Nacida en Bilbao hace 53 años y logroñesa de adopción desde hace 15, Amaya Castro trabajó como Integradora Social en Cruz Roja, en el Centro de Acogida de Refugiados. Ha militado en Podemos desde sus inicios en La Rioja y hoy en día ejerce como concejala en el Ayuntamiento de Logroño. «Han sido años de mucho trabajo, pero ahora podemos ver los resultados de todo ese esfuerzo».
– A nivel personal, ¿ha sufrido situaciones de desigualdad?
– Sí, como todas las mujeres. Es una desigualdad estructural, que se produce, directa o indirectamente, por el mero hecho de ser mujeres, y está presente cada día desde que nacemos.
Hace tiempo, no me daba cuenta. Situaciones de hace años que no me gustaban y que me condicionaron fuertemente, especialmente en mi juventud, pensaba que eran cosas mías y no se me pasaba por la cabeza eso de “las desigualdades de género”. Empecé a reconocer estas situaciones de desigualdad al verlas en otras mujeres y mirar más despacio alrededor mío. A veces es difícil detectar cómo nos afecta, y también reconocer que lo vivimos en primera persona.
A día de hoy, personalmente, percibo claramente las expectativas que me marcan los estereotipos y roles de género. Las mujeres necesitamos hacer sobreesfuerzos para ser tenidas en cuenta y frecuentemente demostrar el doble para ser reconocidas al mismo nivel que los hombres, tanto en el mundo laboral, como en mi caso, en la política. En el Ayuntamiento de Logroño, soy la única mujer portavoz de todos los grupos municipales y a veces, también tengo que hacer grandes esfuerzos para ser escuchada.
En todo caso, pienso que tengo una situación muy favorable en relación a otras mujeres que sufren múltiples discriminaciones: por su situación socioeconómica, su situación familiar, por su edad, por su identidad u orientación sexual, racializadas, etc.
– ¿Cuál es el principal problema actual para las mujeres en Logroño?
– El principal problema es que las mujeres no disfrutan de manera efectiva de igualdad de oportunidades con las que desarrollarse de manera plena, libres de violencia y de prejuicios por el género. Y esto se expresa con problemas muy concretos.
En la vida cotidiana, las mujeres siguen cargando con la mayor parte del trabajo doméstico y de cuidados. La corresponsabilidad entre los hombres y las mujeres está muy lejos de alcanzar. Por otro lado, las mujeres sufren más pobreza, y en el mercado laboral, si bien ocupan posiciones que se han demostrado, sufren más precariedad y reciben menos salario por un mismo trabajo. Es decir, las mujeres tienen los bolsillos más vacíos que los hombres, pero las mochilas más llenas de peso y responsabilidades que no se les reconoce.
Por otro lado, la violencia machista. Abusos y agresiones físicas, sexuales y psicológicas a niñas y mujeres, y la utilización de la violencia por parte de los agresores a través de lo más querido (familia, mascotas…) y en los peores casos, los asesinatos machistas.
Y muy importante, la situación de niñas y jóvenes, marcadas por estereotipos y roles de género reproducidos desde la comunicación diaria hasta las redes sociales, que impactan fuertemente en su vida, perjudicando la convivencia con los varones, sufriendo de manera temprana comportamientos y violencia machista.
– ¿Qué mecanismos tiene el ayuntamiento para solucionarlos?
– El Ayuntamiento cuenta con mecanismos que hacen hincapié en la prevención de las violencias machistas y de la eliminación de los estereotipos y roles de género.
Referente a las violencias machistas, contamos con un servicios de atención a mujeres víctimas de malos tratos y/o agresión sexual durante 24 horas. En momentos concretos, como las fiestas de la ciudad, se instalan Puntos Violeta contra las agresiones sexistas. Existe una coordinación en el ayuntamiento para atender casos de violencia machista y para prestar atención a la violencia vicaria, tales como la prevención en los centros juveniles o el programa Viopet.
Por otro lado, existen programas y eventos de formación y sensibilización en materia de igualdad durante todo el año dedicados a diferentes públicos, desde la plantilla del Ayuntamiento, las familias y niños, niñas y jóvenes hasta los medios de comunicación. También iniciativas para luchar contra los roles y estereotipos de género, dar visibilidad a las mujeres y mostrar referentes femeninos, como “Mujeres de cine” o “La vida de las luciérnagas” .
