Con la flecha hacia arriba, pese a todos los obstáculos. Así llega la UD Logroñés a los playoff de ascenso. Victoria clara de los blanquirrojos ante el Arenas de Getxo (1-3). Y también muy cara. El capitán Miguel Martínez de Corta ha caído lesionado en el tramo final de la primera mitad y apunta a baja de larga duración. Pese a ello, un doblete de Iñaki y otro tanto de Olaetxea han dado tres puntos importantes a los de Sergio Rodríguez, que alcanzan así los 68. La mejor puntuación de su historia a falta de dos jornadas.
Gobela siempre es un feudo difícil. Sus reducidas dimensiones lo hacen un territorio hostil al visitante. Un lugar donde el cuero suele surcar los cielos, sin lugar a florituras. Pero la ‘Banda de la Guindalera’ tiene entre ceja y ceja un reto: ascender. Y cada jornada lo demuestra. A los cinco minutos, primer golpe. Saque de esquina y remate de Iñaki a la red. 0-1 y las cosas claras. La lluvia ha hecho acto de presencia y el encuentro se ha convertido en directo, físico. Una verdadera batalla a orillas del Abra.
Los vizcaínos han subido líneas y se han animado en busca de Miguel. Pese a ello, la zaga riojana se ha mantenido recia y serena. Hasta que ha llegado el minuto 40. Balón largo del Arenas y reacción del guardameta para cortar la jugada. En su intento por cortar el juego, el arquero logroñés ha caído lesionado. El árbitro, quizá sin percatarse, ha decidido continuar el juego. Al final, Aitor Ramos, desde unos cuarenta metros, ha firmado las tablas a puerta vacía. Errónea decisión del colegiado, que debió parar el encuentro.
A partir de ahí, el choque se ha detenido durante unos cuantos minutos. Los suficientes como para evacuar a Miguel y meter a Iván Buigues. El contratiempo era severo, pero la moral blanquirroja no ha decaído. Otra vez el balón parado. Falta desde el círculo central, peinada en el área pequeña y remate de Olaetxea para romper las tablas. Y no ha quedado ahí la cosa. Iñaki ha firmado su doblete con un disparo tenso pegado a la cepa del poste. 1-3 y la sensación de que sí, que puede ser el año.
Más allá de la defensa, la mejoría del conjunto blanquirrojo en ataque invita a soñar. Doce tantos en los últimos cinco partidos. Y este sábado han podido ser muchos más. Andy ha ejecutado de forma impecable una falta desde la medular, encontrando la respuesta de Txemi Talledo a córner. En esa acción, lanzamiento al palo de Borja García cuando lo más fácil parecía embocarla. También las han tenido Rayco y Ander Vitoria. Es decir, ha estado realmente cerca la ‘manita’ en Gobela. Impensable.
Y por supuesto, el rendimiento defensivo se ha mantenido impecable. Más allá de la acción del gol, los blanquirrojos apenas han sufrido atrás. Cuando lo han hecho, ahí ha estado Buigues para impedir el tanto, tal y como ha ocurrido en un mano a mano de Etxaniz. Respuesta sobresaliente de un conjunto que ignora la plaga de lesiones y todos sus problemas. Una escuadra que sólo mira hacia adelante, hacia Segunda División. Y que no quiere parar hasta colocar a la UD Logroñés en el fútbol profesional.
