Deportes

Natxo González, emocionado: “Estad a muerte con la UD Logroñés”

Natxo González se ha despedido este miércoles como entrenador de la UD Logroñés. Y lo ha hecho en una rueda de prensa multitudinaria respecto a comparecencias anteriores, las de cada semana. El técnico alavés deja el banquillo riojano sin haber sumado victoria alguna en los catorce partidos y medio (el de Sabadell suspendido) disputados desde el pasado mes de noviembre. El último técnico en despedirse con una rueda de prensa fue Carlos Pouso. Ni Sergio Rodríguez, ni Mere Hermoso, ni tampoco Albert Aguilá se despidieron ante los medios.

Natxo González ha leído una carta que traía preparada de casa, y tras ellas no ha habido preguntas. “Ha sido un petición mía”, ha referido respecto a esta comparecencia. “Lógicamente es un comunicado de despedida. Espero no tener que parar, porque son momentos difíciles, y cuando uno está metido en la vorágine, con toda la tensión acumulada, pues sale todo. Pasó ayer con los niños (como se refiere a sus jugadores) y espero que no me pase hoy con gente más mayor. Intentaré no parar”. Lo ha conseguido, salvo cuando se ha referido a Dupi, Sergio y Félix Revuelta, y cuando ha hablado sobre su familia más cercana. Agradecimientos a todo el club, salvo a Juanjo Guerreros, vicepresidente de la entidad.

“Son agradecimientos. Me apetecía despedirme públicamente. No tengo red social. Cuando uno ha estado a gusto en un sitio y cuando se han vivido momentos tan duros y otros tan felices, y no creo en la felicidad plena. He rozado muchas veces la felicidad plena. Y he vivido momentos de verdadera felicidad, que me llevaré conmigo. Por eso me quería despedir de manera pública. Que conozcáis al Natxo más personal. Porque soy persona”, ha relatado el técnico.

Este es el contenido íntegro de las palabras de despedida de Natxo González:

“Lo primero, quiero agradecer a los que me han permitido vivir esta experiencia. A Dupi, que está aquí. Gracias. Sergio, que no ha podido venir porque ahora mismo está metido en otro berenjenal. Y a Félix Revuelta, que ya de paso todos sabemos el momento tan duro que está pasando. A él y su familia solo puedo darles un abrazo y darles las gracias.

En esas primeras conversaciones con Dupi y con Sergio, que fueron hasta cuatro, ahí empecé a detectar que este era mi sitio. Para poder trabajar bien, con un proyecto bonito, con una ciudad deportiva que creo que existe (mira a Dupi), aunque le está costando. Y eso sentía, que podía ser mi sitio. Y poder conseguir objetivos. Y poder rozar esa felicidad de la que os hablaba anteriormente. Esos objetivos creo que los podría haber conseguido, aun estando en la situación en la que estamos. No tengo nada que reprochar a nadie, porque los resultados están ahí, y hace falta mucha confianza para mantener a un entrenador en esta situación. Y doy las gracias de la paciencia que han tenido.

La única dolencia que tengo y que me duele por dentro es no haber podido responder a esa confianza con resultados, pero sí os puedo asegurar a todos que he dado todo, que he puesto todo de mi parte para sacar esto adelante, pero por desgracia no ha podido ser.

Os puedo decir que no depende exclusivamente de mí. Que el líder y responsable era yo, pero no soy el único responsable, pero al final es el que siempre tiene que acabar saliendo. Y ojalá sea yo el culpable porque deseo de corazón que este equipo se salve. Ha dejado mucho huella dentro de mí. Lo deseo de verdad y de todo corazón que mantenga la categoría porque es un proyecto bonito y estaré ahí empujando, aunque sea desde la distancia.

Gracias Dupi, gracias Sergio, gracias Felix, por haberme dado esta oportunidad tan bonita para mí. He conocido y vivido cosas muy importantes que me llevaré conmigo.

Gracias a todo el personal del club, a todos los que forman parte de este club por vuestro cariño, respeto, paciencia y por esas palabras de ánimo cada lunes, sobre todo. Gracias a mis compañeros de staff, gracias Jaume. A Aitor, a Álvaro, a Javi a Ander, a los servicios médicos, a Chema, a Miguel, a Aaron, a Pintu, al delegado, al chófer, a Fernando, y gracias por esa dedicación y compromiso que hemos puesto todos para salir de lo que nos hemos metido.

