El Gobierno de La Rioja e Iberdrola han suscrito este miércoles un convenio por un año de duración dotado con un total de 276.421 euros, financiados al 50 por ciento por cada entidad, para evitar la muerte de aves provocadas por líneas de alta tensión como consecuencia de su electrocución o colisión.
Así lo ha afirmado el director general de Medio Natural y Paisaje, Ignacio Sáenz de Urturi, en una rueda informativa, en la que también ha participado el delegado de Iberdrola en La Rioja, Carlos Sobrino.
Sáenz de Urturi ha precisado que este convenio, que se suscribe de manera anual desde hace 25 años, tiene por objetivo “la modificación de aquellos puntos de líneas eléctricas de alta tensión en los que se produce una alta mortandad de aves o que están situados en espacios protegidos, como la Red Natura 2.000 y similares”.
Ha explicado que “las mayores causas de mortalidad de la avifauna respecto a las líneas de alta tensión son la electrocución y la colisión, de ahí la necesidad de este acuerdo, vigente desde 1998, para trabajar con Iberdrola en corregir y modificar esos tendidos”.
El importe del convenio que corresponde al Gobierno de La Rioja es financiado en su totalidad a través de fondos europeos repartidos mediante la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente, que aportó la misma cantidad para este fin en 2022, ha detallado.
“Esperamos que mediante la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente nos den otra partida para años sucesivos”, ha indicado este director general, quien ha añadido que los técnicos del Gobierno riojano, en colaboración con los de Iberdrola y agentes forestales, han realizado “una catalogación de los puntos en los que es más necesario actuar”.
Ha destacado que las actuaciones para evitar la electrocución de aves se basan en colocar aisladores, mientras que para evitar la colisión se coloca una señalización con “salvapájaros” en los lugares que lo requieran por su situación.
Sáenz de Urturi ha indicado que este acuerdo contempla la actuación sobre siete líneas aéreas: la que discurre por el Valle del Cidacos; tres tramos de la línea Logroño-Anguiano; la línea de doble circuito Haro-Nájera; la línea entre Arnedo y Quel; y, por último, la línea en el entorno de las Viniegras.
“En total, en el marco del convenio, este 2023 se han reformado 82 apoyos y 13 kilómetros de línea para reducir el riesgo de electrocución, y se han balizado 1,6 kilómetros de línea para evitar colisiones”, ha resaltado.
Por su parte, Sobrino ha señalado que, “de forma aproximada, en el 80 por ciento de los apoyos que se encuentran en zona de especial protección de aves las cepas están ya adaptadas”, y ha apuntado que la intención es “finalizar el 100 % de los apoyos en 2025 o, como máximo, en 2026”.
Ha indicado que, en los 25 años de duración de este convenio, se ha actuado en 144 tendidos eléctricos para la corrección de 1.586 apoyos y la señalización 583 vanos a fin de evitar la muerte por colisión, y, entre ambas labores, se ha trabajado en más de 375 kilómetros de líneas eléctricas.
