El pueblo, en este caso los lectores de NueveCuatroUno, que es sabio, y más cuando habla, tiene claro que los mejores morritos de las barras logroñesas los presentan diariamente en el bar Claret, en Padre Claret, a la vuelta de Avenida de la Paz. Su barra, de buenas a primeras, ya indica que el lugar es el adecuado. Que lo se ve es lo que hay, que hay donde elegir, y que lo que se elige seguro que está rico, porque se hace con esmero y se presenta con cariño. Son tres generaciones haciendo las cosas muy bien.
Y a modo de corona, sobre la vitrina, en la parte de los pimientos rellenos, las gambas rebozadas, y el calabacín con jamón cocido, los responsables del Claret presentan su joya. Su famoso morrito, protegido por una ‘campana’ de plástico. Bien tostado, para nada quemado. Sabroso, jugoso, y que los responsables del local calientan lo justo en la salamandra antes de servirlo.
Han sido numerosos los lectores que nos han recomendado los morritos del Claret. Como Damián: “He probado muchos, y el mejor es el del Claret”. Coincide con la opinión que nos remite Fernando: “Mis preferidos son los del bar Claret con una textura especial, sabrosos y no grasientos. Siempre recién hechos y diferentes a todos. Son los mejores de largo”. Toño, que recordó los que hacían en el Mesón Alfonso, reconoce que “los del Claret son los mejores, porque además de sus morritos tiene una barra espectacular”. Y Alberto nos aporta más datos sobre los morritos de este bar: “Tiene pinta que la receta guarda un triple secreto y que Javi ha enseñado bien a su hijo Dani a cumplir con la tradición”. Y Alberto hace una comparación: “En el ‘difunto’ Mesón Don Chufo los hacían parecidos. Creo que Javi y su compadre del Chufo seguían unos pasos parecidos”.
Pero no solo en el Claret hacen unos morritos fantásticos. Nuestros inquietos lectores nos llevan a otros lugares que merecen ser descubiertos. Elías por fin ha escrito sus opiniones: “En el Tapas Oslo están deliciosos, tanto en el de Cascajos como en el de Club Deportivo. La verdad que no pude escribiros antes, pero tanto la tortilla, como los emparedados, como los morritos, crujientes, saladitos… Una delicia”. De la mano de Julio nos vamos hasta la calle Beratúa: “Buen morrito en el bar Roy, y también están buenos en El Pilar de la calle Club Deportivo”. Otro lector asegura que “El Pedregales de Cascajos es un buen sitio para comerte unos buenos morritos”. José explica que “el bar Fénix de la calle Lardero están buenísimos, siempre recién hechos”. E Israel indica que “para morritos espectaculares los del Bar Camarote en la plaza Primero de Mayo”.
Al Camero Viejo
Y tenemos a Laguna de Cameros movilizada en favor de uno de sus bares. El bar La Carretera, que está justamente en la carretera de Laguna. Y ahí, según los cameranos, hacen unos morros deliciosos. Los ha recomendado Rocío, “son los mejores”, dice; Cristina, “unos morros para chuparse los dedos”, y César: “En el bar La Carretera en Laguna de Cameros, Neli hace unos morritos que quitan el sentido, de cerdo ibérico, bien crujientes por fuera y jugosos por dentro, con su punto de sal gorda, perfectos con una cerveza o un vino”. La vida en los pueblos es la vida mejor.
