La SD Logroñés ha caído ante el Celta Fortuna (4-0) y se queda ya a un solo paso de un descenso a Segunda Federación. Con 28 puntos y después de haber jugado sus rivales, los blanquirrojos se sitúan a diez de la salvación cuando les faltan doce por jugar. Por lo tanto, descenderán matemáticamente si pierden ante el Fuenlabrada el próximo sábado (Las Gaunas, 20:00 horas), independientemente de lo que hagan sus rivales.
Con las bajas de Ezkurdia y Manny por lesión, más Jaráiz por decisión técnica; Larrazabal ha dejado también a hombres como Jordi Escobar, Dani Garrido y el guardameta Oriol Martí en el banquillo. Así, Iru ha defendido los palos, mientras que Gexan, Trespalacios, Murua y Paredes se han situado en defensa. Trivote central, con Salado, Castellano y Damià y arriba, otro trío, con Óscar Fernández, Ferni y Luzzi en punta de ataque. Un 4-3-3 en Balaídos, en la búsqueda desesperada de un triunfo que mantuviera el último hilo de esperanza hacia una salvación que se antoja prácticamente imposible.
La Sociedad ha saltado valiente, pero no ha podido resistir el intercambio de golpes. Óscar Fernández ha perdonado el 0-1 con un remate de puntera dentro del área y después, se le ha venido encima la tormenta. A la media hora, un Raúl Blanco libre de marca le ha dado un pase a la red. Error general de una frágil defensa a la que le han ganado la espalda. Y no se ha hecho esperar el 2-0, pues el portero Iru ha cometido penalti sobre Alfon. El propio Alfon se ha transformado de mandar el balón a la red, sentenciando prácticamente el choque en el minuto 42. 2-0 al descanso, con al menos otras dos ocasiones claras para el conjunto más anotador de la liga.
Por si quedaban dudas, Raúl Blanco ha hecho su doblete en el 61 y el 3-0 en el encuentro. Minutos más tarde, Javi Rodríguez ha marcado el cuarto. Otro duro castigo para un equipo con la soga al cuello, a punto de recibir ya el hachazo en forma de descenso. Después de nueve partidos sin ganar, solo veintidós goles a favor y un balance de un triunfo de diecisiete para Aitor Larrazabal como técnico, no es algo que sorprenda a nadie.
