El Grupo de Investigación de Química Biológica de la Universidad de La Rioja (UR) trabaja en “el desarrollo de una vacuna contra el cáncer con la peculiaridad de que utiliza un compuesto no natural que se está sintetizando en el laboratorio y que da mayor respuesta inmune”.
Así lo ha afirmado este jueves el responsable de este grupo de investigación, Francisco Corzana en una rueda informativa en la que ha participado el vicerrector de Investigación e Internacionalización de la UR, Eduardo Fonseca. También han intervenido el miembro del Grupo de Plasma Atmosférico Frío de la UR Fernando Alba Elías; y el investigador principal del Grupo de Fotoquímica Orgánica de esta universidad, Diego San Pedro.
Fonseca ha destacado que la UR ha superado las 100 solicitudes de patentes desde su creación, de las que 14 son a nivel internacional, a través de la Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación (OTRI).
Un ejemplo de estas patentes es la que desarrolla el grupo de Corzana, quien ha explicado que tiene nivel internacional y cuenta con la participación de la Universidad de Cambridge, en Inglaterra. “Hasta ahora, los resultados que hemos tenido con esta nueva vacuna son muy prometedores”, ya que, “a nivel de ratones, es capaz de reducir el tamaño del tumor y, según los experimentos realizados en los últimos días, uno de los ratones ha sido capaz de curarse”, ha precisado.
Ha señalado otra patente, en este caso, nacional, que desarrolla el diseño de un nuevo sensor para la detección precoz del cáncer de páncreas, que es capaz de “mejorar la sensibilidad y la especificidad con respecto a los compuestos y sistemas que se utilizan hoy en día en la práctica química para la detección”.
Por su parte, Alba Elías se ha referido a distintas patentes con las que trabaja el grupo de investigación del que forma parte, como “un procedimiento para desinfectar las barricas de roble que se utilizan en el vino de crianza”.
Además, este grupo ha desarrollado, con el Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR), una placa de análisis químico que permite la identificación del mejor antibiótico para ciertas infecciones y reduce el tiempo de análisis de 24 a 6 horas, ha precisado.
Otra iniciativa, ha continuado, es el desarrollo de “un nuevo recubrimiento para agujas intramusculares que reduce la fricción, ya que la fricción es dolor y, en ocasiones, es un elemento que reduce la efectividad de los tratamientos”.
Por su parte, el investigador principal del Grupo de Fotoquímica Orgánica ha resaltado que cuentan con dos patentes distintas sobre el diseño y uso de fotoprotectores, dado que llevan años trabajando en una línea que les permite diseñar su propia versión de compuestos fotoprotectores. “Tenemos varios contactos con empresas bastantes interesadas en el desarrollo de nuestros productos”, ha asegurado, y, “fruto de esta línea de investigación, hemos podido presentar la documentación para dos patentes, una de carácter nacional y la otra en colaboración con una multinacional”.
Fonseca ha indicado que una de las labores de la UR es que “ese conocimiento científico que emana de sus investigadores se trasfiera al tejido social y empresarial” y “una forma de hacerlo mejorando el bienestar social y la competitividad de las empresas es a través de las patentes”.
“Dentro de este contexto, hay algunas patentes que ya se han dejado de utilizar y otras que se están desarrollando porque el sistema de la UR está muy interesado en incentivar todo lo que tiene que ver con las patentes”, ha subrayado.
Ha detallado que el personal investigador de la UR ha cursado 101 solicitudes de patentes a través de la OTRI, de las que 87 ya se han resuelto de manera favorable y 14 son de carácter internacional.
