Jesús Ángel Garrido, portavoz del Grupo Parlamentario Popular, llegó al Parlamento de La Rioja en 2015. Tiene un cuadro de Aznar en su despacho, otro de Rajoy y un tercero de su familia. Le falta el de Pablo Casado, que ya lo ha pedido. El portavoz del PP asegura tener las “mejores vistas” del antiguo convento de La Merced, ya que desde ahí puede ver el vestíbulo del edificio: quién entra, quién sale, quién habla con quién, quién discute… aunque comenta que no suele fijarse mucho. Retomado el curso político, hace balance de lo que ha pasado, pasa y pasará.
– ¿Cómo ve la situación política actual en La Rioja?
– Muy ilusionante. En el PP la vemos muy ilusionante, con grandes retos por delante para acabar la legislatura. Tenemos que sacar adelante la ley de modificación de la ADER, en breve podremos sacar adelante la ley de gratuidad de libros de texto y estamos trabajando en la Ley del Menor, la Ley de Participación Ciudadana y el Estatuto de Autonomía. Son grandes objetivos de región que están encima de la mesa. Por otra parte, estamos muy ilusionados con la campaña que se avecina. Se ha hecho un buen trabajo por parte del PP en esta legislatura y los ciudadanos de La Rioja van a saber valorarlo. El liderazgo de José Ignacio Ceniceros y Pablo Casado va a ayudar que salgamos reforzados.
– ¿Se nota la cercanía de las elecciones en el ritmo político?
– Siempre hemos dicho que íbamos a ‘exprimir’ o ‘escurrir’ la legislatura porque son muchas cosas las que quedan por hacer, todas ellas de gran calado, pero otros están más preocupados en sus propios procesos internos para seleccionar candidatos y quieren dar por concluida la legislatura. Eso sí que contamina el trabajo en la Cámara. Será más fácil ver ‘espectáculos políticos’ más que trabajo serio y contundente para beneficiar a los riojanos, que es lo que vamos a hacer desde el PP.
– ¿Qué sensaciones y previsiones tiene?
– El presidente Pablo Casado habla de un bipartidismo imperfecto y yo creo que en La Rioja no nos alejaremos de esa tendencia. Tengo la suerte de recorrerme muchos municipios de La Rioja, hablo con muchos riojanos y percibo una gran ilusión en el proyecto del PP, José Ignacio Ceniceros y Pablo Casado. Creo que vamos a obtener muy buenos resultados, muchos más concejales y más diputados. Vamos a tener un apoyo parlamentario reforzado al proyecto de Ceniceros.
– ¿Dónde se ve personalmente?
– Donde quieran los riojanos y el presidente. No me lo he preguntado nunca.
– Concejal en Villamediana y diputado desde 2015, ¿es un recién llegado a la política?
– Milito en el PP desde hace mucho tiempo (1992), pero siempre que he podido a lo largo de mi vida he colaborado con el PP allí donde se me ha sido requerido. La vida tiene estos caprichos, viene como viene y lo agradezco. Estoy disfrutando mucho porque es algo que siempre me ha gustado y comparto la vocación política de servicio. Ni lo he buscado ni es algo que me preocupa, tengo mi labor profesional y estoy a disposición del partido y del presidente para lo que sea necesario.
– ¿Cómo se ven los toros desde dentro y no desde la barrera?
– Pues se ve que las cosas son más complicadas de lo que realmente parece. Desde fuera, se emiten juicios con cierta ligereza y las cosas tienen su complejidad. Yo admiro mucho del presidente Ceniceros el temple, saber esperar el momento preciso… y eso es una gran virtud en política. Y también he visto que hay trabajar mucho. Si no se trabaja, difícilmente las cosas pueden salir adelante. Y hay que querer mucho a La Rioja y a los riojanos para plantear proyectos interesantes de futuro. Cuando se tiene gran cariño por nuestra tierra y los riojanos, salen ideas de calado y de interés. Esa es la gran oportunidad que he tenido para poder desarrollarla en colaboración con el resto de diputados, el partido y el equipo de Gobierno.
– ¿Cómo ha cambiado la política riojana tras el fin de la mayoría absoluta en 2015?
– Los ciudadanos nos han dado un mandato claro de entendimiento. Por parte del PP, lo tuvimos claro desde el minuto uno y supimos llegar a acuerdos con aquellos que querían acordar. Llegamos a un acuerdo con Ciudadanos y hemos trabajado por cumplirlo. Ha habido un gran esfuerzo y responsabilidad por hablar mucho con el resto de formaciones políticas y, especialmente, con Ciudadanos. A veces con más éxito y otras con menos, pero siempre con buena voluntad. El balance es positivo de todo este período.
Hablando de Ciudadanos, se ha demostrado que no ha sabido responder a las expectativas generadas en los riojanos y yo creo que eso se notará. Ellos tienen que decidir si quieren ser parte del problema o de la solución. En sus manos está y en función de sus decisiones serán parte del problema o de la solución.
– ¿Por qué cree que no ha respondido a las expectativas?
– Se han dejado llevar por el tacticismo a corto plazo más que tener un proyecto claro de región y se han preocupado más de intentar ocupar un espacio que naturalmente no le correspondía, relacionado también con sus vaivenes ideológicos (de socialdemócrata a liberal). Todo eso les ha complicado su forma de hacer política.
– ¿Les ve sentados en el Gobierno a partir de 2019?
– No lo sé. Tengo claro que el proyecto del PP, liderado por José Ignacio Ceniceros, saldrá reforzado en las urnas y en el Parlamento. A partir de ahí… no me atrevo a hacer vaticinios.
– Volviendo al PP, ¿cómo ha cambiado desde 2015?
