El fiscal ha reducido la petición de cárcel de 10 años a 3 años y un mes a solo uno de los acusados de los disturbios ocurridos en Logroño el 31 de octubre de 2020, y mantiene peticiones de penas de entre 5 y 15 años y medio para los otros siete procesados y pide una indemnización de 1.000 euros por daño moral para la dueña de la tienda asaltada.
La Audiencia Provincial de Logroño ha celebrado este viernes la quinta y última jornada del juicio contra ocho jóvenes, encausados como presuntos autores de delitos de desórdenes públicos, atentado a agentes, daños y robo con fuerza, en los altercados producidos tras una concentración no comunicada convocada para protestar por las restricciones decretadas en la hostelería debido a la covid-19.
Las otras cuatro acusaciones (Gobierno de La Rioja, Ayuntamiento de Logroño, Consorcio de Compensación de Seguros y AXA) se han sumado a las peticiones de penas presentadas por la Fiscalía en su informe de conclusiones y han reclamado el pago conjunto entre todos de los daños producidos en mobiliario urbano y los paneles de una exposición fotográfica y de los implicados en los daños en vehículos policiales y en la tienda saqueada, e indemnizar a los agentes lesionados.
Por su parte, algunos abogados de las defensas han pedido penas de entre 3 y 18 meses para los acusados y otros han insistido en reclamar la absolución para sus defendidos.
El fiscal ha justificado la rebaja de petición de pena para uno de los acusados en que concurre la circunstancia atenuante de anomalía por alteración psíquica y ha introducido la compensación económica para la dueña de la tienda como una cantidad “prudente y simbólica” por el “impacto moral” que le causó el saqueo de su comercio.
Respecto al principal acusado, a quien pide 15 años y medios de cárcel, ha recalcado que “no fue el organizador único ni el convocante” de los disturbios, “pero sí fue participante activo”, ya que ha asegurado que “se colocó en el escenario como una pieza muy destacada”, al “arengar” al resto de personas.
Ha considerado que estos disturbios “rompieron la paz pública de manera contundente” y provocaron “tristeza” entre la ciudadanía, pero el orden público se mantuvo en Logroño gracias a que la Policía actuó con “ejemplaridad, rapidez y prudencia”.
El representante del Ministerio Público ha constatado la validez d las grabaciones realizadas en la vía pública durante los altercados, en cuyas imágenes se reconocieron algunos de los acusados, mientras que a otros les situaron en lugar de los hechos los agentes que declararon.
En cuanto a las defensas, el letrado del principal acusado ha dicho que solo asume la autoría de los daños, pero no el resto de delitos, por los que el fiscal pide una pena de 15 años y medio de prisión, “una petición absolutamente desproporcionada”.
Ha lamentado la “inquina” que hay hacia sobre su cliente, a quien “nadie vio lanzar objetos o agredir a los policías, solo movió un contenedor” y, después, tras consumir drogas a las que es adicto, “la rabia le hizo unirse a la manada” y participar en el asalto a la tienda, donde solo rompió el cristal y no se llevó nada.
La elevada petición de pena, que a su juicio es “una barbaridad”, “parece diseñada para dar un correctivo que no merece”, ha recalcado, ya que se le ha acusado de ser el instigador del resto; y ha criticado que “por la negligencia de la Policía no hay más personas en el banquillo”.
El abogado de la única acusada, camarera de profesión, ha pedido que solo se le condene a 18 meses de cárcel por desórdenes públicos, en vez de la pena de 10 años que pide el fiscal, y ha lamentado que la situasen “en el lugar equivocado en el día equivocado”.
El letrado de un chico que reconoció llevarse una riñonera de la tienda saqueada ha demandado una pena de un año de cárcel por robo con fuerza, en vez de los 12 años que pedía el Ministerio Público, ya que sostiene que no participó en los altercados ni causó daños en el mobiliario o los vehículos policiales.
La abogada del chico a quien el fiscal ha rebajado la pena de 10 años a tres años y un mes ha solicitado solo tres meses por hurto por llevarse unas zapatillas de un maniquí que habían sacado de la tienda y que se estime su enfermedad mental.
En el caso de otro chico, a quien pedían 12 años de cárcel, su letrado ha sugerido que la pena se reduzca a 6 meses por un delito de atentado, ya que solo tiró una piedra a un furgón policial, y se estime la atenuante de drogadicción. Los abogados de otros dos -a quienes pedía 8 y 5 años, respectivamente- han pedido su absolución por entender que no están identificados en el lugar de los hechos.
Por último, a otro de los chicos que según su abogado solo se llevó de una papelera unos pantalones que después fueron incautados por la Policía ha pedido que se le absuelva o pague los 110 euros que costaban, en vez de los 5 años de condena. Después de que tres de los ocho acusados utilizaran el turno de última palabra, el juicio ha quedado visto para sentencia.