Ayer ya me despedí de los chicos. También lo quiero hacer aquí. Gracias a mis niños. Y de verdad gracias por vuestra actitud en el día a día y de verdad por creer en mí hasta el ultimísimo momento. Hasta el día de ayer he sentido que estaban ahí creyendo en el mensaje y eso no es fácil, y como les dije ayer, sigo creyendo en vosotros, y para adelante, quede mucho. Y lo vais a conseguir.

A la afición, tranquilos, Natxo ya se va. Yo hoy sí quiero pediros algo. Las últimas semanas no estaba para pedir, pero ahora desde fuera os pido algo: nos quedan trece partidos y tenemos dos opciones, que nos reprochemos todo, que critiquemos todo, que sea una puñetera pesadilla, o que lo afrontemos como una bonita oportunidad de trece partidos para sacar esto adelante. Opto y les aconsejé a los jugadores que se decantaran por la segunda opción y eso me gustaría también recomendar a la afición,. Dejémonos de reproches, se les necesita. La afición es lo más importante de un club; entiendo su enfado, pero que piensen que quedan 13 partidos y se les necesita. Por favor, por favor, estad a muerte con el equipo. Es hora de remar juntos, porque juntos seremos más fuertes.

Me toca a vosotros (se dirige a la prensa). Gracias. Gracias a todos los medios que están aquí. Por vuestro respeto. He intento estar siempre a la altura, respetándoos y expresando lo que sentía en cada momento. Sé que no calaba. Digo lo que siento y, si alguna vez me he equivocado, pues perdonadme, no se me caen mis anillos por pedir perdón. Gracias. Por vuestro respeto. Vuestras críticas, siempre he dicho, no puedo defender los resultados, sí que os voy a decir que no me ha gustado que os metáis con la persona, pero como todo en la vida hay gente mejor y menos mejor, pero en líneas generales gracias por aguantarme y por algunos discursos que he dado; por lo tanto me llevo una buena imagen de vosotros, y espero que vosotros mía a nivel de respeto lo mismo.

Gracias a esta gran ciudad de Logroño, que conocía un poquito. Parte de mi familia por parte de mi padre es de La Rioja, de Rioja Alavesa. Gracias a toda esa gente anónima que me lanzaba alguna palabra de ánimo, que también los había, y te paraban y te daban energía. La gente de esta zona somos muy buena gente. Me voy no habiendo conocido mucho Logroño, no estaba para salir mucho. Para tomar un café, poco más. Me hubiera gustado disfrutarla más. En otra situación, quizás, ahora vendré y podré salir por la San Juan, que es para los de aquí, y podré tomarme algo.

Sabéis y no lo sabéis, me había traído aquí mis sueños. Y los sueños se cumplen o se desvanecen, como en este caso. Todos esos sueños que uno tiene se van de un plumazo, pero tengo algo de esperanza de que alguno de ellos se cumpla. Por lo tanto, vamos a por ello.

Y para acabar, por último, a las personas que me conocen de verdad, que me quieren, mis padres, mi padre (se emociona), que en este momento está un poco malito, mi madre, mis hermanos, mis hijos, y por encima de todos estos, mención especial a alguien muy especial en mi vida, que es la mujer de mi vida, el amor de mi vida, que ha estado ahí siempre, siempre, siempre, en los buenos momentos y también en los malos. Que como podéis pensar sufrimos, porque los entrenadores también sufrimos. Y a ese amor de mi vida, gracias, mi princesa, mi vida, ni niña, te quiero muchísimo.

Muchas gracias a todos, con esto ya acabo, y digo mis últimas palabras delante vuestra, y mucha fuerza para todos. Que suméis, es muy importante lo que nos estamos jugando. Y digo nos porque desde la distancia os observaré detenidamente.

Nada más, familia, un nuevo día y lo más importante ya se sabe es que mañana vuelve a amanecer.

Mucha salud para todos y profesionalmente que cada uno tengáis lo que merecéis. Muchas gracias y hasta siempre”.

*Escucha la carta abierta de Natxo González a la afición blanquirroja

Subir