Cocina Económica de Logroño y el Banco de Alimentos de La Rioja han visto incrementados en un 10 por ciento los convenios anuales que mantienen con el Gobierno riojano, de tal forma que la primera entidad recibe 44.000 euros y la segunda 33.000, por “la necesidad de proteger a los colectivos más vulnerables”.
Así lo ha afirmado este lunes el consejero de Servicios Sociales, Pablo Rubio, en una rueda informativa posterior a la firma de ambos convenios con los presidentes de la Cocina Económica de Logroño, Emilio Carreras; y del Banco de Alimentos de La Rioja, José Manuel Pascual-Salcedo.
Rubio ha indicado que este incremento de las cuantías económicas está recogido en los Presupuestos de La Rioja de 2023, que cuentan con una partida de 275.000 euros para las entidades sin ánimo de lucro, frente a los 250.000 de 2022.
El convenio firmado con la Cocina Económica contribuirá a financiar el programa de atención integral para personas y familias en situación de riesgo de exclusión y sin hogar hasta el 31 de diciembre de este año, dirigido a adultos de 18 a 60 años y a familias en riesgo de exclusión y sin hogar, ha explicado.
Ha indicado que “las personas usuarias de este programa participarán en distintas intervenciones, incluidos tratamientos individuales, y para los grupos familiares a través de actuaciones de carácter socioeducativo, psicológico y de habilidades personales, así como de atención de carácter asistencial a las necesidades básicas”.
Por otra parte, ha precisado que el convenio con el Banco de Alimentos de La Rioja financiará dos programas: el de atención a las necesidades alimentarias y el de aprovechamiento de recursos alimentarios y reducción de las pérdidas y desperdicios.
El objetivo del primero de ellos, ha explicado, es que el reparto de alimentos se ajuste a las necesidades alimentarias de las familias necesitadas; mientras que en el programa de aprovechamiento de recursos alimentarios se difunden estrategias y buenas prácticas que contribuyan a la progresiva reducción de pérdidas y desperdicios.
El consejero ha añadido que en 2024 se prevé, “quizá, la modificación de las ayudas de alimentos porque la Unión Europea (UE) cambia su normativa y se tendrá que hacer un esfuerzo de adaptación de algo que es fundamental: garantizar a las personas su derecho a la alimentación y cubrir sus necesidades básicas”.
En su intervención, Carreras ha agradecido la colaboración del Gobierno regional para “financiar este programa desarrollado por la entidad y que permite atender en la actualidad a cinco personas y a una familia”.
Pascual-Salcedo ha asegurado que “este convenio es fundamental porque el pequeño incremento que ha habido es para comprar alimentos y complementar las donaciones que recibe el Banco de Alimentos”.