También, espacios para la participación y el empoderamiento de las mujeres, así como para el fomento de la corresponsabilidad y el apoyo mutuo. La consolidación de espacios como el Laboratorio feminista, Una habitación propia o Logroño comunitario; o iniciativas como “Logroño con otra mirada”, para conocer las contribuciones de las mujeres o la iniciativa Logroño Igual Participa.
Por último, hay actuaciones muy concretas de apoyo a la corresponsabilidad y a las dificultades de las familias, tales como refuerzo del cuidado de los y las pequeñas y ayudas a familias monoparentales.
– ¿Cuáles han sido las principales políticas puestas en marcha en este sentido desde 2019?
– Desde el Ayuntamiento de Logroño, al comienzo de la legislatura creamos la concejalía de Igualdad, que no existía. A partir de entonces, las políticas del Ayuntamiento han incluido un enfoque transversal en materia de igualdad, con presupuesto propio. Desde esta Concejalía, se han llevado a cabo numerosas campañas y proyectos para la prevención de la violencia machista, así como para la educación y sensibilización.
En este mismo mes marzo hemos aprobado por unanimidad el II Plan Estratégico de Igualdad de la ciudad para el periodo de 2022 a 2025 y que será nuestra hoja de ruta de las políticas públicas en materia de igualdad. Recoge objetivos y actuaciones concretas en 4 ejes: la transversalización de la perspectiva de género; la participación sociopolítica; el cuidado, corresponsabilidad y conciliación y la violencia contra las mujeres.
Asimismo, desde el gobierno de España, consideramos fundamentales las políticas puestas en marcha, no sólo desde el Ministerio de Igualdad, que desde luego, sino también otras políticas realizadas desde el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 o el Ministerio de Trabajo. La reforma laboral y el aumento del SMI han repercutido directamente en la vida de muchas mujeres. En La Rioja, de los 21.000 trabajadores que han visto aumentado su salario, más de 15.000 son mujeres.
Defendemos todos los ámbitos y trabajamos con la firme convicción de lograr un país y una ciudad feminista.
– ¿Cómo es una ciudad feminista y con perspectiva de género?
– Una ciudad feminista pone la vida y las necesidades de todas las persona en el centro de las decisiones de la ciudad y contempla la perspectiva de género, pero también la edad, la diversidad funcional, la situación socioeconómica, el lugar donde vives, etc. Fomenta espacios que hablan de cuidados, de lo comunitario, de lo público. Espacios de socialización, de corresponsabilidad y ayuda mutua.
Impregna de lleno al urbanismo y la movilidad. Trata de asegurar a las mujeres y a todas las personas la autonomía, la accesibilidad y la seguridad, cuidando en este último caso de que no existan puntos inseguros, y también, de hacer realidad una ciudad cercana, donde tengamos a pie o en transporte público, servicios educativos, sanitarios, comercios, etc.
Asimismo, una ciudad feminista es una ciudad saludable, que prioriza nuestra salud y calidad de vida, cuidando de la calidad del aire, de la naturaleza y que permita disfrutar de parques y espacios naturales. Y es representativa, con la participación de todas y todos en en los barrios, así como con la expresión en las calles también de la historia de la mujeres y sus contribuciones. En resumen, una ciudad amable, justa y sostenible.
– ¿Por qué debemos seguir celebrando el 8-M?
– Es importante seguir celebrando el 8M, en primer lugar, por el reconocimiento a la trayectoria de los movimientos feminista y de tantas mujeres a las que les debemos los derechos alcanzados hasta la fecha.
En segundo lugar, porque aún nos queda mucho por lograr para alcanzar la igualdad efectiva de derechos de las mujeres. Además, me preocupan especialmente los discursos e intenciones de derecha reaccionaria que amenazan con borrar de un plumazo mecanismos y políticas frente a la desigualdad de género. Tenemos que celebrar el 8M porque tiene que quedar claro que no estamos dispuesta a retroceder, ni a permitir un paso atrás.
El futuro justo y sostenible, sin políticas feministas y sin igualdad efectiva entre hombres y mujeres seguirá estando fuera de nuestro alcance. El 8M reivindicamos: Todas las mujeres, con sus derechos, YA.
Sigue el canal de WhatsApp de NueveCuatroUno y recibe las noticias más importantes de La Rioja.