajar con casi dos ‘onces’ completos, Diego Martínez no cierra la puerta a alguna incorporación -probablemente en el lateral zurdo- que dé un salto de calidad a una plantilla “experta y conocedora de la categoría”. “Nos reforzaremos si creemos que lo que puede venir es, por lo menos, tan bueno como lo que tenemos ya”, asegura, subrayando que “fichar por fichar nunca ha sido nuestro estilo”.

Hasta el 3 de septiembre, fecha en la que la UD Logroñés se estrenará en Segunda RFEF frente al Bilbao Athletic, Diego Martínez tiene por delante seis semanas en las que desarrollar una pretemporada “más moderna que clásica”, en la que “el balón, los conceptos tácticos y mucho trabajo para que los futbolistas vayan tejiendo sinergias” serán protagonistas.

La entidad blanquirroja afronta este mes y medio “con tranquilidad, pero sabiendo que tenemos una responsabilidad grande”. Y aunque el deseo del ascenso planea sobre cada rincón de Valdegastea, la fase de pretemporada se afronta sin objetivos a largo plazo porque “está demostrado que no tienen sentido”. “Hay que ir paso a paso, construyendo raíces profundas en el equipo y sin mirar a mayo, que está muy lejos”, explica el entrenador logroñés, apostillando que “todos sabemos a qué hemos venido, pero el ascenso no nos lo va a dar hablar de ello, sino ganar partidos”.

 

Y para ir matando el gusanillo de los aficionados antes del estreno liguero, Diego Martínez planea disputar “entre seis y ocho amistosos”, aunque todo va a depender del papel que juegue el equipo en la Copa Federación.

El balón, protagonista

Por primera vez en su corta historia, la Unión Deportiva Logroñés afronta una temporada de entrenamientos en instalaciones propias. Una flamante Ciudad Deportiva que “supone un paso muy importante para la ciudad, porque nunca hemos tenido algo así”. “Es un lujo y ahora debemos sacarle partido”, afirma Diego Martínez, que ha puesto a sudar a sus jugadores desde el primer minuto.

La primera sesión de entrenamientos -a la que han asistido una decena de aficionados- ha estado marcada por la presencia del balón desde el primer minuto. Una primera jornada de trabajo en la que -y esto también es una buena noticia- los 21 hombres a disposición de Diego Martínez han comenzado a ejercitarse en el mismo grupo, sin futbolistas al margen para someterse a labores de recuperación.

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