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Autol se prepara para el partido más importante de su vida

Único, histórico, trascendental, crucial… Hay infinidad de sinónimos para describir lo que le espera al Autol este próximo miércoles. El club catón tiene al Dinamo de San Juan, equipo de un barrio humilde de Santurce,como último escollo para jugar contra un Primera División.

En la localidad riojabajeña los preparativos se viven entre el nerviosismo y la responsabilidad. Sergio Jiménez es el presidente del club, un cargo que ostenta desde hace pocos meses, lo cual no le quita sentir el peso de la historia en sus espaldas.

“Es un partido histórico, te das cuenta cuando comienzas con los preparativos. Es una auténtica locura todo lo que hay que tener organizado para un partido así”, señala, reconociendo que estos días está viviendo un sueño. Pocos son los aficionados del conjunto catón que a día de hoy pueden conciliar el sueño. Los nervios están a flor de piel. “La afición está totalmente entregada, todo es ofrecerse a ver en qué pueden ayudar”, cuenta el presidente a pocas horas para que el partido más importante de sus vidas se dispute.

No empezaron bien las cosas esta temporada. El auténtico follón que se armó con el partido contra el Comillas a final de la temporada pasada propició que el club no supiese hasta última hora si jugaría en Tercera o Preferente. Un lío monumental que terminó con abogados, resoluciones, tribunales y el equipo en la categoría inferior. Mucho esfuerzo sin ningún resultado. Y, como a veces pasa en la vida, de los momentos amargos llegan los dulces casi sin darte tiempo a reaccionar. Y entonces se presentó la posibilidad de jugar la Copa del Rey y esta agradable sensación de estar viviendo un momento único.

Todo está ya preparado. De Santurce llegan unas seiscientas personas que, con la afición catona y la que llegue del resto de municipios cercanos, completarán las dos mil butacas de La Manzanera este miércoles. Nadie es ajeno a lo que conlleva preparar semejante tinglado. “Hemos tenido hasta que preparar un palco improvisado porque viene el presidente de la Federación Vasca de Fútbol, la alcaldesa de Santurce…”, cuenta Esparza, que estos días vive pendiente del teléfono: “No sabes la cantidad de medios que están ya acreditados; esto para un club como el nuestro es una auténtica locura”. Bendita locura.

En un municipio de poco más de 5.000 habitantes todo el mundo conoce a Sergio Esparza. “Especialmente la gente mayor te para y te pregunta; ellos lo viven como un momento único para Autol”. A pesar de que en la localidad hay otros deportes con más arraigo, como el balonmano, desde hace años el club hace una importante labor de cantera, con torneos de fútbol base como el que cada año se celebra en torno al puente de la Constitución. “Y un partido de estos también sirve para enganchar a más aficionados”, dice el presidente. Siempre es así, como decía aquel (no se sabe bien si Valdano o Sacchi): “El fútbol es la cosa más importante entre las cosas menos importantes”.

Hasta hoy los jugadores han intentado permanecer ajenos a todo el follón que supone un partido de estas características. “Hemos estado pendientes del último partido de liga porque nuestro objetivo fundamental es subir a Tercera”, dice Jiménez, consciente de que ésto puede ser sólo un sueño fugaz. Pero ¿y si sí?. Pues si ganan ya tienen claras las cosas: “Es evidente que en La Manzanera, aunque está muy bien para una categoría como la nuestra, no podríamos jugar contra un Primera, así que si conseguimos pasar está la opción de jugar en La Planilla de Calahorra o incluso pedir Las Gaunas”, cuenta.

Y es que la ilusión del club y de muchos de sus aficionados es que en una hipotética ronda posterior les tocase el Athletic de Bilbao: “Aquí hay mucho aficionado de ese equipo, pero es que además, estando a poco más de hora y media, esto podría ser una auténtica locura”. El directivo baja del sueño y piensa entonces en lo económico: “Además una taquilla de esas te sanea al club para muchos años”.

“Representamos al fútbol humilde”

Estos días pocos temas de conversación hay en Autol más allá del partido. Ahora solo queda que pasen las horas y que el balón empiece a rodar por el campo. Uno de los que tendrán la oportunidad de vivir de primera mano esa experiencia única es Javier Manrique: “Lo del miércoles tiene que ser una fiesta, sabemos que representamos al fútbol humilde riojano y estamos preparados mental y físicamente para ganar el partido”. Para el jugador catón, “ya jugar este partido es un premio y queremos compartirlo con los aficionados, los del Autol, pero también los del futbol riojano, que vengan todos a disfrutar de la Copa”.

Hasta hoy no han hablado dentro del vestuario del partido: “Nuestro objetivo es subir a Tercera y estábamos muy pendientes del partido en Baños, pero es difícil no pensar en lo que se nos viene encima”, dice. Hace unas semanas parte de la directiva fue a ver al equipo al que se enfrentan. “Hasta ahora todos hemos estado enfocados en la liga, pero estamos listos y confiamos en nuestra posibilidades”, asegura.

Víctor es otro de los que seguro saldrán al campo este miércoles. Catón hasta la médula, para él el partido es más importante, si cabe. “Cuando eres niño tu sueño es siempre jugar en el primer equipo de tu pueblo y si lo puedes hacer en un partido de estas características ya es una gozada”, explica, animando a todo el pueblo a que se una a la fiesta del miércoles. Vive unos días emocionantes: “Todo el mundo te para para preguntarte cómo está el equipo, si hay posibilidades… Se respira fútbol por los cuatro costados del pueblo”.

Cabeza y corazón

Y si la emoción embarga a todo el municipio, Nacho Herce, el que llevará los mandos del equipo desde el banquillo, se muestra tranquilo. “No sé cómo estaré mañana, de momento hoy aún no han surgido los nervios”, asegura. Las claves de la victoria las tiene claras: “Hay que controlar la presión, los nervios, el ambiente y el contexto, porque es lo que puede que pasar factura; hay que tener en cuenta que son jugadores que no están acostumbrados a jugar partidos con tanto público como el que nos vamos a encontrar, pero confío en ellos y el partido del ascenso del año pasado nos puede venir bien. Hay que aprender de lo que vivimos ese día”. Su plantilla no supera los 24 años de media: “Es un equipo de futuro que se encuentra con un partido que quizás no vuelvan a jugar en toda su carrera; hay que templar bien los nervios para el miércoles”.

El equipo ha entrenado este martes por última vez antes de la crucial cita. “Hay que trabajar algo de estrategia, de balón parado, esos aspectos en los que puede decantarse un partido de estos”. El técnico no ha dejado de pensar en ello en las últimas semanas: “Aunque queríamos estar centrados en la liga es difícil no pensar en este partido, en el sorteo previo, en si te toca en casa o fuera, es inevitable. El Autol tiene cincuenta años de vida y nunca ha jugado un partido así”.

Y con estos mimbres, el club pretende conformar un cesto que les lleve al premio gordo, ese del que dentro de la plantilla no quieren aún ni pensar. Porque, de momento, lo importante es el partido del miércoles, el partido más importante de sus vidas.

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