Aresol Renovables comenzará en los próximos meses la construcción de nueve parques fotovoltaicos en La Rioja Alta con una inversión de unos 320 millones de euros. Estos generarán alrededor de un tercio de la energía que se consume en La Rioja y supondrá la disminución de emisiones CO2 de 220.000 al año (similar a la plantación de siete millones de árboles).
El CEO de Aresol, Alberto Romero, ha explicado que la idea es que estén operativos a mediados de 2025. En una rueda de prensa celebrada este martes para dar a conocer los pormenores del proyecto, la firma riojana ha confirmado que los parques se ubicarán entre Bañares, Hervías y Cidamón.
Los primeros trámites se iniciaron a principios del año 2020 y actualmente ya cuenta con todos los permisos del Gobierno de La Rioja, así como las licencias de obra de todos los ayuntamientos implicado. Por ello, el montaje se prevé que comience a finales de 2023 o principios de 2024, generando posteriormente un volumen de energía equivalente a más de un tercio de la energía que se consume en La Rioja.
Romero ha detallado que la inversión para este proyecto proviene de inversores privados de La Rioja y del ámbito nacional (sin subvenciones públicas), poniendo el acento en que Aresol Renovables es la compañía encargada del diseño del proyecto, pero también de su construcción y su posterior explotación.
La responsable de Ingeniería de Aresol, Diana Alcalde, ha explicado que este incluye la construcción de nueve parques fotovoltaicos independientes con una potencia total agregada de 360 megavatios (MW), que evacuarán su energía en el nudo de transporte de la subestación de Haro.
“Se trata de un proyecto ejemplar en su implantación, ya que se minimiza el impacto de las líneas que transportan la energía hasta el nudo”, ha detallado. De esta forma, los nueve parques evacuan su energía mediante líneas soterradas de media tensión -unos 30 kilómetros- y solo hay una única línea aérea de alta tensión de 11,7 kilómetros hasta el nudo (los últimos 430 metros en Haro van soterrados).
La línea de alta tensión transcurre por Cidamón, San Torcuato, Zarragón, Casalarreina, Anguiciana y Haro, sin que haya prácticamente afección al viñedo, al ser zona de secano, sobre la que, además el impacto ambiental será mínimo, ha precisado Romero. Ha incidido en que solamente se ha utilizado 1,5 hectáreas de viñedo, que se trasplantará, y la línea aérea que transcurre por viñedos son solamente 238 metros.
Cincuenta empleos directos
En la fase de ingeniería y desarrollo trabajan desde 2020 medio centenar de personas, aunque estas se ampliarán durante la de construcción (durará año y medio). Lo harán de forma directa unos seiscientos trabajadores, quienes darán paso en la fase de explotación (cuarenta años) a otras cincuenta personas que trabajarán de forma directa (la mayoría empleo local).
Los ayuntamientos donde se ubican los parques -Bañares, Hervías y Cidamón- percibirán unos cinco millones de euros en concepto de Impuesto sobre Construcciones. Estos municipios también recibirán unos 750.000 euros al año, de forma recurrente y durante los 40 años de explotación, entre el Impuesto de Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICES) y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE).
Además, la empresa ha alcanzado acuerdos con más de doscientos propietarios de los terrenos, con los que se han firmado contratos de alquiler a cuarenta años con una renta anual pactada de 1.250 euros por hectárea.
“Mínimo impacto ambiental”
Romero ha incidido en el mínimo impacto ambiental y paisajístico que generan estas infraestructuras, de cuya construcción Aresol ya tiene experiencia en Extremadura, Toledo, Aragón, Madrid, Levante y Tenerife, donde ha construido parques fotovoltaicos y en otras zonas donde los tiene en construcción.
Adicionalmente a este proyecto, la empresa contempla otros proyectos, que ayudarán a mitigar los efectos de la despoblación y el reto demográfico de la zona, como un centro de formación de energías renovables y la implantación de siete colmenares con medio millar de colmenas.
También está prevista la creación de un centro de divulgación de energías renovables y de un proyecto de apicultura fotovoltaica en el entorno de los parques. El responsable de Aresol ha reprobado la denuncia de posicionamientos “maximalistas que se oponen a todo” en lo referente a la creación de este tipo de instalaciones.
Por último, Romero ha reconocido que este proyecto ha tenido que enfrentarse a alegaciones, recursos e impugaciones, que el Gobierno ha desestimado, por lo que ha sido cuando, una vez obtenidos los permisos y resueltas todas las impugnaciones, cuando se ha iniciado su proceso de inicio.
