Nadie parece encontrarle explicación alguna a lo que le está sucediendo a la UD Logroñés en esta primera vuelta del campeonato. Prácticamente infalible en casa, donde suma 20 de los 24 puntos jugados en su estadio, el equipo de Diego Martínez es un visitante cómodo para sus anfitriones. Porque saben que a buen seguro no ganarán este partido, pero también entienden que no lo perderán, cosa que se entiende como positiva al observar el proyecto que ha armado Carlos Lasheras para salir cuanto antes de Segunda Federación y ocupar el puesto jamás se debió perder. Sus rivales celebran, como es lógico, los empates ante la UD Logroñés.
Y desde la pretemporada se ha extendido por el club un discurso que ha calado pero que no está funcionando. “No va a ser fácil este campeonato porque el nivel ha subido y deberemos adaptarnos bien a los partidos de casa pero también a los que vamos a jugar fuera. Habrá dos ligas distintas, la de Las Gaunas y la de los partidos fuera de Logroño”. Y tanto. Pero por sabido no quiere decir que se tenga la solución. La UD Logroñés es sobresaliente en su estadio, y mediocre lejos de Las Gaunas. Por eso está ahora mismo a doce puntos del líder, un Bilbao Athletic igual de bueno en casa como lo es la UD Logroñés, pero también infalible lejos de Lezama.
Ahí está la diferencia. Y la plantilla ha observado este problema. El propio Jony lo manifestó el pasado domingo tras hacer tres goles al Gernika y ayudar a que su equipo ganara 7-1 en Las Gaunas. Vino a decir que estaban todos muy contentos pero que había que trabajar duro para mejorar como visitantes. Solo se ha ganado al San Juan, solo se ha perdido en Zubieta. Todo lo demás empates que de poco sirven visto el ritmo impuesto por el Bilbao Athletic.
Y a la UD Logroñés le toca viajar este fin de semana. Juega este domingo en Brea, a partir de las cinco de la tarde, con las cámaras de Aragón TV en directo a través de su página web. Y Diego Martínez, que ha convocado a toda la plantilla, quiere cerrar el año con buen sabor de boca, el que dejaría el triunfo ante un rival que ocupa puestos de descenso, que viene de empatar ante el Utebo que es segundo, y que juega en un campo particular al que se deberá adaptar la UD Logroñés, en un nuevo examen de una asignatura que de momento no está sabiendo aprobar teniendo siempre en cuenta la gran exigencia con la que parte este curso, donde solo vale el ascenso.
Para ello será importante no encajar en los primeros minutos, tanto del inicio del encuentro como de la segunda parte, hecho que ha marcado los últimos encuentros de una UD Logroñés que ha perdido cierta fiabilidad defensiva como se pudo ver el pasado domingo en Las Gaunas ante el Gernika, a pesar del 7-1, en un primer cuarto de hora para olvidar, o los dos goles recibidos en Zubieta, o el encajado en Tudela… “Estamos seguros de que no va a volver a pasar”, así de tajante se mostró el pasado viernes Diego Martínez a la hora de concretar sobre este asunto. “Los hemos hablado y no podemos repetir este tipo de situaciones que nos complican los partidos”.
Así pondrá fin la UD Logroñés a un año 2023 para olvidar. Un curso que comenzaba con la UD Logroñés llenando Las Gaunas en Copa del Rey ante la Real Sociedad con la esperanza de revertir la situación en liga de la mano de Natxo González y que acaba en Brea con la obligación de ganar para tener una Navidad tranquila en la que poder brindar por un 2024 que depare el único resultado posible: el ascenso a Primera Federación.
