Bajo el lema ‘Comedores escolares seguros y con calidad’, la Federación de Ampas de Centros Públicos de La Rioja (FAPA La Rioja) ha convocado a una concentración en el Espolón que tendrá lugar el próximo domingo a las doce de la mañana.
La iniciativa llega a raíz de los numerosos casos de deficiencias en la empresa Serunion, que gestiona los menús escolares en los colegios de La Rioja y que se materializó especialmente el pasado 22 de septiembre, cuando aparecieron larvas de gusanos en los menús de catorce colegios riojanos (los de Logroño ese día no tenían colegio por las fiestas de San Mateo).
Después de que el Gobierno de La Rioja multase a la empresa con 13.000 euros, desde FAPA se insiste en que “es el momento de decir ‘no’ a Serunion” y reiteran que “queremos tener unos comedores escolares seguros y con calidad y queremos que se cocine en los centros escolares como mejor solución a todos estos problemas, como se ha podido comprobar estos años”.
Para ello, convocan a la concentración a “todas esas familias que habéis tenido que pasar por todo esto, pero también todas esas familias que algún día tendrán que usar el comedor, aunque sean días sueltos y a todas las Ampas y familias que sin usar ese servicio, quieran apoyarnos, porque todos somos comunidad educativa y ahora necesitamos el apoyo de todas las familias”.
El consejero de Educación y Empleo, Alberto Galiana, anunciaba hace unas semanas que el nuevo pliego del servicio de comedores escolares estaba ya “muy avanzado” y que la voluntad del Gobierno era licitar el nuevo contrato “con la mayor brevedad posible”.
También recalcaba que en él se incluirán aspectos referentes a los lotes y una zonificación con una apuesta por la calidad que se traducirá en un incremento de los precios finales del servicio para lo que la Consejería ha decidido incrementar hasta los 2,5 millones de euros la dotación de las becas de comedor escolar.
Nueva plataforma
Las familias no están dispuestas a parar hasta que se tomen medidas para que el menú que llegue a sus hijos en los comedores escolares sea de calidad. Por eso, los padres del comedor del colegio ‘González Gallarza’ de Rincón de Soto ha creado una plataforma de Afectados por Serunion, con el objetivo de seguir haciendo fuerza “para que se rescinda el contrato con la empresa y se busquen soluciones ante el despropósito de que lleguen gusanos a las comidas de nuestros hijos”.
Sabrina Olloqui es la portavoz de la plataforma: “Mis hijos no van habitualmente al comedor, pero justo el día que aparecieron los gusanos en la pasta tuvieron que ir; uno de ellos se comió dos platos antes de que nadie fuese consciente de que había gusanos en la comida”. Estos padres han creado el colectivo “porque, visto lo visto, no hay otra forma para que se solucionen los problemas continuos que se están dando en los colegios”.
El objetivo de la plataforma es, en caso de que nadie lo haga antes, poner una denuncia administrativa para poner en conocimiento de los juzgados los hechos. “Si es necesario vamos a ir a los juzgados auqnue sabemos que puede ser un proceso que se alargue en el tiempo”. No les vale la multa de 13.000 euros interpuesta por el Gobierno de La Rioja por incumplimiento de contrato. “Si han incumplido el contrato lo lógico es que se rescinda, esa multa es reirse de todos los padres”, comenta esta madre en nombre de los afectados que ya se han sumado a la plataforma y por la que ya se han interesado también AMPAS de León que están teniendo los mismos problemas.
De momento, el Gobierno de La Rioja trabaja en un nuevo pliego que pretende que salga “lo antes posible”. El consejero de Educación, Alberto Galiana, recalcaba hace unos días que la normativa de contratos exige cumplir los procedimientos legales y que, en base a ello, no se puede rescindir el contrato con la empresa, pese a la multa impuesta, hasta que no haya otro nuevo contrato porque no se puede dejar de prestar el servicio.
Cabe recordar que el caso de los gusanos en la pasta afectó a 14 comedores escolares de la comunidad, también a dos en Álava cuya comida sale de las cocinas centrales de Logroño recorriendo 120 kilómetros hasta llegar a los platos de los niños. En ese caso el Gobierno del País Vasco ha abierto tres expedientes: dos con una multa de 40.000 euros en total y un tercero de resolución del contrato.
“Se nos dijo tras el caso de la pasta de septiembre que los controles iban a ser reforzados y a las pocas semanas nos encontramos con otra situación similar que no llegó al plato de los niños gracias a los cocineros que hay en los colegios pero no por la intensificación de controles en las cocinas centrales”.
En el centro de Rincón de Soto son muchos los padres que han decidido dejar de llevar a sus hijos al comedor. “Había 46 chavales y ahora están 19 porque nadie se fía ya de la calidad de lo que llega a los platos de sus hijos”, comenta Olloqui advirtiendo que “los que los han dejado son porque no tienen otra opción pero además hay que tener en cuenta que son muchos los niños en La Rioja que por su situación de riesgo es la única comida que comen a lo largo del día”.
Desde la plataforma animan al resto de los padres de La Rioja a que se unan a ellos para así “trabajar con un respaldo mayor de la sociedad riojana porque existen otras alternativas más saludables para la alimentación de nuestros hijos” como los comedores integrados en los colegios e incluso aprovechar comedores en otras ubicaciones para que los niños puedan comer de forma saludable. “Aquí hay un comedor en el Club de Jubilados que no se utiliza que podría dar una comida de cercanía al que se podría sacar a los chavales para que comiesen allí”.
De momento, desde Rincón de Soto trabajan por seguir reuniendo apoyos del resto de los colegios riojanos para presionar para “que se busque de manera inmediata una solución a un problema que nos afecta a todos”.
