Esta vez no es excusa para llegar tarde a clase. La realidad es que son decenas de chavales en toda La Rioja los que no pueden llegar a tiempo a sus primeras horas de clase porque, por un motivo u otro, el autobús no les deja en hora en sus centros educativos. El problema afecta a muchas localidades, sobre todo a esas que tienen alumnos que han de llegar a la capital, donde cursan sus estudios.
Los problemas se están dando con alumnos de Formación Profesional y universitarios, que carecen de un convenio de transporte escolar, pero también en algunos institutos en el que no hay ruta y los jóvenes tienen que optar por el autobús interurbano para acercarse a sus clases.
Ya son muchas las familias de diferentes localidades las que han hecho públicas sus quejas. En San Asensio, por ejemplo, los chavales deben trasladarse a diario a Logroño a estudiar y son muchos los que han expresado su malestar por el hecho de que el primero de los autobuses que pasa por el municipio llega lleno o con retraso en la mayoría de las ocasiones, lo que les hace perder la primera hora de clase. Las familias han demandado al Gobierno de La Rioja (Transportes) y a la compañía, Autobuses Jiménez, un refuerzo.
Algo similar pasa en Nájera. En su mayoría, los estudiantes de la localidad que acuden a institutos de Logroño lo hacen a través del servicio interurbano, que arranca con el autobús de las 7:15 horas. Un vehículo que casi todos los días se llena en la primera de las dos paradas de la localidad, lo que se traduce en que los pasajeros del resto de paradas se quedan en tierra. Esta situación ha suscitado quejas entre los usuarios de esta línea y hace que los alumnos tengan que hacer colas desde las siete de la mañana para no quedarse sin plaza. El siguiente autobús sale de Nájera a las siete y media, pero cogerlo supone perder la primera hora lectiva completa.
Al otro lado de La Rioja la situación es similar. En Calahorra el primer autobús que sale a Logroño lo hace a las siete y media de la mañana. Imposible llegar a la clase de las ocho. El mayor problema es que muchas de esas clases computan a la hora de examinarse, por lo que podría ser complicado sacar alguna de esas asignaturas que tienen clase a primera hora.
Los ayuntamientos mueven ficha
Mónica Arceiz, alcaldesa de Calahorra, está pendiente del asunto, después de que varias familias lo pusiesen en su conocimiento. “Vamos a hacer lo que haga falta para que esos chavales lleguen a clase”, decía el otro día en su repaso de sus cien primeros días al frente del Ayuntamiento. “Ya hemos mantenido reuniones con la Consejería para que busquen una solución; los calagurritanos que estudian en Logroño tienen que poder vivir en nuestra ciudad y subir y bajar todos los días estando a 48 kilómetros”.
En Arnedo la situación es parecida y los cuatro grupos municipales del Ayuntamiento se han unido para reclamar al Gobierno de La Rioja que amplíe el horario del servicio de transporte metropolitano, planteando que contemple una ruta con salida desde la ciudad del calzado a las 6:45 de la mañana, con el objetivo de que estudiantes y trabajadores puedan llegar a Logroño antes de las ocho para ir a clase o al trabajo.
Hace dos años, la petición fue a la inversa y la comunidad la concedió: habilitó una línea de autobús desde Logroño a Arnedo, con salida a las 6:50 horas, para que los estudiantes pudiesen acceder a los ciclos de Calzado y Patronaje del IES Virgen de Vico.
La situación de Alcanadre es distinta en la forma, pero igual en la raíz. Los 22 alumnos de la localidad que estudian Educación Secundaria en Lodosa han vuelto a quedarse sin autobús gratuito para acudir a su centro escolar. No es un problema nuevo. Desde hace años, los alumnos de Alcanadre cursan sus estudios de ESO en Lodosa (Navarra) por ser, con mucha diferencia, el centro más cercano. Cinco kilómetros separan ambas localidades, mientras que el instituto riojano más próximo que ofrece toda la Educación Secundaria es el de Calahorra, a algo más de 24 kilómetros.
El pasado mes de abril el Gobierno de La Rioja se comprometió a ofrecer un servicio para estos chavales que corriese a cargo de Educación, tal y como se hace con el resto de los alumnos que tienen que desplazarse a otros municipios que no son en los que viven. “La promesa se ha quedado en agua de borrajas, no sabemos si por el cambio de Gobierno o por qué”, comentaban hace unas semanas las madres.
En la universidad, más de lo mismo
Desde el Consejo de Estudiantes de la Universidad de La Rioja también se quejan de la misma situación. “Ya es grave que alguien no pueda ir a clase a esas horas sabiendo lo que supone económicamente para las familias tener un hijo en la Universidad o estudiando fuera y peor es cuando existen actividades evaluables a esas horas como podría ser un examen”, reflexionan.
Son varios los municipios que tienen estudiantes de la Universidad de La Rioja y tienen problemas para poder llegar puntual a clases; Calahorra, Nájera, Rincón de Soto, Arnedo, Quel, Alfaro, Cortes, Tudela, Pradejón, Saturgada, Haro…
“Estamos seguros de que no serán los únicos y que debido a la falta de logística en los municipios de La Rioja hay problemas, no solo para los estudiantes de la Universidad de toda La Rioja, sino también para estudiantes de Formación Profesional e incluso Bachillerato, cuya situación es la misma”.
A su juicio es competencia “de las Administraciones públicas poder garantizar que los estudiantes de la Universidad, FP y bachillerato puedan tener una forma de ir, más aún cuando estamos hablando de estudiantes de la Rioja cuyas familias pagan impuestos con los que se financia la propia universidad pública la formación profesional y el bachillerato”.
En los próximos días, el Consejo de Estudiantes de la Universidad solicitará reuniones con los representantes del Gobierno de La Rioja para exponer el problema y demandar soluciones a un problema que impide que nuestra Educación Pública sea la de todos.
Contrato en vigor
Desde el Gobierno regional se achaca el problema a que hay un contrato en vigor que no puede modificarse y aseguran que se plantearán soluciones en el próximo pliego que se firme. Así, aseguran que todos aquellos alumnos que no tienen ruta en el transporte escolar y que tienen que utilizar otros medios para llegar a sus aulas tienen una ayuda para sufragar ese gasto.
Este mismo lunes se abre el plazo para solicitar estas ayudas para los alumnos matriculados en La Rioja o, incluso, en comunidades limítrofes. Podrán beneficiarse de estas subvenciones los alumnos residentes en La Rioja escolarizados en segundo ciclo de Educación Infantil y en la enseñanza obligatoria, incluidas las secciones bilingües, que no puedan hace uso de las rutas de transporte escolar contratadas por la Consejería de Educación y Empleo.
Además, también podrá solicitar estas ayudas el alumnado con necesidades educativas especiales por motivos de discapacidad física que cursen bachillerato o ciclos formativos de grado medio y que deban desplazarse de su localidad de residencia a un centro de otro municipio donde disponga de los recursos personales y materiales necesarios para atender su educación y que, salvo por motivos de enfermedad claramente justificados, no hayan repetido curso escolar.
