El Gobierno de La Rioja ha informado este lunes que la Escuela de Jotas de La Rioja volverá a tener su sede en la antigua Beneficencia, donde se ubica la Consejería de Cultura, para el próximo curso 2023-2024, cuyo periodo de matriculación comienza este lunes y finalizará el 1 de octubre.
Así lo ha indicado el director general de Cultura del Gobierno de La Rioja, Roberto Iturriaga, en una rueda informativa, junto a la presidenta de la Escuela de Jotas de La Rioja, Maite Hernández; y una de las alumnas de este centro, Blanca Fernández.
Iturriaga ha destacado que este retorno tiene como fin conservar y divulgar el folclore riojano a través de la jota, “algo tan nuestro que no podemos permitir que pierda poder ni esa importancia que tiene para La Rioja”.
Así, ha informado de que tratarán de conseguirlo a través de la formación de calidad, con clases gratuitas desde el próximo 4 de octubre, a cargo del jotero, profesor de música y director de la Escuela, Diego Urmeneta.
Además, contará con el apoyo del Gobierno autonómico, dado que el coste total de profesores y músicos será sufragado al 100 por ciento por el Ejecutivo; mientras que la cuota simbólica de 40 euros de los alumnos “se destinará íntegramente al vestuario, al material, a los desplazamientos o a las posibles actuaciones que surjan durante este curso”.
Maite Hernández ha explicado que los dos últimos años de la Escuela han sido “un cabalgar de un lado a otro que han entorpecido la labor”, pero que con la vuelta a “La Bene”, sienten que vuelven a casa “con la misma ilusión y ganas de siempre”.
Ha hecho “especial hincapié” en la juventud, campo en el que trabajan con su alumna más pequeña que tiene cinco años y, pese a que es difícil “porque son muy niños”, es la base “donde todo comienza”.
“Captar esos niños tan pequeños es muy importante porque es ahí cuando empieza el desarrollo de su faceta de vocalización y aprendizaje”, ha indicado, por lo que “queremos que la juventud pruebe, ensaye y deduzca de esta manera si le gusta o no”.
Ha expresado su deseo de contar con nuevos alumnos que “tengan ganas”, dentro de una escuela con un ambiente “estupendo para vivir y con integración entre los mayores y los jóvenes, que somos compatibles sin ningún problema”, ha detallado.
Por su parte, la alumna Blanca Fernández ha insistido en animar a los jóvenes, “desde bien pequeñitos”, a apuntarse a la escuela y aprender la cultura de La Rioja mediante la jota.
“La jota es sentimiento, es emoción, en la que vas descubriendo diferentes tipos, pasacalles, descubres técnicas y vas perfeccionando otras”, ha apuntado Fernández, quien ha vuelto a incidir en probar una actividad “con la que hacer amistades, que sintetiza La Rioja y que es cultura”.
