Desde 1994, cada dos años, el Ministerio de Salud, a través de la Encuesta ESTUDES, arroja luz sobre el consumo de drogas y otras sustancias en los jóvenes estudiantes de Secundaria (entre 14 y 18 años). Así, la de este año, pone de manifiesto un aumento en el consumo del alcohol entre los jóvenes riojanos tras la pandemia pero un descenso muy pronunciado con respecto a hace una década con bajadas importantes en prácticamente todos los consumos por los que se les ha preguntado a los chavales.
Así, tres de cada cuatro jóvenes riojanos entre 14 y 18 años reconoce haber probado el alcohol en algún momento de su vida, el 72 por ciento asegura haberlo hecho a lo largo del último año y casi un 58 por ciento verbalizó haberlo hecho durante el último mes (las encuestas se realizaron entre febrero y mayo de este año).
En lo que se refiere a consumo abusivo de alcohol, la mitad de ellos reconocen haber sufrido alguna vez una borrachera. Más ellas (52,2%) que ellos (48,2%). Además, un 46 por ciento asegura haberlo hecho durante el último año (de nuevo las chicas vuelven a ser mayoría con 48,1% frente a 44,3%) mientras que la cifra se reduce al 23,8 por ciento cuando se les pregunta si se han emborrachado en el último mes.
Pero no sólo al alcohol se refiere la encuesta. Si se habla específicamente de consumo de tabaco, el porcentaje de alumnos que ha fumado en alguna ocasión se eleva hasta el 31,2 por ciento entre los jóvenes riojanos de 14 a 18 años. El 26 por ciento lo han hecho durante el último año y un 20,6 por ciento en los últimos 30 días. Los porcentajes son, en este caso, más elevados entre las mujeres que los hombres.
Así, los riojanos de esa edad tienen sus primeras experiencias con el tabaco a una media de edad de 14 años mientras que los que lo consumen habitualmente lo empezaron a hacer con una media de 14,5 años. Una edad que asciende hasta los 14,8 años en el caso del cannabis. Y es que el 24,8 por ciento de los jóvenes riojanos confirman haberlo probado alguna vez, el 20,3 por ciento haberlo hecho en el último año y el 14,4 por ciento en el último mes.
También preocupa a los expertos el aumento de consumo de cigarrillos eléctricos entre los más jóvenes. El 45,5 por ciento reconocen haberlos consumido al menos una vez en su vida mientras que el 34,6 por ciento lo han hecho a lo largo del último año.
Con respecto al alcohol, la encuesta pregunta a los jóvenes por sus hábitos de consumo. Así, la mayoría reconocen consumirlo en pubs y bares, mientras que en segundo término están las discotecas y detrás de estas las calles y plazas. Sobre dónde lo adquieres, bares y pubs vuelven a estar en primer lugar seguido de supermercados y tiendas de barrio. El 28 por ciento de ellos aseguran haberlo consumido alguna vez en su propia casa y el 60 por ciento reconoce que han podido comprarlo ellos mismo, a pesar de que la mayoría del espectro de la encuesta son menores de edad.
Sobre lo que han bebido a lo largo de la última semana, el 22,4 por ciento reconoce haber bebido cubatas y combinados, el 13,6 por ciento cerveza, el 9,8 por ciento licores fuertes, el 5,7 por ciento licores de frutas y esa misma cifra sostiene haber bebido vino.
Entre los motivos esgrimidos en primer lugar aparece la diversión y después la sensación que proporciona o encajar en el grupo. Entre ellos es más habitual el desinhibirse y entre ellas una de las respuestas habituales es ‘superar los malos momentos’.
En el consumo de bebidas energéticas, un 46 por ciento reconoce consumirlas (baja diez puntos con respecto a los últimos años) y un 22 por ciento mezclarlas con el alcohol.
Entre las aficiones de los jóvenes de esa edad destaca el deporte. Un 80 por ciento de los chicos lo practican de forma asidua mientras que la cifra baja al 63,3 por ciento en ellas. Sin embargo en la lectura ellas son las que arrasan con un 32,6 por ciento de lectoras habituales frente a un 13,2 por ciento de lectores asiduos.