– Los cambios lógicos y normales que existen en cualquier organización cuando se ve sometida a los avatares a que nos vimos sometidos nosotros, al igual que ha sucedido a nivel nacional. Cuando se pierde el poder, hay una cierta convulsión y hay que seguir con el proyecto político. En política, hablamos siempre de carreras de relevos y esto es lo que es. Lo importante es el proyecto más allá de las personas y de quien esté en cada momento. He hablado con muchos concejales y con muchos afiliados que en momentos pasados tuvieron un papel relevante y ahora están en un segundo, tercer o cuarto lugar. Todos ellos son importantes. A partir de ahora, lo que realmente nos preocupa es la unidad del voto de centro-derecha y volver a dar un motivo a los riojanos para que vuelvan a votar al PP de forma mayoritaria como han hecho en otras ocasiones.
– ¿Se van cerrando las heridas?
– Eso es un debate superado. El propio presidente Pablo Casado nos ha dado un ejemplo de ello y lo que nos preocupa es la unidad del voto de centro-derecha. Es ahí donde estamos trabajando y están centrados nuestros esfuerzos.
– Hemos hablado de pasado, mirando al futuro. ¿Qué queda por hacer esta legislatura?
– El gran reto es la reforma del Estatuto. A ver si somos capaces entre todos de aprobarla como se merece, incorporando los derechos y deberes de los riojanos para que sea una ley la que los regule como forma de proteger al máximo esos beneficios para los riojanos. Eso es algo que no sólo beneficia a Ceniceros sino a todos los riojanos.
– ¿Estamos en plazo de aprobarla?
– Sí, si hay voluntad política.
– ¿Cuál es el mayor obstáculo?
– El Partido Socialista Obrero Español y el Partido Socialista de La Rioja.
– ¿Por qué?
– Piensan que si sale, sólo beneficia a Ceniceros. Así de mezquinos.
– ¿Hay que profesionalizar el Parlamento?
– Niego la mayor. Los grupos parlamentarios ya reciben una asignación con cargo de los presupuestos (1,6 millones), por lo que ya se cuenta con los recursos públicos necesarios para poder hacer frente a su actividad política. Cada grupo, luego, lo destinará a lo que quiera. Lo que hay que pedir es una gestión razonable y razonada de esos recursos que se ponen a su disposición. Da la sensación de que a los diputados no se les da ningún medio y es falso.
– ¿Y cambiar el funcionamiento de la Cámara?
– La oposición se escuda en el reglamento diciendo que facilita poco el trabajo de sus señorías, pero con este mismo reglamento la oposición ha adoptado decisiones en contra del PP como modificar el presupuesto y duplicar el importe destinado a los diputados. Lo han hecho ellos por una vía rapidísima. Es la excusa perfecta. Todo es mejorable, pero tenemos un reglamento que funciona bien, pero hay que sabérselo para poder aplicarlo en función de los intereses de cada grupo. Yo tengo la sensación de que no se lo saben.
– Si se tuviera que quedar con una medida de esta legislatura, ¿cuál sería?
– Se han aprobado leyes importantes como la Ley de Cuentas Abiertas. Le dimos la vuelta como a un calcetín porque era una medida propuesta por Podemos y ahora tenemos la mejor ley de cuentas abiertas de España. Somos un modelo en transparencia. Habría que hablar de la ley de ciudadanía, la ley de diálogo social y de la reducción de impuestos. Y luego hay aspectos importantes como haber generado riqueza, creado empleo y redistribuir la riqueza de forma equitativa.
– ¿El gran debe sería la mejora de las infraestructuras?
– Hablamos de competencias estatales. ¿Qué se ha hecho desde La Rioja? Se firmó un protocolo muy importante con el ministro Íñigo de la Serna que se ha ido cumpliendo escrupulosamente y ha puesto sobre la mesa todos los objetivos que tenemos en nuestra comunidad. 1. No me quiero olvidar del desvío obligatorio de camiones con resultados evidentes tan positivos en seguridad vial. 2. Hemos tenido un debate en el Parlamento exclusivo en materia de infraestructura en el que se ha llegado a un acuerdo amplio con lo que queremos hacer. 3. Hemos tenido que convivir con cuatro gobiernos de la nación distintos en situaciones políticas muy diferentes y eso dificulta la gestión, aunque no es por echar balones fuera sino por poner encima de la mesa las dificultades reales.
– ¿Qué ha sido lo más difícil en este tiempo?
– La negociación de los presupuestos 2018 con Ciudadanos. Seis meses hemos estado negociando un presupuesto que dura once meses (se aprobó el 31 de enero). Eso fue un ejercicio de paciencia y resistencia numantina. Erre que erre. Pasamos por todas las fases habidas y por haber.
– ¿Qué tal van los de este año?
– Van muy bien.
– ¿Vamos a tener presupuestos?
– Eso hay que preguntárselo al Gobierno. Yo soy el portavoz del PP, pero por lo que me cuentan, van bien. Mi obligación es trabajar porque podamos tenerlos. Es lo que vamos a hacer y lo que se ha hecho siempre.
– ¿Qué es lo que más le ha sorprendido del resto de formaciones?
– El poco encaje. Tienen poca capacidad de encaje de las críticas. Uno tiene que venir a la política sabiendo asumir las críticas con la deportividad necesaria para esta actividad. Otra cosa que me ha sorprendido es la vaporosidad de los criterios políticos que mantienen los distintos partidos de la oposición. Ha habido y hay mucho tacticismo y eso empobrece la actividad política.
– Por último, ¿un deseo para lo que queda de legislatura?
– Pediría a las formaciones políticas de la oposición que de verdad pongan en primer lugar los intereses de los riojanos. Si lo hacen, estos seis meses serán fructíferos para todos.
