El pincho ‘¡No me comas la oreja!’, de Meraki Gastrobar en Nájera, ha resultado ganador del ‘Delantal de Oro’ (1.700 euros) del XXI Concurso de Pinchos de La Rioja (97 establecimientos han participado), cuya final se ha celebrado este sábado en Riojaforum. Esta tapa está elaborada con oreja de cerdo, yema de huevo curada, brotes.
El ‘Delantal de Plata’ (1.000 euros) ha recaído en Wine Fandango, por su pincho ‘Calabaza eco en texturas’: leche, cobertura blanca, manteca de cacao, calabaza ecológica, nata, nuez moscada, miel, canela, huevo, azúcar, almendra, limón, especias.
El ‘Delantal de Bronce’ (700 euros) ha sido para el restaurante Sopitas (Arnedo), gracias a su pincho ‘Canelón del Cidacos’ compuesto por patitas, callos y gordillas de cabrito, cebolla, panceta, chorizo, alegrías riojanas, laurel, pimentón, caldo de las manitas, tomate natural, borrajitas, pimiento del Piquillo, pan de masa madre.
El jurado
La final ha contado con un jurado formado Nacho Manzano, de Casa Marcial en Asturias (dos estrellas Michelin); Carolina Sánchez e Iñaki Murua, de Ikaro en Logroño (1 estrella Michelin); Juan Carlos Ferrando, con un restaurante del mismo nombre en Logroño, y por Abencio Millán, director de la Escuela de Hostelería Camino de Santiago de Santo Domingo de la Calzada, coordinados todos ellos por el gastrónomo Mikel Zeberio.
Además, durante la final se han entregado las menciones, elegidas por el jurado itinerante, al Pincho Tradicional (’60 minutejos a la gallega’, de La Oficina -Logroño-) y al Pincho #productoriojano (‘De paseo’, de Asador Villalobar), además del Pincho Popular (‘Empanadilla con salsa de kalimotxo y petazetas’, de El Arca -Logroño-), elegido por el público general a través de una votación realizada con cupones en los establecimientos participantes. Las tres están dotadas con 500 euros.
También en la final se ha entregado el ya tradicional galardón Palillos de Honor, con el que se rinde homenaje a los establecimientos que han trabajado en pro de los pinchos de La Rioja, y que en esta edición ha recaído en Antonia Urbina, del bar La Antonia de Cuzcurrita de Río Tirón, y recientemente jubilada.
