El ‘Triángulo de la Pantaloneta‘ vuelve a hacer de las suyas en la sierra riojana. Tras meses de letargo, ese misterioso fenómeno que ‘hipnotiza’ a transportistas del Este para convencerles de que sus camiones tienen las propiedades de una cabra montesa ha vuelto a dar signos de actividad.
Ha ocurrido a última hora de este lunes, cuando un vecino se ha topado de bruces con un camión atrapado en la carretera hacia Bonicaparra, pasado el cruce de Turza, en el término municipal de Ezcaray. Las imágenes bastan para explicar que ahí había un problema de esos que no se resuelven dando unas indicaciones básicas al conductor: “Tira, tira; endereza; dale contravolante…”.
Al ver el panorama, el vecino alertó al alcalde de Ezcaray, Diego Bengoa, que a su vez puso el percance en conocimiento de la Guardia Civil, que ofreció al transportista bajar al pueblo para sacar al camión de su trampa en la mañana de este martes. No obstante, el camionero prefirió pasar la noche custodiando su carga y optó por dormir en la cabina.
Según traslada Diego Bengoa a NueveCuatroUno, el transportista es de origen ucraniano y ambos se pudieron comunicar gracias al traductor del móvil hasta la llegada de Igor, un vecino de Ezcaray de origen ruso y que habla ucraniano.
Gracias a él, podemos saber que el camionero se dirigía este lunes hacia el paso fronterizo de La Junquera (Girona), pero el GPS le pedía repostar en la ya famosa gasolinera ‘fantasma’ de Ezcaray, cuya ubicación ya ha atrapado a decenas de transportistas en los últimos años.
Por el camino, el camionero no se percató de las señales que advierten de que los vehículos pesados están accediendo a una pista sin salida y ahora permanece a la espera de que una grúa logre desencajonar el tráiler de su trampa, pues en esa zona es imposible maniobrar marcha atrás y el rescate debe realizarse sorteando las curvas de la pista.
