Agricultura

Un riego esperanzador desde el cielo: “Vamos a recuperar parte de la cosecha”

Las precipitaciones de este fin de semana servirán para recuperar parte de los sembrados

FOTO: EFE/ Raquel Manzanares.

Lo del sábado fue un ligero aviso de lo que estaba por llegar. Lluvias repartidas por toda La Rioja, pero a cuanta gotas y que poco cambiaban el escenario de sequía. E irrumpió el domingo y los cielos se encapotaron trayendo consigo una bolsa de agua “que ha dejado una huella importante en el campo”. Los ánimos de los agricultores han amanecido este lunes con júbilo gracias a los litros caídos especialmente durante la tarde en toda la región aunque con mayor incidencia en la mitad oeste de la comunidad.

La media registrada en esta última jornada roza los 13 litros por metro cuadrado, pero en gran parte de estaciones meteorológicas se ha superado esa cifra con el acumulado de 24,4 litros en la de Agoncillo, tomada habitualmente como referencia. Destaca Villar de Torre con sus 26 litros y la capital, que roza la veintena. Les siguen San Vicente de la Sonsierra, superando los 17 litros, por delante de Leiva, Uruñuela y Albelda de Iregua, que también han llenado sus pluviómetros con esos mas de 13 litros.

Ya dice el buen refranero que abril y mayo tienen la llave del campo y pocas veces se equivoca. La cosecha del cereal y leguminosas estaba prácticamente perdida en gran parte de la comunidad, pero este agua ha regado de ilusión y esperanza los sembrados. En Murillo de Río Leza han caído unos 19 litros en todo el fin de semana, aunque los cuatro del sábado se evaporaron por el viento. “Con lo caído hasta ahora vamos a recuperar parte de la cosecha que se daba por perdida, asegurando, tal vez, más de la mitad”, sentencia José Luis Pisón, agricultor del municipio.

“Estamos muy contentos porque ha sido ver los trigos y guisantes que hace una semana daban pena y llevarnos una alegría de lo que han recuperado gracias a este agua. Parece mentira el cambio que han dado, pero incluso me da la sensación que los guisantes han crecido durante esta noche porque se han puesto con un vigor importante. Eso sí, no se pueden descuidar porque estos 15 litros con la sequía que arrastramos no es suficiente, así que tienen que volver a llover para salvar, al menos, lo que está a tiempo. Hay cebadas tardías que ya se han quedado duras y no hay nada que hacer con ellas, pero en el caso de los guisantes y los trigos veo que pueden remontar porque están en tierras sueltas y más frescas”, apunta.

En Hormilla el cielo también ha regado bien los campos con otros 15 litros contabilizados según Pedro Mari, agricultor de la zona. Un agua que ha permitido dar una semana más de vida al cereal. “Lo que hace falta ahora es que llueva más y en abundancia porque los sembrados tienen poco margen de mejora. Si llueve se podrá coger el 50 por ciento de la cosecha, pero si no nos podríamos quedar en el 30”. En su caso no riega el cereal aunque en este término municipal y demás municipios de La Rioja Alta está ya generalizado estos riegos para intentar salvar parte de la producción de grano.

El calor que se avecina para esta semana, sin embargo, no va a mantener esa tierra cargada de humedad por mucho tiempo. La máximas van a superar los 30 grados y solo comenzarán a descender entrado el fin de semana, cuando también se esperan nuevas precipitaciones. “Algunos modelos predictivos hablan de 36 litros, pero aunque se quedasen finalmente en la mitad también serían suficientes para mantener el campo”, apunta Pisón.

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