Pilar Mazo.- El estado sanitario de la oliva amparada en la Denominación de Origen Protegida (DOP) Aceite de La Rioja es “muy bueno” y las previsiones son de obtener una cosecha muy buena en calidad y cantidad, por encima de los 2,4 millones kilos recogidos en 2022.
Así lo ha detallado a EFE la presidenta del Consejo Regulador de la DOP Aceite de La Rioja, Clara Espinosa, en uno de los momentos álgidos de la recogida de la oliva, en este puente de la Constitución, que apunta a que “va a ser una campaña mejor en cantidad de la que se esperaba”.
Ha informado de que 2023 ha sido “un año muy malo para el desarrollo del olivo” en La Rioja porque, como la mayoría de los cultivos, “lleva soportando una sequía severa y este año no ha sido mejor”. Después de una primavera muy seca, “llegó el agua en junio, pero fue en el momento menos oportuno, cuando se produce el cuajado de la aceituna”.
Además, “aquellas lluvias llegaron en forma de tormentas, tiraron al suelo una parte importante de la flor y el cuajado no fue todo lo bien que debiera haber ido”, ha explicado Espinosa, quien, sin embarco, ha recalcado que lo bueno de aquellas precipitaciones fue que el olivar se pudo recuperar y afrontar un poco los meses calurosos de verano.
En septiembre, la oliva empezó a deshidratarse porque el verano también fue seco, pero fue un mes en el que volvieron las tormentas y permitieron la recuperación del olivar y de la oliva que quedaba en el árbol, que no era demasiada.
Muy buen estado sanitario
En septiembre y octubre la aceituna fue engordando hasta el principio de la recolección y, en la actualidad, ha llegado en un estado sanitario muy bueno y, aunque hubo un ataque de mosca bastante tardío, a finales de octubre, “no afectó mucho a la calidad”, ha informado.
Con estas premisas, en un principio, se esperaba que esta cosecha fuera como la anterior, en la que en lo referente a la DOP Aceite de La Rioja se recogieron 2,4 millones de kilos de oliva y se obtuvieron unos 490.000 litros de aceite.
“Este año -ha recalcado- se espera mejorar ligeramente esa cifra porque las expectativas iniciales no eran muy buenas y, sin embargo, por la oliva que está entrando en los trujales, parece ser que va a ser mejor de lo que se pensaba”. Sin embargo, ha recalcado que restan estos cinco días de recogida, que es cuando los agricultores aprovechan para ir a sus parcelas y “hay que ver cuál es el resultado final”.
Los precios
El precio medio que se está pagando de la oliva asciende los 0,90 euros el kilo, pero, al inicio de la cosecha “siempre se paga más cara que al final”, ha informado.
Espinosa también ha indicado que el precio también ha subido respecto a la campaña anterior, lo cual también hace también prever que el precio del aceite no baje por la escasez de aceituna debido a la sequía y la falta de agua. Además, el producto tiene que subir de precio para poder cubrir los costes de producción, ha dicho.
De momento, “no se prevé que los precios (del aceite de oliva) vayan a bajar porque, aunque en La Rioja la cantidad de aceitunas ha podio aumentar, en el resto del país no ha sido así, ya que en abril hubo una ola de calor en Andalucía que quemó la flor de los árboles y la cosecha va a ser escasísima”, ha subrayado.
Las previsiones indican que, por el momento, los precios se mantendrán, aunque en función del clima que haga durante la primavera, empezarán a bajar, ha afirmado Espinosa, quien también ha dicho que si en esa época empieza a llover y se vislumbra que la cosecha de 2024 va a ser mejor, probablemente los precios bajen, pero esta apreciación “son especulaciones”, ha concluido.
