Álvaro Rodríguez del Moral.- Morante de la Puebla tendrá que afrontar un largo e intenso periplo de más de 3.000 kilómetros en una avioneta que le llevará sucesivamente por las plazas de Huesca, El Puerto de Santa María y Pontevedra para reaparecer en los ruedos tras superar la lesión de muñeca que le había mantenido en el dique seco desde el pasado 11 de julio.
Desde el percance de Badajoz, el 24 de junio, las actuaciones del matador cigarrero han sido contadas: volvió en Zamora, volvió a ser cogido en Vila Franca de Xira, pudo reaparecer fugazmente en Pamplona y, desde entonces, aficionados, profesionales y empresas han esperado como agua de mayo el retorno de un torero imprescindible para entender la temporada 2023.
En las imágenes difundidas por su entorno se le puede ver subiendo al avión en compañía de su apoderado. Le tiene que trasladar a Huesca donde está prevista su reaparición este mismo viernes después de desistir de hacer lo propio el pasado sábado en el coso de La Merced de Huelva por no encontrarse recuperado.
En Huesca está anunciado junto a Joselito Adame y Ginés Marín para estoquear un encierro de Antonio Bañuelos, según confirmó días atrás la empresa Tauroemoción, la firma que dirige el empresario Alberto García, sin que una vez más mediara ningún tipo de anuncio, comunicado o confirmación oficial por parte de un torero que mantiene una peculiar política de comunicación.
Morante, en la feria de San Mateo del pasado año. | FOTO: Eduardo del Campo.
De Sevilla a Huesca tendría que cubrir una distancia –si habláramos de carreteras- de casi mil kilómetros, y más de mil es la distancia que separa la ciudad aragonesa del Puerto de Santa María. Morante está anunciado este sábado en su Plaza Real, en la que no pudo actuar el pasado domingo, junto a Talavante y Pablo Aguado y los toros de Juan Pedro Domecq.
Aún tendrá que echarse a la espalda otros 860 kilómetros para hacer el paseíllo el domingo en Pontevedra con El Juli y José María Manzanares y despachar las reses previstas de Santiago Domecq. Se trata de una singladura aérea de 3.000 kilómetros que el diestro de La Puebla cubrirá en tres días, volando sobre la piel de toro sin tener que soportar la incomodidad de los interminables viajes por carretera.
Un intenso tramo de reencuentro
A este frenético fin de semana de reencuentro hay que unir otros compromisos sin dar tregua al descanso: de Pontevedra tendrá que viajar a San Sebastián donde volverá a alternar con Manzanares y Talavante y los toros de Juan Pedro en la tarde del lunes
Y de la capital donostiarra tendrá que trasladarse al litoral opuesto. El martes, día de la Virgen de Agosto, tiene que alternar en Málaga con Juan Ortega y un sustituto de Cayetano para pasaportar otro envío de Juan Pedro Domecq.
El viaje continúa: de Málaga, volviendo a cruzar España, a la localidad riojana de Alfaro, donde volverá a coincidir con Ortega, además de Diego Urdiales; los toros previstos pertenecen al hierro de Guadalmena. Este intenso tour de reencuentro concluye el día 17, en la plaza de Gijón, recuperada para el toreo gracias al vuelco político y la perseverancia del empresario Carlos Zúñiga.
A partir de ahí, el matador cigarrero –si no surgieran complicaciones indeseadas- podría tomarse un breve respiro de dos días antes de ponerse de nuevo en ruta; le espera un compromiso de menor trascendencia en la localidad manchega de Tomelloso antes de subir el último gran puerto de la temporada en Bilbao con dos jornadas consecutivas los días 23 y 24 de agosto.
Morante, en Arnedo en marzo del pasado año. | FOTO: Eduardo del Campo.
Desde ese punto, su temporada discurrirá por los ruedos de Almagro (Ciudad Real), Tarazona de la Mancha (Albacete), Linares (Jaén), Cuenca, Tarazona de Aragón (Zaragoza), Palencia, la goyesca de Ronda (Málaga), Lisboa, Don Benito (Badajoz), Valladolid, Dax (sur de Francia), Murcia, Albacete, Guadalajara, Salamanca, Nimes (sur de Francia), Logroño, Salamanca y Ubeda (Jaén).
Será antes de pisar el albero de la plaza de la Maestranza en la que está anunciado, después de cortar el histórico rabo en la Feria de Abril, para dos tardes consecutivas que incluyen la despedida de El Juli, que ha escogido la plaza de la Maestranza para decir adiós a los ruedos.
Morante aún tiene firmadas dos corridas más: en Valencia, el día 8 de octubre, en la que alternará con Alejandro Talavante y el novillero Nek Romero dentro de la miniferia de la comunidad, y en Madrid, en la llamada corrida de la Hispanidad, el 12 de octubre, acompañado por Alejandro Talavante, el mexicano Isaac Fonseca y los toros de la ganadería de Núñez del Cuvillo.
