La LR-131 ha abierto este lunes al tráfico después de diez meses cerrada a cal y canto. El asunto ha sido recibido con agridulces sensaciones, ya que por el momento sólo hay un carril disponible para el paso y varios semáforos regulan la circulación de los vehículos. Alrededor de tres minutos cuesta el trayecto desde el Puente de Piedra hasta el Polígono Cantabria sin contar el tiempo de espera del semáforo cuando la carretera va a estrecharse.
De hecho, el propio Gobierno de La Rioja recomienda el uso de los itinerarios alternativos hasta el final de las obras: para acceder al Polígono de Cantabria, por la N-111a y la A-13, desde el Puente de Piedra; y por la A-13 (salida 2), desde la LO-20.
