Educación

“El anterior sistema de escolarización generó fraudes en el empadronamiento”

FOTO: EFE/ Raquel Manzanares.

El consejero de Educación, Alberto Galiana, ha afirmado este jueves que, “para una sociedad plural, hace falta una educación plural” y, con ello este Gobierno regional se “va a comprometer y desarrollar su actividad en esta legislatura”, en la que también “vamos a seguir con la bajada de las ratios”.

Galiana ha respondido así a una interpelación en el Pleno del Parlamento riojano de la portavoz del Grupo de Podemos-IU, Henar Moreno, a quien ha indicado que “la Formación Profesional (FP) es una apuesta de este Gobierno de La Rioja, región que tiene ya más de 8.000 alumnos, y queremos que sigan creciendo”.

“Profundizaremos en cuestiones como el Bono infantil de 0 a 3 años, la gratuidad de los libros de texto y las ayudas de libros y de comedor”, ha expresado el consejero, quien ha destacado su “preocupación por la transversalidad en las políticas educativas”, para lo que trabajará de forma conjunta con la Consejería de Salud.

Ha destacado que los procesos de estabilización de docentes “han sido complejos y nos los hemos encontrado en una etapa avanzada” tras la toma de posesión del nuevo Ejecutivo el pasado julio. “Lejos de ser un aspecto sin problemas, los ha provocado, y muchos, y tienen que ver con la gestión del anterior Gobierno autonómico y también del Ejecutivo nacional con su dejación de responsabilidades”, ha asegurado Galiana, quien ha apuntado que estos procesos de estabilización han dejado “cientos de recursos administrativos que se están resolviendo”.

Respecto a la zona única de escolarización, ha apuntado que esta medida estaba en el programa electoral del PP, que ha sido “apoyado por una mayoría absoluta de los riojanos”, ya que su eliminación “limitaba la libertad de elección, y nos habíamos encontrado con fraudes en el empadronamiento”.

“Centros-gueto”

Por su parte, Moreno ha indicado que la zona única de escolarización “acabará por conseguir que haya centros-gueto en esta comunidad autónoma, porque una familia no solo puede no elegir un centro concertado por una cuestión económica, sino de creencias religiosas”.

“¿Por qué puede haber centros que no impartan la asignatura optativa a la religión?, ¿por qué no controlamos que no se pidan cuotas prohibidas, como la de matrícula?, e incluso donde no se incumple la ley hay una línea económica, por ejemplo, nadie irá a un centro privado o concertado en el que tenga que pagar el doble por el comedor que en el público”, ha incidido.

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