A lo largo de estos últimos días NueveCuatroUno ha relatado cómo el Ayuntamiento de Villamediana empleó de forma recurrente la tramitación sin publicidad y por la vía de urgencia para contratar a Esteban Pardo como asesor urbanístico durante una década y los intereses mercantiles comunes de este con los redactores del Plan General Municipal (PGM).
Hasta el año 2014, con el PGM ya aprobado, los roles estaban definidos con nitidez en el área urbanística villametrense: Roberto García-Berlanga era el encargado de redactar los proyectos y Esteban Pardo era quien emitía los informes de supervisión. Sin embargo, los papeles se intercambiaron en dos iniciativas posteriores que alcanzaron un montante conjunto de tres millones de euros para las arcas del Ayuntamiento.
En marzo de 2014 el Ayuntamiento adjudicó a Play Arquitectura -estudio del que Esteban Pardo es administrador único- la redacción del proyecto de ejecución de la biblioteca municipal, con un presupuesto de 744.651, 29 euros. En el acta del pleno del 12 de junio de ese mismo año, en el que se aprueba el proyecto de obra, se señala que el mismo “dispone de Informe favorable de Supervisión emitido por el Arquitecto D. Roberto García-Berlanga”.
Ese reparto de tareas se repitió de forma idéntica dos años después, en 2016, en relación al proyecto y obra de la remodelación de las piscinas municipales, con un presupuesto de 2.188.432,46 euros. De nuevo Play Arquitectura es el estudio encargado de su redacción y otra vez Roberto García-Berlanga firma el informe favorable de supervisión.
En este caso existen, además, dos circunstancias especialmente llamativas. En primer lugar, que Pardo ostentaba en ese momento el cargo de arquitecto asesor en materia de urbanismo (a razón de 24.400 euros anuales) y entre sus obligaciones se encontraban las de “redactar, dirigir, informar y dictaminar proyectos y memorias de obras municipales”, según recoge el expediente de contratación. Pese a ello, el Consistorio le abona 48.000 euros en concepto de la redacción del proyecto básico (12.000) y el de ejecución (otros 36.000) de la rehabilitación de las piscinas.
Por otro lado, a pesar del montante de la operación (2,2 millones de euros) el Ayuntamiento solo tiene en consideración la propuesta de Play Arquitectura, algo que fue objeto de disconformidad en el resto de fuerzas políticas. Sin ir más lejos, en el pleno del 15 de marzo la por entonces portavoz de la oposición (hoy, alcaldesa) Ana Belén Martínez consideró que “la inversión que ahora se propone es lo suficientemente importante como para haber tenido al menos tres proyectos sobre la mesa y no solo el de Play Arquitectura”.
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“Es quien mejor conoce el asunto”
El acta de la sesión recoge que la actual alcaldesa “dice que no está de acuerdo con el procedimiento llevado a cabo y que si la oferta que ahora se propone es la más ventajosa, según dice la Resolución de Alcaldía, pregunta cómo y quién ha hecho esa valoración, cuando solo se cuenta con un proyecto”.
“Responde el señor alcalde (por entonces, el popular Rubén Gutiérrez) que se le encargó el proyecto al Sr. Arquitecto Asesor del Ayuntamiento (Esteban Pardo) porque es quien mejor conoce la problemática de las piscinas por el seguimiento que casi a diario ha hecho a lo largo de estos últimos años”, añade el acta del pleno.
