El Ayuntamiento de Arnedillo ha decidido intervenir en las pozas del municipio con el fin de evitar el acceso “descontrolado” a las mismas. El primer paso está dado. En la reunión mantenida este miércoles entre los vecinos de la localidad y el Consistorio ha habido unanimidad. Además, el plazo de alegaciones ante la solicitud a la Confederación Hidrográfica del Ebro para vallar la zona ha concluido sin haberse presentado ninguna.
Los vecinos, que acudieron este miércoles para conocer los detalles del proyecto, se mostraron de acuerdo con el mismo después de que se les informase de los pasos que se van a ir dando. “En mi vida había visto el salón de plenos así de lleno y, tras la reunión, el cien por cien de los vecinos nos ha dado la enhorabuena”, ha explicado el alcalde del municipio, Pedro Montalvo.
Se trata de un proyecto a futuro. “No sabemos si a uno, dos o tres años. Todo depende de la financiación que podamos conseguir y hasta dónde podamos llegar”. La idea no es privatizar las pozas sino “regular su acceso a través de la entrada de las piscinas municipales”, explica. Para ello habrá que vallar la zona. “Será un vallado que tenga muy en cuenta el impacto medioambiental y visual porque todos sabemos que las pozas son el mejor recurso turístico de la localidad y tanto consistorio como vecinos queremos mimarlo al máximo”.
El futuro proyecto también pretende ajardinar algunas de las zonas del entorno. “Poner unos bancos, en definitiva, mejorar las instalaciones para que toda la gente que venga pueda disfrutar al máximo de ellas”. La idea es realizar la inversión a través de fondos europeos. “Queremos ser ambiciosos porque sabemos que es mucha la gente que llega al municipio y pernocta en él para disfrutar de ellas”.
Problemas de residuos, de robos continuos de móviles y mochilas, botellones y destrozos han sido lo que han provocado que se recurra a esta intervención para controlar el acceso. “Lo que no puede es llegar alguien a disfrutarlas y encontrárselas de cualquier manera porque la noche anterior ha habido cuatro haciendo el gamberro”.
Así, con la intención de que llegue un “turismo de calidad” se va a trabajar en los próximos meses en un proyecto que “incluya las sugerencias de los vecinos para mejorar las pozas y el entorno de las mismas”.
