La Consejería de Salud ha publicado este lunes la nueva actualización de la evolución epidemiológica en La Rioja, según la cual se ha registrado una muerte por COVID-19 durante el fin de semana: la de una muker de edad avanzada que no vivía en residencias. Así, desde el inicio de la crisis sanitaria han muerto 820 personas en la región, 324 de ellas en centros de personas mayores.
La curva de casos activos sigue en caída en La Rioja. La región cuenta con 435 casos por coronavirus (31 menos que ayer). Además, en estos momentos guardan cuarentena en la región 9.654 personas.
En cuanto a la incidencia acumulada, el dato aportado por Salud es de 213 casos por cada cien mil habitantes. Tomando como referencia la última semana, la incidencia acumulada es de 74 casos por cada cien mil habitantes.
Los datos de presión asistencial de esta jornada se sitúan en las 27 personas afectadas por COVID-19 en los hospitales riojanos, cuatro menos que las registradas el viernes. De ellas, 15 se encuentran en planta en el Hospital San Pedro (cuatro menos que el viernes), seis en la UCI (las mismas) y seis en la Fundación Hospital de Calahorra, las mismas que el viernes.
Respecto a la situación de la UCI, esta se sitúa al 46,51 por ciento de ocupación en su conjunto y al 13,95 por ciento en cuanto a pacientes COVID.
Así las cosas, los dos factores asistenciales que se tienen en cuenta en el ‘semáforo’ de la desescalada son los siguientes: un 13,95 por ciento de ocupación en la UCI y un 2,74 por ciento de ocupación en planta.
En cuanto a la situación en las residencias de ancianos, Salud mantiene este lunes la ausencia de contagios en los 33 centros de la comunidad.
