Esta vez ha sido sin tractores. Los ‘chalecos amarillos’ han vuelto a elegir Logroño como escenario de sus reivindicaciones. Varias decenas de ellos se concentran frente a la Delegación de Gobierno, tal y como se acordó en las reuniones que se mantuvieron en la tarde de este miércoles en diferentes puntos de la geografía riojana. Esta vez han llegado en coches a la capital y han accedido a pie hasta el centro de Logroño.
Así, el grupo de agricultores se ha concentrado -sin comunicación previa a las administraciones- en el Espolón para seguir haciendo visibles sus quejas. Allí han explicado que “hemos decidido venir a pie porque nos están atosigando a pesar de que creeemos que no estamos haciendo nada ilegal aunque la señora Arraiz (en alusión a la delegada del Gobierno) diga que estamos cruzando líneas rojas o, como dicen otros, que rozamos la delincuencia”.
Los representantes de los agricultores han explicado que “hemos decidido venir pacíficamente para que la gente se de cuenta de que no somos unos borregos” y han asegurado que “no vamos a dejar que nadie desde arriba nos meta miedo”.
“Hemos estado todo este tiempo unidos, sin ideologías” y han recordado que “nos unimos a los sindicatos para hacer más fuerza” y advertido que “no nos vamos a amedrentar y que si piensan que nos hemos deshinchado es para coger más aire todavía”.
El objetivo es estar a lo largo de la mañana en el Espolón para después dirigirse al Consejo Regulador de la DOCa Rioja, donde desde primera hora de la mañana se celebra una reunión con las organizaciones agrarias en las que se están tratando las medidas acordadas en las últimas jornadas. “Pueden ser jornadas históricas para el campo riojano”, han añadido los agricultores concentrados frente a una sede de la Delegación blindada por agentes de la Unidad de Intervención Policial de la Policía Nacional, equipados con material antidisturbios.
