La SD Logroñés ha caído frente al Fuenlabrada (2-1), en un encuentro donde los blanquirrojos han pasado del todo a la nada. Pese a jugar prácticamente una hora con diez futbolistas, un tardío gol de Damià les ha adelantado en el minuto 83. Parecía que tenían el partido ganado, pero su rival ha logrado remontar en el tiempo de añadido, mediante los goles de Ilies y Juan Durán. A los riojanos les ha tocado sufrir la peor cara de este deporte y se quedan a las puertas del descenso. Caerían a él si el domingo puntúa el Rayo Majadahonda.
Tras la victoria del Arenteiro, los visitantes han saltado al césped con más presión clasificatoria. Andrés García, su entrenador, ha mantenido su propuesta en la alineación. Iru ha defendido los palos, Gexan, Trespalacios, Murua y Paredes han formado la defensa; Castellano y Toni García se han situado en el centro del campo, con Óscar Fernández, Garrido y Rubio en línea de tres. Arriba, Escobar. Solo un cambio respecto al partido del Cornellà: Murua por Ezkurdia.
En la previa, García pidió a su equipo dominar y ser protagonista. No ha sido así, porque el Fuenlabrada ha comenzado ya muy cerca de la portería de Iru y con muchos saques de esquina. Sin embargo, a la SD Logroñés no le ha hecho falta llevar el mando para tener la más clara. Antes de cumplirse el cuarto de hora, Escobar ha finalizado una contra con un disparo al larguero de la portería de Belman. La más clara de un primer tiempo donde los riojanos han sufrido un serio contratiempo: la lesión de Dani Garrido. Damià Sabater, titular indiscutible con Fabregat, ha saltado al campo.
Las desgracias nunca vienen solas. Poco antes del descanso, el colegiado ha expulsado a Rubio por una entrada por detrás. Una decisión rigurosa y discutible, pero irreversible. En un encuentro sin demasiado ritmo ni ocasiones claras, los riojanos se han visto abocados a jugar casi una hora con diez. Ya les ocurrió en Sabadell, cuando la roja fue precisamente para Rubio.
Mientras tanto, en las gradas, la hinchada blanquirroja se ha buscado la vida. El Fuenlabrada, al tener el campo en obras, no ofrece entradas visitantes. Sin embargo, varias docenas de aficionados se han situado en los anexos. Una escena habitual esta temporada en el Fernando Torres. De vuelta al campo, a la Sociedad, con un hombre menos, no le ha quedado otra que encerrarse. García ha cambiado a Trespalacios (con amarilla) por Aurtenetxe. El objetivo: resistir y cazar algún contragolpe. La entrada de Carmona lo ha reafirmado.
Del todo a la nada en un final de frenopático
Con el paso de los minutos, los locales han sumado peligro. Buer ha rematado cerca del palo y Barbosa se ha encontrado con la madera. Sin embargo, la Sociedad nunca le ha perdido la cara al partido. Ha resistido ante encontrar la suya. En una acción rápida, Escobar se ha perfilado por banda izquierda y al límite de sus fuerzas, ha entrado en el área y la ha filtrado para Damià Sabater. Solo, el ’20’ la ha picado para encontrar un 0-1 que significaba oro puro.
Sin embargo, el Fuenlabrada es experto en remontar cuando todo parece perdido. Ya lo hicieron ante el Deportivo de la Coruña y ha vuelto a ocurrir. En un abrir y cerrar de ojos, la SD Logroñés ha pasado de tenerlo todo a irse absolutamente de vacío. Para no creer. Ilies ha empatado en el 94′ y en el 96′, Juan Durán le ha dado la victoria a los locales. Palo durísimo para una SD Logroñés que tendrá que reponerse ante el Tarazona (domingo 12:00, Las Gaunas).
