Luigi Moio, presidente de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), ha afirmado que “el vino es un producto muy diverso, unido al territorio”, motivo por el que “tenemos que seguir motivando este interés. El riesgo, si no, es caer en que todo sea igual”.
Moio, que ha ofrecido la lección inaugural ‘Del pasado a una lógica del futuro del vino’ en el acto de apertura conjunta del curso 2023-2024 de Campus Iberus, organizada por la Universidad de La Rioja, ha hecho estas declaraciones antes del inicio del acto.
Ante los medios de comunicación, ha afirmado que “el futuro de la viticultura es muy complicado”, pero ante este reto “lo que nos debemos de proponer es custodiar este vino y, sobre todo, el vínculo que existe entre el vino y el territorio porque es muy fuerte”.
El presidente de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) ha afirmado que el sector debe “afrontar varias problemáticas, como por ejemplo el cambio climático y los cambios que estamos viendo en la sociedad”, para lo que “necesitamos un compromiso muy importante con todo el mundo científico, de la investigación, para que ayude al sector”.
En este sentido, Moio ha recordado que la OIV nació “con ese propósito, surgió de 6 países –entre los que se encontraba España, Italia, Francia- hace 100 años. Nació para escuchar todas estas problemáticas, similares a las de hoy. Necesitamos expertos”, al igual que entonces.
En la actualidad, ha añadido, “vemos una evolución en la sociedad en lo que respecta a la percepción del alcohol y, por eso, –ha señalado Luigi Moio- es necesario informar a la juventud, educar también a la sociedad en un consumo sano, junto con las comidas y, unido a un estilo de vida sano; ya que el vino es una bebida alcohólica, pero diferente”.
En este sentido, ha señalado que “el vino tiene una vocación universal que nos habla de la diversidad. El vino, precisamente en un mundo cada vez más homologado, en el que cada vez hay menos diversidad, es un producto muy diverso, unido al territorio, al territorio de La Rioja, de Italia, de Argentina, de Chile, de Francia”.
Luigi Moio ha finalizado su intervención subrayando que “todos estos vinos son distintos, por lo tanto, el vino nos aporta un modelo diverso y tenemos que seguir motivando este interés. El riesgo sino es caer en que todo siga igual”.
El Campus de Excelencia Internacional ‘Campus Iberus’ es la alianza estratégica de las universidades del valle medio del Ebro (Zaragoza, Lleida, Pública de Navarra y La Rioja) que agrupa a unos 56.800 estudiantes, 6.300 miembros del Personal Docente e Investigador (PDI) y 2.740 del Personal de Administración y Servicios (PAS).
Lección inaugural de Campus Iberus
Luigi Moio, presidente de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), catedrático de Enología y director del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino de la Universidad de Nápoles, ha ofrecido la lección inaugural ‘Del pasado a una lógica del futuro del vino’ en el acto de apertura conjunta del curso 2023-2024 de Campus Iberus.
Su lección está dividida en tres partes, en la primera de las cuales intenta explicar cómo nació el vino, quién comenzó a producirlo intencionadamente y cómo habría sido el vino en la Antigüedad.
En este sentido, menciona el descubrimiento de fragmentos de tinajas de terracota a poco más de 50 kilómetros de Tiflis (Georgia), que fija la fecha del primer vino de la historia de la humanidad se ha retrasado entre el 6000 y el 5800 a.C, es decir en pleno Neolítico, en la Edad de Piedra.
En la segunda parte de su exposición, Luigi Moio recorre, de forma muy esquemática, la historia científica del vino o, más bien, los acontecimientos fundamentales que han llevado al hombre, en los últimos doscientos años, a comprender el «misterio» de la fermentación y el nacimiento del vino moderno.
En este sentido, menciona cómo el siglo XIX es el período a partir del cual se desarrollaron considerablemente los conocimientos científicos en química y biología del proceso de transformación del mosto de uva en vino y señala que “el vino ha gozado del extraordinario privilegio de encontrarse como elemento central en la historia del progreso científico de la humanidad por su decisiva contribución a la química y al nacimiento de una ciencia completamente nueva: la microbiología, fundada en el descubrimiento de las causas de la fermentación alcohólica y de las enfermedades del vino”.
En este apartado destaca dos descubrimientos fundamentales que crearon las condiciones para el nacimiento de una verdadera ciencia del vino: el estudio de la fermentación alcohólica en 1789 de Antoine-Laurent de Lavoisier, que reveló cómo una cantidad precisa de azúcar correspondía a una cantidad igual de alcohol etílico y dióxido de carbono (lo que le permitió formular la Ley de Conservación de la Masa); y la definición de la ecuación estequiométrica de la fermentación alcohólica por parte de Joseph-Louis Gay-Lussac en 1815.
En la tercera y última parte de su lección inaugural, Luigi Moio, menciona el protagonismo de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) en la promoción de los intercambios internacionales en beneficio de la difusión del vino y su cultura en el mundo.
Finalmente, reflexiona sobre el futuro del vino frente al cambio climático, la sostenibilidad, la incertidumbre económica, el aumento de los costes de la energía y las materias primas, las barreras comerciales, la exigencia de transparencia, el respeto por el medioambiente y el cambio de la percepción de la sociedad respecto al alcohol.
La lección concluye recordando que 2024 será Año Internacional de la Viña y el Vino, y que deben explicarse todas las “originalidades del vino porque después de cien años la historia se repite y el vino, una vez más, tiene una imperiosa necesidad de ser defendido, protegido y mantenido en su integridad”.
Luigi Moio
Luigi Moio es catedrático de Enología de la Universidad de Nápoles y director del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino de la misma universidad. Durante más de 25 años se ha dedicado a los aspectos sensoriales, bioquímicos y tecnológicos del aroma del vino.
Es autor de aproximadamente 250 publicaciones científicas con un índice H de 41 en Google Scholar, 32 en Scopus y 32 en WOS, y ha sido citado más de 4.800 veces en Google Scholar, 2.800 veces en Scopus y 2900 en WOS. Desde 1998 es experto científico del Ministerio de Políticas Agrícolas de Italia.
Desde el 2009 hasta el 2014, fue presidente del Grupo de expertos ‘Tecnología’ de la OIV, y desde el 2015 hasta el 2018 presidió la Comisión Enología de la OIV.
En 2016, publicó el libro Il Respiro del Vino para la editorial Mondadori, un ensayo científico sobre el aroma del vino que ganó numerosos premios. Esta obra se encuentra en su décima edición, con alrededor de 30 000 copias vendidas en Italia. En 2020 se publicó en Francia en idioma francés, bajo el título: Le souffle du vin, a través de la editorial Éditions France Agricole.
En 2001 fundó la bodega Quintodecimo, donde produce vinos de calidad superior con las denominaciones más prestigiosas de la región italiana de Campania.
