La Rioja

‘La Laurel’ imprime su propia moneda para ‘congresistas’: el bono pincho

El ‘bono pincho’ ha llegado para quedarse. Ya existía, pero ahora cuenta con una nueva versión “mejorada” (no se puede copiar) en la que tiene nueva tinta, fecha de caducidad… gracias al patrocinio de Bodegas Franco Españolas y Marqués de Vargas. Está destinado a organizadores de congresos y turoperadores.

“A la hora de llevar a comer a los ponentes, no hay restaurantes tan grandes en el centro y los organizadores no se quieren complicar la vida”, comenta Adolfo Sáenz, presidente de la Asociación de Hosteleros de la Zona de Laurel. Por ello, ofrecen la posibilidad de dar este ‘billete’ en el paquete de bienvenida que se da a los ponentes e integrantes de un determinado congreso para que algún día hagan la comida o la cena en la zona de la Laurel.

“Mandan a la gente, prepago del Congreso, para que nadie se complique con el dinero y sólo tengan que preocuparse de elegir un pincho y un vino. Es muy cómodo y bonito porque así entran directamente en nuestra cultura del vino y la gastronomía”, añade el presidente de la calle más famosa de La Rioja.

“Llama la atención nuestra oferta gastronómica, que es brutal, y que tenemos la carta más grande de vinos de Rioja del mundo entre los setenta establecimientos”, cuenta Sáenz, para poner el acento en que también le resulta curioso al turista la mezcla de edades en el centro de Logroño: “Se mezclan a las mismas horas y en el mismo lugar los abuelos, los hijos y los nietos. Todos convivimos tomándonos un vino y bebiendo en la calle”.

El año pasado se vendieron cerca de 7.000 bonos y el objetivo es claro: superar esa cifra año a año, centrándose sobre todo en el mercado asiático: “Es un cliente que puede encajar muy bien en la Laurel porque no da guerra, le gusta probar cosas nuevas y es una franja de turismo que queremos captar.

Medio millón de turistas chinos

La Asociación de Hosteleros de la Zona de Laurel ha aterrizado en la Feria Internacional de Turismo (FITUR), que se celebra en Madrid del 23 al 27 de enero, con un claro y ambicioso objetivo: atraer a medio millón de turistas chinos. Según los últimos datos facilitados por la Asociación de Turismo España-China (ATEC), un total de 718.000 turistas chinos visitaron España en el año 2017 y La Laurel quiere captar su atención.

Una de las acciones emprendidas por la Asociación para alcanzar esta meta ha sido asistir a FITUR, donde ya ha podido establecer los primeros contactos con representantes de los más de mil touroperadores y Organizadores Profesionales de Congresos (OPC) que asisten a la feria en la capital española. Trabajo que seguirá realizando durante toda la feria y también una vez que finalice esta.

“Se han mostrado muy receptivos. Algunos, incluso, ya han mostrado su interés por incluir a Logroño y La Rioja en sus rutas turísticas por España”, ha asegurado Adolfo Saenz, presidente de la Asociación. “Otros se han quedado muy gratamente sorprendido al conocer las conexiones e infraestructuras de las que dispone Logroño y ya lo ven como una opción para organizar eventos y congresos“, ha añadido.

A todos ellos, touroperadores y OPC, ha ido dirigida la charla ofrecida hoy por Saenz en el stand de Rioja Turismo. El presidente de la entidad ha protagonizado una amena y breve intervención de 20 minutos en la que ha presentado los bonopinchos de La Laurel. Tal y como ha explicado, se trata de “bonos prepago que solo pueden ser adquiridos por empresas y organizaciones para ser repartidos entre sus clientes o asistentes y que estos puedan canjearlos en La Laurel por un pincho y una consumición”.

Tras la intervención, los asistentes han podido probar algunos de los manjares que se sirven en La Laurel, aunque Saenz ha recordado que “para disfrutar de esta Zona de Interés Turístico Regional al 100% hay que visitarla”. Sin embargo, ha agregado, el encuentro tras la charla ha servido para demostrar que La Laurel también es un entorno ideal para hacer negocios, cerrar acuerdos o desarrollar oportunidades de negocio. “El netwoorking con el tapeo, funciona. Y eso es un valor añadido”, ha concluido.

Subir