Aunque íbamos a diferente curso, nos encontrábamos hace ya unos cuantos años por los pasillos de la Escuela de Artes y Oficios. Tuvimos los mismos profesores, tales como Vicente Gallego, Félix Reyes, Rosa Castellot y Vicente Ochoa, entre otros. Pero a diferencia mía, que me quedé en la escuela hasta terminar ‘Graduado en Artes Aplicadas en la especialidad de Decoración’, ella en el segundo curso se marchó a estudiar Bellas Artes en la Facultad de Sant Jordi de Barcelona y cerámica en la Escuela Massana, animada por el entonces director y profesor de la Escuela, Félix Reyes, Felo para los amigos.
Como describe Félix Reyes en el catálogo de la exposición: “Desde un primer momento destacó por su entrega sin límites a lo que para ella era su vocación y su razón de ser. Viendo su pasión y condiciones la animé para que hiciera Bellas Artes, cosa que sus padres no tenían muy claro. Pero un día que vinieron a hablar conmigo les convencí de los valores que su hija tenía para el mundo del arte, y accedieron a ello. Yo lo tenía olvidado, pero Rosa me lo recordó hace unos días. Desde entonces hemos mantenido una relación en la que he podido seguir su evolución como persona y artista”.
Como se detalla en el libro ‘La Rioja inabarcable. A través de la mirada de 26 artistas’, cuyos coordinadores artísticos fuimos José Antonio Aguado y este que suscribe, podríamos resumir su amplio curriculum en estas mencionadas líneas de dicho libro: “Logroño, 1956. Tras haber cursado dos años comunes en la Escuela de Artes de Logroño, marchó a Barcelona a estudiar Bellas Artes en la Facultad de Bellas Artes de San Jordi, donde también se graduó en Cerámica.
Su obra, influenciada por la pintura mediterránea, está dotada de una luz y una pincelada suelta y ágil, dentro de una línea expresionista que no ha querido disimular ciertos engarces `fauves´. Trabaja fundamentalmente el paisaje, los bodegones, los interiores y las figuras, empleando todo tipo de técnicas y otorgando especial importancia al color. Por el gusto de jugar con las texturas y el color, a veces pinta abstracción.
Ha expuesto en las principales capitales españolas y recibido numerosos premios, entre otros una medalla de honor en el XI Certamen Nacional de Pintura Fundación Cruzcampo-Ciudad de Calahorra. Dedicada a la enseñanza en el Instituto Sagasta de Logroño desde 1985 hasta abril de 2016 y conduciéndose con la suave firmeza de las mujeres con encanto -posee el amargo don de la belleza, charme, finura en el trato-, despertó muchas vocaciones, procurando inculcar fundamentalmente creatividad y disciplina al alumnado. Ha colaborado en acciones humanitarias a favor de países desfavorecidos y es miembro del Patronato Fundación Escultor Daniel”.
La muestra es una exposición antológica de la artista riojana María Rosa Sáenz de Pipaón, en la cual puede contemplarse su evolución a lo largo de 40 años de creación con distintos cuadros en los que el protagonista suele ser el paisaje riojano pintado con colores “a veces, hasta demasiado saturados”, así como algunas esculturas, bocetos e ilustraciones de la artista.
Se considera una pintora figurativa y espontánea, del natural, atraída por los paisajes, los animales, las personas, que lleva a cabo una pintura sin tapujos, con la pincelada limpia, como quiere acercarse al mundo. La concentración y la felicidad que le reportan pintar se expresa con una gran potencia cromática y tensión que brota desde lo más profundo en un proceso constante de aprendizaje con soltura en el pincel desde el que brota la luz hacia el expresionismo hacia los sueños.
Todo ello se puede contemplar en esta exposición que presenta Fundación Caja Rioja ‘La Merced’ para acercarnos a las emociones de esta artista que plasma el color de lo que podemos soñar, que sintetiza la belleza de nuestro entorno en los tonos de la calidez de su pintura y cuyas pinceladas de luz son referencia en la cultura artística de La Rioja.
Tan pintora como maestra, la conexión con su público es la que también establecía con sus alumnos cuando deseaba que aprendieran los sentimientos y no solo los conceptos. Ha ejercido la docencia en Haro, Logroño y Corella. En 1987, tras aprobar las oposiciones, comenzó a trabajar en el IES Sagasta y en el IES Escultor Daniel. Antes de su jubilación compartimos aula (ella por la mañana y yo por la tarde-noche) en el IES Sagasta, cuando hace unos cuantos años di unas clases de acuarela en la Asociación Amigos del Plus Ultra y el mencionado Instituto le cedía las aulas a dicha asociación.
Una interesante y bella exposición antológica de esta artista y profesora, que puede visitarse hasta el 13 de abril, y que se incluye en la colección “Nuestros referentes”, un ciclo de exposiciones de producción propia de Fundación Caja Rioja”.
