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El Náxara recibe al líder y el Calahorra afronta ante el Izarra un partido a cara de perro

Foto: Carmelo Betolaza

La Segunda Federación camina hacia la mitad de la competición y la decimocuarta jornada ya está aquí. La UD Logroñés es el equipo riojano mejor clasificado, en tercera posición con 25 puntos, a nueve puntos del ascenso directo. Los blanquirrojos visitarán a la Real Sociedad C (domingo 18:00). El Calahorra, por su parte, suma 13, igualado a puntos con la promoción y solo dos por encima del descenso directo. Los rojillos recibirán al Izarra (domingo 16:30), en un duelo directo por todo lo bajo. Por último, el Náxara es colista con cinco puntos y su encuentro será de aúpa, pues recibirá al líder Bilbao Athletic (domingo 17:00). Triple sesión dominical.

Los najerinos vienen de caer con estrépito frente a la UD Logroñés en Las Gaunas (5-0). Según admitió su entrenador Josean García, “quizá al equipo le faltó algo de personalidad”. En cualquier caso, el conjunto de La Salera no pudo competir en la capital. Tirando de tópico, esta no es la liga de los blanquiazules. El problema es que el próximo oponente es todavía más difícil. Este fin de semana, llegará a La Salera el primer clasificado, escapado al frente de la tabla tras una racha descomunal de once triunfos consecutivos. Una racha muy pocas veces vista en una categoría como esta.

Foto: Carmelo Betolaza / Unai García marca el primer gol del UD Logroñés-Náxara

Tal y como reconoció el propio Josean: “Esperemos competir en nuestro campo, siempre es algo más complicado para los visitantes”. Un lugar donde los riojalteños pudieron, hace casi dos semanas, celebrar su primera victoria del curso frente al Brea (3-0). Eso sí, la permanencia sigue lejos. La Mutilvera, ocho puntos por encima, marca la promoción de descenso y con la misma cosecha se encuentra el Calahorra, dueño del primer lugar de salvación. Pese a la línea ascendente de juego (excepto en Las Gaunas), al Náxara le queda un largo camino para volver a salir a flote.

Otro aspecto importante son las bajas. En Logroño faltaron siete jugadores: Izan Flaño, Eloy, Carballo, Orodea, Viguera, Quirino y Diego Parrado. Orodea, uno de los veteranos en el vestuario, se lesionó frente al Melilla en Copa del Rey y tuvo que salir con muletas del césped, aplaudido por la grada. En el caso de Flaño y Eloy, todavía no han podido ni ser convocados. Quirino, al menos, ha estado las cuatro últimas jornadas en el banquillo, aunque todavía sin minutos. Malos resultados y lesiones, una mezcla que no ayuda.

Enfrente, el Bilbao Athletic es un auténtico gigante. Desde el 16 de septiembre no ha parado de ganar. Ni un solo día. En el pasado fin de semana, doblegó al Tudelano con un contundente 4-0. Izeta, con ocho dianas, lidera un ataque descomunal. 28 goles a favor, cifra solo superada por la UD Logroñés (29). Por si fuera poco, la defensa del filial blanquirrojo es todavía más efectiva, con solo cuatro goles concedidos. En los últimos ocho partidos de competición, solo ha recibido dos. Una racha escandalosa que confirma ya a los vascos como grandes favoritos a conseguir el ascenso a Primera Federación por la vía rápida.

De la mano del ex león Carlos Gurpegui, los cachorros cuentan con una plantilla repleta de futuros talentos para el primer equipo. Quizá algún día, los Olabarrieta, Varela, Ibon Sánchez o Gerenabarrena puedan saltar al césped de San Mamés. Mientras tanto, les toca formarse y de paso, sacar al segundo equipo del Athletic de un cuarto nivel del fútbol nacional donde nunca había estado.

Foto: Bilbao Athletic

Mientras tanto, el Calahorra espera un partido a cara de perro ante el Izarra. No está siendo una buena temporada para los rojillos, que acumulan tres derrotas consecutivas y solo han ganado un encuentro de sus últimos cinco. El pasado domingo, cayeron en Barbastro (1-0), evidenciando allí un grave problema de falta de gol. Ocho son los goles que han podido celebrar los riojabajeños y ninguno de ellos ha llegado en las últimas jornadas. Si se mira hacia la defensa, las cosas no van mucho mejor: seis semanas seguidas encajando y solo tres puertas a cero en la competición doméstica. Dos de ellas, en las dos primeras fechas.

El experimentado técnico Juan Carlos Pouso no encuentra el camino de los resultados. Aun así, el leioztarra sigue confiando en los mismos hombres y los onces son parecidos jornada tras jornada. Gonzi apunta a la portería, puesto que ha ocupado en 12 de 13 ocasiones. La apuesta en la defensa podría ser Sola, Cantero, Ekhi Senar, Zaldúa y Recio. Castillo (que no estuvo ni en el banquillo en Barbastro) y Ekiza podrían formar la sala de máquinas. Por delante, el abanico se abre bastante más y el entrenador tendrá que completar tres puestos con nombres como Pau Miguélez, Jorge Pérez, Jorge Domínguez, Uzkudun y Soeiro.

Su oponente será un Izarra revitalizado en las últimas semanas. Con 11 puntos, los navarros se encuentran en descenso, pero vienen de sacar siete puntos de sus últimos nueve, incluida una victoria ante el Arenas a domicilio. Lo último que cosecharon fue un empate en casa frente al Barakaldo (0-0). Una de las razones del cambio de racha ha sido el relevo en el banquillo. Bien entrado el mes de octubre, Íñigo de Goñi sustituyó a Andoni Alonso. Los resultados han llegado, en una plantilla con caras conocidas del fútbol riojano, como el mediocentro Urko Ardanaz (fichado del Alfaro) o el extremo izquierdo Mikel Arbeloa (procede de la UD Logroñés Promesas).

Por último, la UD Logroñés visitará Zubieta para medirse a la Real Sociedad C. Se trata de un partido clave para unos riojabajeños que necesitan ser más efectivos a domicilio, donde han conseguido solo ocho puntos que dieciocho. A los hombres de Diego Martínez no les queda otra que ganar y esperar un tropiezo del líder.

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