El concejal de Interior de Logroño, Francisco Iglesias, en declaraciones a EFE, ha hecho este martes un llamamiento a la ciudadanía para que se aleje de la ribera del Ebro y de zonas de pesca habitual y esparcimiento canino como medidas de precaución ante posibles crecidas del río, aunque se mantiene la zona controlada.
También ha hecho un llamamiento a la tranquilidad porque el pico de la crecida se prevé durante la tarde de este martes y a primera hora de este miércoles, para lo que el Ayuntamiento ha extremado sus dispositivos de emergencia y mantiene un seguimiento de la situación con la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y Protección Civil.
Sin embargo, ha incidido en el llamamiento del Ayuntamiento a las personas que caminan por la cercanía del Ebro a que intenten alejarse de las zonas de la ribera habituales y transiten por las áreas altas de los paseos.
EFE/Raquel Manzanares
Los Servicios de Protección Civil del Ayuntamiento, Bomberos y Policía Local mantienen en todo momento controladas las zonas más susceptibles de anegarse y la recomendación a la ciudadanía es que si las ven acotadas, intenten alejarse y no traspasar las líneas, ha precisado.
Preparados para lo que pueda ocurrir
“A partir de ahí, que discurra la naturaleza, pero nuestros servicios de emergencia están preparados para lo que pueda ocurrir”, ha incidido Iglesias, con cuyo mensaje también ha coincidido este martes el portavoz del Gobierno de La Rioja, Alfonso Domínguez, de que los dispositivos de emergencia están activados, ha dicho en una rueda informativa.
La información de que dispone el Ayuntamiento de Logroño es que a lo largo de la jornada el caudal del Ebro a su paso por la ciudad pueda a oscilar entre los 1.000 y 1.200 metros cúbicos por segundo (m3/s) y una altura estimada de 4,5 metros, ha informado el edil de Interior.
Estos datos contrastan con los 295 m3/s y una altura de 1,86 registrados a las 11:30 horas del pasado lunes, en una situación normal sin avenida, ha precisado.
EFE/Raquel Manzanares
La avenida más alta de caudal está prevista a Logroño para las primeras horas del próximo miércoles, con la llegada de los desembalses de cabecera del Ebro y que, en función de las circunstancias, podría situarse entre los 1.500 y 1.600 m3/s y superar una altura de los 5 metros en Logroño.
En principio, ha indicado, no se prevé una avenida extraordinaria, sino normal por las lluvias registradas, aunque todo dependerá de los desembalses de cabecera, que en esta época del año superan el 80 por ciento, y que se sitúan en la zona de Burgos y Álva, además del de Mansilla, en La Rioja, que ya ha comenzado a desembalsarse.
No pasar por las zonas inundables
Con los caudales existentes, en Logroño, de momento, solo hay filtraciones por las características del terreno en zonas próximas al Ebro, como el polideportivo Adarraga, el cámping de La Playa, instalaciones de la Hípica Deportivo Militar, el restaurante El Rincón de Julio y en garajes de la urbanización Ciudad de Santiago, ha detallado.
Lo mismo ocurre en las inmediaciones de los parques del Ebro y del Iregua, donde hay zonas inundables y la recomendación al caminante es no pasar por ellas y si se ve que hay peligro, se prohibirá el acceso, ha recalcado.
Respecto a posibles daños por avenidas del Ebro, ha indicado que el tramo de Logroño está bastante encauzado y no se prevén destrozos por aumento del caudal, aunque los sotos del Ebro se inundarán por completo, pero sin afecciones agrarias.
En la zona de la carretera del barrio del Cortijo se puede producir alguna inundación, pero es una zona en la que hay altura respecto al río no se prevén incidentes
